Rings of Fates (Volumen 1)

Capítulo lll Práctica conjunta con la clase becada y un regalo

Han pasado unos días desde que las clases comenzaron.

En la noche me puse a leer un poco, un libro de un subgénero poco llamativo e interesante.

Se trataba sobre una novela de una aventurera que viajaba por el mundo en busca de un antídoto para curar la enfermedad de su madre. Ella se encontraba en situaciones complicadas, pero otra aventurera la rescataba de cualquier peligro. Me interesó el concepto sobre una aventura de dos chicas en busca de sus propias metas... Hasta que me di cuenta de que era una novela "Yuri". Creo que así le decían a la demografía sobre relaciones entre chicas en mi anterior vida.

Como sea, el tema es que me enganché y me lo leí hasta que amaneció. Pensaba que sería más como una novela de traiciones y misterio, pero la relación de las protagonistas se desarrolla mejor que una novela romántica cliché. Además de que logran complementar bien el concepto de romance con acción fantástica; siento como me tranquiliza ver una relación pura y la determinación de la protagonista por obtener el antídoto me resulta muy gratificante.

Hasta que me desperté con un golpe de realidad, era hora de ir a la escuela. Me cambié el pijama y me puse el uniforme. Desayuné la comida hecha por Led y me puse en marcha con Selene.

Al salir de la cafetería con Selene, apareció Fernanda en una carrocería de apariencia muy llamativa y difícil de preguntar dónde habrá sacado semejante vehículo.

―Buenos días, Selene. Y también a ti, Oshiro ―por primera vez, Fernanda me mira normal y me saluda adecuadamente.

―Buenos días, Fernanda.

―Buenos días.

Es un gran paso para que Selene se abra a más personas y confíe en sus talentos.

―Por favor, Selene. Te llevaré a la academia en mi transporte. No soportaría ver a mi amiga ir caminando con el sol que hace.

― ¿En verdad? ¡Gracias!

Qué oportuno. Pensaba que Fernanda quería hacer algo malo, pero creo que lo pienso demasiado. Mientras no tenga intenciones de hacerle nada malo a Selene, dejaré de sospechar de ella.

― ¿Qué hay del tío Roy? ―Selene le pregunta a Fernanda.

― ¡Cuánto lo siento! Pero en mi transporte sólo hay espacio para tres personas. Sería Selene, yo, y mis sirvientes.

―No te preocupes, Selene. No quiero perder movimiento en mis piernas. Así que ve con Fernanda.

―Sí... Pero...

―Vamos, no hagas esperar a tu amiga.

― ¡Sí!

Después de darle ánimo a Selene para que subiera al transporte, Fernanda se me queda mirando sin expresión alguna.

―Protegeré a Selene de ti, Oshiro.

― ¿Eh?

No entendía su forma de hablar. Pero una cosa sí me quedó clara: Fernanda me odia como si fuera un ogro de la cueva más peligrosa del mundo.

Luego se sube al transporte y se van.

-Qué comienzo de día... Toca caminar solo.

Caminé hasta llegar a la academia. No me quejo, ya que no era un gran reto que superar. Pero la imagen de Fernanda me hace plantear una duda.

―"Protegeré a Selene de tu ser", ¿eh?

No sé si se habrá dado cuenta de mi verdadero yo, pero no permitiré que entren en mi vida privada o en la de mi familia. Por lo menos no tiene intenciones de hacer daño a Selene. Si va a proteger a Selene, me quedo más tranquilo. Creo.