C A P I T U L O 18

18 2 0
                                    

Platillo tras platillo, la noche avanzaba más y más, el tiempo a si lado pasaba siempre rápido y sin esperar a nada. Y detestaba eso, detestaba no poder pasar más tiempo con Zayn.

Cuando estábamos a punto de comenzar el postre Zayn recibió una llamada.

-¿No vas a contestar?- pregunte.

-No tiene importancia- el tono frío de su voz me decía totalmente lo contrario.

-¿Todo esta bien Zayn?

-Son mis asuntos, no los tuyos- su respuesta fue tan mordaz que tuve que tomar una respiración profunda para calmarme.

-Bien.

-Annabel, lo siento. Son cosas...

Su teléfono sino otra vez. Miré la expresión de Zayn, su ceño fruncido solo significaba que las cosas no iban para nada bien.

-Contesta- le dije. Mas por mi que por él. No quería que ese llamada arruinara nuestra velada, y si lo hacia, quería que se terminara rápidamente.

-Permiso.- se disculpa rápidamente.

Puedo ver su perfil desde el lugar en donde estoy sentada. Su mirada esta plantada en un punto del cielo, y cada vez puedo sentir como su furia crece.
No sé qué persona es la que esta al otro lado del teléfono, pero en estos instantes, sea quien sea lo estoy odiando.

Se como terminara toda esta noche.

Cierro mis ojos, recordando todos los buenos momentos de este día. En verdad me divertí hoy, y espero de corazón que Zayn también lo haya hecho.

-Annabel, las citas de estos días deben retrasarse.- su mirada es gélida como nunca. Si lo que dice es verdad, eso quiere decir que debo recoger mis cosas y regresar a casa.

-Está bien, entonces recogeré mis cosas rápidamente para irme mañana mismo- lo digo con la sonrisa menos sincera de toda mi vida.- me levanto de mi asiento con la decisión de marcharme.

-¿Qué? ¿Por qué?- toma mi mano antes de que me marche, sus ojos están llenos de sorpresa.

-Porque no hay nada mas que hacer, si retrasas las reuniones, cuando las retomes estaré dispuesta.- le digo como si fuese lo más obvio del mundo.

-Sé esa parte de la historia, Annabel- me dice frustrado- ahora, quiero que escuches claramente: tengo que reunirme con unos socios, he sido invitado a pasar unos días con ellos, será todo informal, el lugar será en una hacienda al norte de Dublín. ¿Quieres ir conmigo?

-¿Qué?- estoy estupefacta. ¿Cómo quiere que responda a esto?

-Será un poco aburrido si voy solo, además es tu oportunidad de conocer un país más- lo último  lo dice de manera divertida.

-¿Está bien que vaya? Tus socios estarán ahí, no quiero molestar a nadie.

-Será más divertido si vas tu, además, cuando hablo de socios no me refiero a ancianos arrugados, Annabel, serán hombres de mi edad- dice reteniendo la risa.

-Bueno... Eso no cambia el hecho de que podría avergonzarte.

- Nunca me avergonzaría de ti, y supongo que serás la más divertida de toda esa tira de arpías que conozco. Ven conmigo Annabel.

-Esta bien- acepte, solo por la mira de sus ojos color avellana, caí en trance como nunca antes. No le podría negar algo.

-¡Eso! Ahora necesitamos recoger nuestras cosas rápidamente, nuestro vuelo sale mañana en la mañana. Vayamos a la cama.- en cuanto termino de decir eso me regalo un dulce beso en los labios, tan dulce que sentí como mi corazón se detenía.

-Bien, vamos- le digo mientras le entrego mi mas grande sonrisa.

•  •  •  •  •  •  •  •
Muy temprano en la mañana Zayn y yo nos estábamos dirigiendo hacia el aeropuerto para tomar nuestro vuelo hacia Dublín. Y si pensaron que mi noche no solo termino mal, esperen que les cuente que no dormimos junto, al contrario, dormimos poco y por separado.
Estaba nerviosa por el hecho de presentarme ante los socios de Zayn, ¿qué tal si hacia algo estúpido? ¿Qué si no podía adaptarme?... Tantas preguntas inundaban mi cabeza.

Sentí como alguien tomaba mi mano y le daba un apretón; estábamos en el avión, en primera clase, así que no muchos podían ver lo que hacíamos.

-Annabel, cálmate, todo estará bien- dijo Zayn después de depositar un suave beso en mis labios, últimamente esa era una costumbre que había tomado hacia mi.
Besarme de manera dulce en cuanto nuestros ojos se toparán, no me malinterpretado, me encantaba, pero a la vez me confundía.

Pero notaba a Zayn muy extraño y distante, es como si él fuese el que no quisiera ir hacia allá. ¿Por qué?

-Pasajeros, les pedimos de favor abrochar sus cinturones de seguridad.

-Bien, creo que ya llegamos- dice con un amago de sonrisa.

Cuando aterrizamos he reunido el suficiente valor como para preguntarle que es lo que le sucede.

-Zayn...

-¿Señor Malik?- pregunta un hombre desconocido. Los dos lo miramos sin entender bien lo que hace aquí.- Señor, soy empleado del señor Horan, me ha mandado explícitamente para llevarlos a su hacienda.

-Muchas gracias- dice Zayn un poco aturdido por el encuentro repentino- pero se supone que llegaríamos en la tarde, dejaremos nuestras cosas en el hotel.

-El señor Horan me ha pedido explícitamente que los lleve directamente a la hacienda, ahí existen dos habitaciones especialmente para ustedes.

Zayn se ve completamente furioso, conociéndolo sé que va a actuar de manera imprudente.

-Estaremos gustosos de acompañarlo- digo, antes de que Zayn explote. Tomo el brazo de Zayn y le dirijo una mirada llena de ternura y comprensión, tratando de trasmitir mis sentimientos.

-Acompáñenme por favor- dice el hombre, mientras toma nuestras maletas.

-Trata de calmarte Zayn- le digo mientras me acerco lentamente hasta depositar un beso en sus labios.

-No quería pasar la noche en esa casa, Annabel- dice mientras me toma posesivamente entre sus brazos y me roba un beso apasionado.

-Lo siento, pero era lo correcto- digo entre jadeos entrecortados, después de su beso.

Zayn me mira y una sonrisa se implanta en su rostro, su mirada es traviesa y hace que todos mis cabellos se ericen. Sé bien lo que significa esa mirada, el Zayn juguetón acaba de regresar.

-Si dormimos en esa casa, me encargare que durmamos juntos- dice de manera juguetona.

-Vamos- le digo en cuanto tomo su mano y me abro paso rápidamente, tratando de que no se note mi sonrojo.

Escucho detrás de mí la risa de Zayn y no puedo detenerme a reír también. Zayn toma mi mano con ternura y deposita un beso en esta, justo antes de entrar en el auto.

-Espero que la pasemos muy bien- digo tratando de poner una chispa positiva en el ambiente.

-Espero que no se metan en donde no les importa- musita Zayn de manera molesta mientras observa por la ventana.


Decir "Lo Siento"  • ZMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora