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2. Tentado

Sus párpados se movieron levemente y Jun Lixuan recuperó gradualmente la conciencia, repentinamente abrió los ojos, la luz deslumbrante hizo que Jun Lixuan entrecerrara los ojos y quiso levantar la mano para bloquear la luz, pero tiró de la herida en su hombro, lo que hizo que Jun Lixuan sintiera dolor y frunciera el ceño.

¿Qué está pasando?

El dolor en su hombro y los demás dolores en el cuerpo hicieron a Jun Lixuan darse cuenta de que algo estaba mal. Él obviamente estaba muerto, ¿Cómo es que puede sentir algo? De hecho resultó herido el día de la usurpación y arresto, pero fue en el abdomen. Más tarde, Ling Qiyang le trajo en secreto la medicina para sus heridas. Aunque no era profundo, perdió la costra y dolía al tocarlo.

Movió su mano derecha y se acarició el abdomen. Aunque estaba debajo de su ropa, Jun Lixuan no tocó ninguna herida, solo su hombro izquierdo estaba lastimado.

La puerta fue abierta suavemente desde el exterior y Ming Li, el sirviente más fiel de Jun Lixuan, entró con medicina hervida. Después de ver a Jun Lixuan que abrió los ojos, exclamó sorprendido: «Maestro, está despierto. ¡Vengan, el príncipe está despierto!».

Después de eso, hubo confusión y caos. Los médicos, quienes fueron por el gran monje y quienes fueron a buscar al príncipe Yi y al sexto príncipe...fue un alboroto.

Jun Lixuan observó a Ming Li, sintiendo solo el dolor de su cabeza palpitando. Ming Li murió en manos de los guardias enviados por el cuarto príncipe para asesinarlo por su rebelión, pero ahora está frente a él, vivo, todavía riendo y animado.

«Alteza, ¿Se siente mal? ¿Qué le duele? El doctor estará aquí pronto». Al ver que el rostro de su maestro estaba mal, Ming Li pensó que la herida de Jun Lixuan le dolía demasiado.

«Está bien, no es necesario que llames a un médico». Jun Lixuan calmó a Ming Li y le preguntó: «¿Qué año es este?».

Sin titubear, Ming Li tenía su respuesta: «Respondiendo al príncipe, ya es el séptimo día de noviembre. Tenía fiebre alta cuando regresó a Beijing debido a una agenda ocupada. Al emperador le preocupaba que estuviera solo en casa, así que lo llevó directamente al palacio imperial para cuidarlo. Calmó al sureste y el emperador dijo que le gustaría recompensarle nuevamente, esperando hasta que usted despierte».

Jun Lixuan frunció el ceño. Se instaló en el sureste a los veinte años, pero recordaba que no resultó herido en la batalla.

«Por cierto, el Rey Yi vino a verlo esta mañana. La emperatriz y su alteza real el sexto príncipe también están muy preocupados. Ahora que se despertó le pediré a alguien que informe sobre su situación». Ming Li sonrió. Ayudó a que Jun Lixuan se levantara y tomó otra almohada para que se apoyara.

«¿La emperatriz?». Jun Lixuan estaba aturdido. La emperatriz debió haber fallecido este verano, como es que...

«Su alteza, perdóneme por ser tan hablador. Aunque la emperatriz y usted no son tan cercanos, la emperatriz realmente se preocupa por usted. Cuando volvió con una herida, la emperatriz lloró tanto que sus ojos se hincharon». Ming Li le dio la medicina caliente a Jun Lixuan.

Después de tomar la medicina, Jun Lixuan se despertó completamente. Él realmente renació y regresó a cuando tenía veinte años. Aunque todo era un poco diferente de su vida pasada, se le dio una oportunidad para enmendar sus errores.

Comparado con su sobriedad actual, todo en la vida anterior parecía un sueño. Traicionó a su padre, malinterpretó a su hermano, alienó a su madre y decepcionó a Ling Qiyang... pero ellos nunca se dieron por vencidos con él de principio a fin...