Thirty days | DekuKatsu

Beso.

Había salido a hacer las compras a último minuto, su novio solía decirle todo el tiempo que no se atrasara con eso, pero Izuku era tan –pero tan– despistado. Solía terminar sin nada en la casa para comer y solo entonces salía a hacer la compra.

Esperaba que su novio no se diera cuenta que otra vez dejo pasar el tiempo de la compra, sabía desde antemano que se enojaría mucho y no le gustaba hacer enojar mucho a su Kacchan.

—A ver que dice la listaa. —murmuró despues de haber agarrado el carrito en el supermercado— Ramen, aceite, huevos... —empezó a leer dirigiéndose por los pasillos largos del supermercado. Luego de treinta minutos dando vueltas por todos los pasillos se dio de cuenta que los huevos los tenía que recoger en caja ya que normalmente no los vendían sueltos en los supers grandes, se dio una cachetada mental al notas que realmente era un idiota y sin su novio no era nada.

Luego de recoger un par de cosillas mas, se dirigió al ala fría para recoger carnes, frutas y leche, cuando dio la vuelta para agarrar el pasillo lo vio, su novio, estaba justo enfrente de el.

Izuku casi grita del susto, pero al darse cuenta de que Kacchan no lo había visto trato de escapar de una vez, sin embargo no noto la pila de latas detrás de el y termino chocando con todo y haciendo un desastre en medio del pasillo.

—Ay, no —Izuku lamento, pero se lamento mas al mirar al frente y ver a su novio de brazos cruzados frente a su carrito— K-Kacchan... yo... eh —antes de que pudiera seguir buscando una excusa, Katsuki suspiro y se adelanto frente a el para empezar a recoger las latas.

—¿No vas a ayudar a limpiar tu desastre, Deku? —preguntó Katsuki con un tono de voz tan calmado, que le erizo todos los vellos corporales al pobre Izuku. Katsuki chisto al ver a su novio tonto para detrás como una estatua— ¡Puedes apurarte, bastardo! —regaño.

Izuku fue como una bala a ayudar, luego de unos cinco minutos llego el ayudante del supermercado y les dijo a ambos que se podían retirar de la escena porque ya venían a limpiar. Izuku se disculpó un montón de beses haciendo reverencias casi hasta el suelo. Katsuki lo miraba calmado, pero Izu podía notar la chispa de rabia en su mirada.

—Muévete, idiota. —le dijo en un gruñido, a lo que Izuku solo enmudeció y se apresuro a tomar su carritoy seguir a Katsuki.— Creí haberte hecho la lista hace dos semanas cuando ya no te quedaban muchas cosas en casa, Deku. —le mencionó molesto.

—Kacchan estuve ocupado y lo olvide, lo siento.

—Ocupado... —murmuró Katsuki para luego suspirar.— Izuku, eres tan tonto. —se detuvo para tomar leche y algunas bebidas frías. Y cuando lo volteo a ver lo fulmino con la mirada, Izuku rodeo el carrito para abrazarlo. Al notar las intenciones se hizo el difícil y se volteo, sabía que al rechazar así un abrazo su novio desistiría, no se esperaba que en vez de dejar la acción lo abrazara por la espalda poniendo su barbilla sobre su cabeza.

Izuku era alto, le sacaba mínimo una cabeza a Katsuki. Aveces eso hacía que el cenizo se sonrojara y se calmara, Izuku sabía eso y por eso hizo aquella acción.

Katsuki suspiro sabiendo de la intención que tenía el otro, le empujo con el codo, haciéndolo reír— ¡¿Que estas haciendo?! ¡Quítate! —grito siendo escandaloso, Izuku le pidió silencio con un sonido vocal en su oído, la carita de Katsuki se torno como un tomatito con esa acción— Zuzu... —susurro con las mejillitas rosaditas.

Izuku sonrió al notar que domo a la bestia y con cuidado logro voltear a Katsuki, teniéndolo de frente pudo notas lo rojito que estaba y como sus ojitos estaban cristalizados y su boquita formaba un puchero.

¡Demasiado tiernoooo!

Fue el pensamiento de Izuku, quien no pude evitar acercarse cada vez un poquito mas, cuidando de ver si Katsuki le rechazaba al estar tan cerca de esa linda boquita color melocotón y notar que Katsuki había cerrado los ojos no pudo evitar y le planto un beso.

La atmósfera se tornó cálida entre ellos dos, y sus bocas se movían en un compas suave, un ambientes romántico.

Un personal del supermercado veía las cámaras de seguridad detenidamente cada cierto tiempo, mientras comía donas, su nombre era Kaminari Denki y trabaja de turno cada semana por seis horas, cuando fue a agarrar su tercera dona noto una silueta extraña en una de las cámaras.

Al agrandar la imagen para asegurarse de que veía bien, fue que lo noto, dos personitas se besaban apasionadamente en el pasillo de las bebidas lácteas y frías, al ver como las manos del mas alto se metían debajo del suéter del mas bajo se apresuro a hablar por el micrófono.

—Ahm, amigos del pasillo de lácteos, recuerden que esto es un supermercado... —enseguida noto como se separaban abruptamente y se sonrojaban al máximo para tomar el carrito y huir de allí.

Kaminari solo se carcajeo desde su silla y siguió comiendo sus donas, nada como du trabajo...

Beso, listo.✅

¡Dos actualizaciones seguidas!
Espero seguir así y terminar antes de navidad.