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Nos encontramos en un mundo, dominado por la magia, pero también por un estatus social, a los plebeyos se les hace mucho más difícil surgir, pero a nuestra protagonista Lilith no le importa mucho el estatus, menos en su situación, fue adoptada por la familia Roselei, ahí conociendo a su hermana mayor, la que se volvería su mejor amiga, Charlotte Roselei, fue encontrada a los 5 años, en una pequeña canasta, su actual familia, sin importarle su origen, la acogió como una igual, adorando a sus hijas por igual, llenadolas de amor y cariño, no había un día aburrido en esa familia, sus padres se encargaban de instruir a sus hijas en el ámbito de la batalla, sabiendo que se unirían a los caballeros mágicos, Charlotte desarrollo ese deseo debido a su maldición, y Lilith, al querer acompañar a su hermana, luego desarrollaría su deseo de manera propia al recibir su grimorio, de cuatro hojas, queriendo superarse, Charlotte entro a los caballeros mágicos, luego de un tiempo, fundo su orden las Rosas azules, siendo una orden donde en su mayoría solo habían mujeres, Charlotte le ofreció a Lilith,que no diera el examen de caballería, dejándola entrar inmediatamente a su orden, pero Lilith se negó, quería entrar a una por su propio esfuerzo, todo comienza en el examen de caballería...

Lilith

Suena la alarma, suena y suena y suena, no quiero levantarme, de verdad, no quiero, escucho como abren la puerta de golpe, por la escencia de querer matarme y el maná que siento de su parte y también el que tengo unas espinas pinchando mis brazos, se que es Charlotte.

-Levantate ya mujer, son las 10 de la mañana, y el examen es a las 12. Dice mientras abre las cortinas de par en par haciendo que entre la luz del sol, siento que me hago ceniza.

-Lotti, ya no quiero ir, mejor duermo todo lo que me queda de vida. Mientras me daba la vuelta y me tapaba hasta las orejas, y siento como agarra mi pie y me tira de la cama.

-Levantate ya Lili, te tienes que ir. No la podía ver pero se que tiene una sonrisa en el rostro, comienzo a enderezar mi cuerpo mientras tiro hacia atrás mi mata de crespos castaños y blancos.

-Ya desperté, Ya desperté, eres cruel conmigo. Mientras me inclinaba y abrazaba sus piernas.

-Si no te levantas ahora, voy abrir la ventana y te voy a tirar de un solo golpe hasta que llegues a la capital. Es totalmente capaz de hacerlo, lo sé perfectamente, no sería la primera vez que hace algo así.

-Vale, ya me voy entonces, comprendí que no me quieres aquí. Puse el dorso de mi mano en mi frente mientras me tiraba hacia atrás dramáticamente.

-Lili apúrate vas a llegar tarde y tu te vas a enojar no yo.

- Que ya voy amargada. Me prepare para salir corriendo rápidamente.

- Yami no te querrá con esa actitud. Y salí como alma que pena el diablo a encerrarme al baño mientras Charlotte me perseguía y yo le gritaba "lo siento" llegué al baño y me bañé tranquilamente, termine de arreglarme y me despedí de mamá y papá para irme con Charlotte afuera de la casa

- Lista?

- Más que lista. Una sonrisa se formó en el rostro de ambas mientras nos montamos en nuestras escobas, me senté de lado con mis tobillos cruzados mientras íbamos conversando amenamente.

- Lotti que harías, si no elijo tu orden, en el hipotético caso que me elija otra y me llame la atención?

- Será tu decisión Lili, se una mujer decidida, pelea por lo que quieres, y una vez que lo tengas, no lo descuides, cuídalo aún más, que yo sea la capitana de una orden, no significa que estás obligada a elegir esa.
Por esa y más razones amo a mi hermana, ella es la mejor siempre lo será, siempre.

- Gracias Lotti.

Seguimos nuestro camino hasta donde se daría el examen, nos separamos cuando llegamos, ella tenía que ir con los capitanes y yo tenía que ir a inscribirme, fuí la número 165 iba detrás de un chico con un grimorio verde de cuatro hojas, su maná y presencia eran imponentes, y cerca de el, había un chico pequeño y ruidoso, demasiado ruidoso, no sentí maná de parte de el, pero si otro flujo, extraño, nunca lo había sentido, perdidamente mis pensamientos, el enano se me atravesó y yo no lo ví, casi, casi beso el suelo si no fuera por una mano que me agarro antes de hacerlo. Me topé con el chico del trébol de 4 hojas, su cabello negro y ojos dorados.

- Estás bien? Asta ten más cuidado.
Dijo regañando al peligris, y viéndome con atención.

- Ah? Si, si, perdón, estaba distraída.

Yuno

- No te disculpes, Asta estaba siendo imprudente

- ¿¡Ah!? ¿¡Por qué me echas la culpa Yuno!? ¿¡Bien que desde que llegamos la estás-
El sonido de Asta se escuchó amortiguado debido a que le tape la boca antes de que siguiera hablando, casi me delataba, pues si, desde que llegamos me percate de la presencia de ella, y lo linda que era, voltee a mirarla mientras mi semblante se mantenía imperturbable

- Asta solo dijo perdón por mi imprudencia.

- ¿Uh? Está bien, no pasa nada, muchas gracias...

- Yuno, llámame Yuno, tu nombre es?

- Pues muchas gracias Yuno, mi nombre es Lilith Roselei.

- No hay de que Lilith.
Le solté la boca al enano una vez que dejó de hablar mientras los tres nos encaminamos a dentro del coliseo para esperar el inicio del examen, mientras seguía hablando amenamente con Lilith.

- De dónde vienen ustedes?

- De un pueblo en la región olvidada, Hage.

- ¿Uh? Dónde está el craneo del demonio?

-Exacto, ahí crecimos Asta y yo con otros niños de la iglesia, nos dejaron a ambos al mismo tiempo y el padre nos encontró y nos dió un hogar.

- Qué lindo, debe ser un linda familia.

- Lo es.

Derrepente unos pájaros negros con el pecho rojo llegaron, dijeron que que se acercaban a los que menos maná tienen, y la voz de Asta nos hizo voltear a verlo.

- Espérame Yuno, yo me convertiré en el rey mago! Ay! Ay! Ay!

Estaba lleno de pájaros.

-Imposible. Mientras me volteaba y veía a Lilith la cual se estaba riendo ligeramente, Asta choco con un tipo grande y corpulento, espantando a todos los pájaros, este lo agarro de la cabeza apretándolo.

- Quieres morir?

- ¿Ah? Yami-san, que haces aquí? No puedes matar a un novato vámonos.

- Estaba buscando el baño y mi perdí, tienes suerte de no haber muerto.
Se acercó a Lilith y le revolvió el cabello.

- Hola mocosa.

- Hola Yami.
Y se fue con el otro tipo de cabello castaño claro, cuando entraron todos los capitanes, mientras escuchabamos a la gente hablar y presentarlos.

- Bienvenidos al examen de admisión a los caballeros mágicos.





No me gustó😭😭😭😭😭😭 algún día lo cambiaré 😪😪😪

Frutillas Con Chocolate Donde viven las historias. Descúbrelo ahora