ʏᴏᴜ'ʀᴇ ᴍɪɴᴇ ™

023

Su hogar estaba lleno de risas, amor y los preciosos momentos de ver crecer y florecer a su hijo. Continuaron apreciando su relación como marido y mujer, asegurándose de nutrir su amor en medio de la alegría y las responsabilidades de ser padres.

Clara y Jaekhyung habían recorrido un largo camino desde el primer día que se conocieron. Desde el momento en que se miraron a los ojos, sus vidas se entrelazaron, llevándolos al amor, al matrimonio y ahora a la paternidad. Juntos crearon una familia construida sobre una base de amor, confianza y sueños compartidos.

En los años que siguieron, Clara y Jaekhyung recordarían su viaje con gratitud, sabiendo que su amor no solo había cambiado sus vidas, sino que le había dado a su hijo un comienzo extraordinario en la vida. Su historia de amor continuó desarrollándose y su familia se fortaleció cada día.

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- ¡¡Jaekyung ven rápido!! - Grito clara haciendo que este dejara de estar en su gimnasio que tenia en su casa para salir corriendo al living, al llegar pudo ver como Max, su hijo, estaba dando sus primeros pasitos, haciendo que una sonrisa se formara entre ellos.

Jaekyung no dudo en alzar al pequeño y darle un fuerte abrazo junto con clara al lado, aquellos momentos que se hacian importantes para ellos. Se dio un pequeño beso.

- Eres un gran padre - emitio Clara sonriendo a este, mientras sostenia la mano de Max.

- Mañana ira a entrenar,sera un gran boxeador -emitio Jaekyung en tono de broma, clara lo miro de mala manera.

-No, claro que no, mi hijo no peleara.

- Claro que lo hara - alzando a max hasta lo mas alto haciendo que este sonriera.

Mientras Jaekhyung levantaba juguetonamente a Max, su risa llenó la habitación. Clara no pudo evitar sonreír ante el vínculo entre padre e hijo, un vínculo que atesoraba todos los días. Ella negó con la cabeza juguetonamente ante las burlas de Jaekhyung.

- No, mi hijo será lo que quiera ser - dijo con firmeza, pero con suavidad en la voz - Si quiere ser boxeador, es su decisión. Pero sea cual sea el camino que elija, lo apoyaremos y lo amaremos incondicionalmente.

Los ojos de Jaekhyung brillaron con orgullo mientras miraba a Max, sosteniéndolo cerca. Él asintió, entendiendo el sentimiento de Clara.

- Tienes razón, Clara. Nuestro hijo tiene su propio viaje en la vida y estaremos allí para guiarlo, pase lo que pase.

Y con eso, continuaron celebrando los preciosos momentos de los primeros pasos de Max, sabiendo que su amor y apoyo lo convertirían en una persona segura y compasiva. Alentarían sus pasiones y sueños, fomentando un entorno en el que se sintiera seguro para explorar y seguir su propio camino.

A medida que Max crecía, Clara y Jaekhyung abrazaron cada etapa de su desarrollo, desde sus primeras palabras hasta sus propios intereses únicos. Reconocieron sus roles como padres, no solo para protegerlo y guiarlo, sino también para ser sus mayores animadores. Celebraron sus éxitos y lo mantuvieron cerca durante sus desafíos, recordándole siempre su amor inquebrantable.

Juntos, como familia, Clara, Jaekhyung y Max crearon un hogar lleno de risas, calidez y apoyo infinito. Su amor mutuo se hizo más fuerte con cada día que pasaba, y atesoraban los momentos grandes y pequeños que componían su hermosamente imperfecta, pero inmensamente satisfactoria, vida juntos.

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Hoy, Jaekyung tenia una gran pelea, una de las mas importantes ya que peleaba con el mejor boxeador del mundo, si ganaba esta pelea, su vida iba a cambiar totalmente, no solo sera conocido en los paises cercanos, sino en todo el mundo. Mientras se acercaba al ring sus musculos se tensaban, subio al ring encontrandose con su rival al frente, sus ojos se fijaron en el, hasta que se desviaron arriba donde se encontro Clara y max, orgulloso de el, con el bullisio de la gente gritando no podia escuchar nada pero sus oidos si pueden localizar aquellas vocesita que decia.

- Tu puedes papá - haciendo que este sonriera orgulloso.

El corazón de Jaekhyung se llenó de orgullo mientras miraba a los ojos a Clara y Max en la multitud. El sonido de la multitud rugiente pareció desvanecerse en el fondo mientras se concentraba en su apoyo inquebrantable. Respiró hondo, canalizando su aliento y amor, permitiéndole alimentar su determinación.

Con cada golpe que lanzó y cada esquiva que hizo, Jaekhyung luchó con una ferocidad inquebrantable. Había entrenado incansablemente para este momento, llevando su cuerpo y mente al límite. La intensa adrenalina llenó sus venas, sus músculos moviéndose con precisión y poder. Podía sentir el peso del mundo sobre sus hombros, pero su concentración permaneció inquebrantable.

El tiempo parecía desdibujarse a medida que pasaban las rondas. El oponente de Jaekhyung era duro, habilidoso e implacable, pero Jaekhyung lo igualó golpe por golpe. El sudor goteaba por su rostro, los latidos de su corazón latían en sus oídos, pero se negó a dejar que la fatiga o la duda impregnaran su ser.

En un momento emocionante, Jaekhyung se encontró lanzando una combinación de golpes que envió a su oponente tambaleándose hacia atrás. La multitud estalló en aplausos, su energía y apoyo cayeron en cascada sobre él. Era como si el tiempo se hubiera detenido, y todo lo que importaba era esta lucha, este momento y la increíble fuerza y ​​resistencia que poseía.

Con una oleada final de determinación, Jaekhyung entregó un poderoso golpe que envió a su oponente a la lona. El árbitro contó, y mientras la sala contenía la respiración, la multitud estalló en vítores ensordecedores cuando Jaekhyung salió victorioso.

Cayó de rodillas, una mezcla de agotamiento y euforia inundándolo. El mundo a su alrededor zumbaba con aplausos y celebraciones, pero era la voz de Clara la que buscaba en medio del caos.

Clara y Max corrieron al ring, sus rostros irradiaban alegría y orgullo. Jaekhyung los abrazó con fuerza, lágrimas de victoria y amor corrían por su rostro. Eran un equipo, una familia, y esta victoria era su triunfo.

En ese momento, Jaekhyung se dio cuenta de que había logrado algo más que fama y reconocimiento. Se había probado a sí mismo y al mundo que con amor, apoyo y determinación inquebrantable, todo era posible.

Mientras Clara y Max lo abrazaban, Jaekhyung sabía que sin importar los desafíos que se presentaran, siempre estarían a su lado, animándolo. Con su amor como base, no había límite para lo que podía lograr. Juntos habían creado un legado de fuerza, resiliencia y amor inquebrantable.