El Chico Roto - JJ Y Kie

Capitulo 1

Punto de vista de JJ

-La casa de John B-

Ha pasado una semana desde que John B y Sarah murieron. Todavía no puedo procesar el hecho de que mi mejor amigo se haya ido. Nunca hubo un memorial para John B y los Pogues y nunca pude animarme a hacerlo. Cada vez que pensábamos en él o lo mencionábamos, simplemente rompíamos a llorar. Mi corazón ha estado pesado toda esta semana porque no solo siento que perdí a un amigo. Siento que perdí a un miembro de la familia, a un hermano. Mi padre es un pedazo de mierda borracho y abusivo, y las únicas personas que me quedan en mi vida son Pope y Kiara. Pero siento que realmente se están volviendo cercanos el uno con el otro, así que soy solo yo. Solo yo en este mundo lleno de tonterías y caos. A veces me pregunto qué estoy haciendo aquí. Honestamente, estoy empezando a perder la voluntad de vivir.

Durante toda esta semana hemos estado viniendo a la casa de John B para hablar y recordarlo. Este lugar es todo lo que nos queda de nuestro mejor amigo, y lo único que mantiene nuestros recuerdos. Pope y Kie estaban sentados en el sofá, con la cabeza de ella apoyada en su hombro. De los tres, nunca imaginé que Kie se quedaría con Pope. Ella siempre ha sido de voluntad fuerte e independiente y, honestamente, no la vi terminar con el coño más grande del grupo. Siempre he intentado hacer algo con Kiara, pero ella nunca me lo devolvió. Tal vez solo me ve como un hermano. Me desanima un poco que esté rompiendo la regla de no masturbarse con un pogue, pero al menos, si ella es feliz, eso es todo lo que podría desear para ella.

-¡JJ! ¡Hola! -dijo Kiara, sacándome de mi estupor-. ¿Estás bien?

-Sí, estoy bien-respondí.

"Me estuviste mirando por un largo rato, estaba empezando a asustarme", dijo, levantando la cabeza del hombro de Pope.

-Oh, lo siento, estaba pensando-dije.

"¿Sobre qué?" preguntó Pope.

-Nada importante -mentí. No podía decirle que estaba pensando en su novia, que no es su novia, así que simplemente dejé de hablar.

-Chicos, se está haciendo tarde, deberíamos irnos a casa. Desde el incidente de John... -hizo una pausa-, mis padres han sido estrictos conmigo cuando no quiero salir hasta muy tarde. Probablemente estén muertos de miedo ahora mismo.

"Lo mismo pasa con mis padres", respondió Pope.

"Sí", respondí.

Kiara me dirigió una media sonrisa sabiendo la situación entre mi papá y yo.

Kiara fue primero a la casa de Pope para dejarlo.

-Te veré mañana -dijo Pope, sonriendo, inclinándose y dándole un beso en la mejilla a Kiara.

Ella sonrió y asintió con la cabeza, diciendo adiós con la mano. Salí del auto y le di un abrazo a Pope.

"Nos vemos mañana hermano", dijo Pope.

"Adios", respondí, saltando al asiento del pasajero.

Ambos nos despedimos de Pope por última vez y Kiara comenzó a llevarme a mi casa. Todo el viaje en auto fue en silencio. No fue incómodo en absoluto, solo silencio. Todas nuestras conversaciones han sido bastante tranquilas últimamente, honestamente ha sido demasiado difícil para todos nosotros. Llegamos al frente de mi casa y miré por la ventana, con el corazón encogido. Me pregunto cómo estará esta noche.

-JJ -susurró Kie. Giré la cabeza y observé su rostro preocupado-. ¿Estás seguro de que estás bien?

-Kie, estoy bien. Te lo prometo -dije.

"Últimamente has estado muy desorientado. Siempre estás aturdido y distraído. Si pasa algo, por favor, házmelo saber", dijo.

"Aprecio tu preocupación Kie, pero estoy bien. Creo que todos estamos aprendiendo a afrontar el duelo de una manera diferente", dije.

Ella asintió con la cabeza lentamente y me dio una pequeña sonrisa. Se inclinó y me abrazó. Me di cuenta de que estaba realmente preocupada por mí.

"Mantente a salvo", susurró.

Me aparté y asentí con la cabeza: "Por supuesto".

Salté del auto de Kie y cerré la puerta. La observé mientras se alejaba lentamente. Finalmente me di la vuelta y me dirigí al porche. Las luces dentro de mi casa estaban apagadas y estaba completamente oscuro. Inhalé profundamente y exhalé lentamente mientras abría la puerta. Entré y encendí las luces.

"¡JJ!"