La semana transcurría con normalidad, hasta que, un día, mientras estaba en mi cuarto, recibí una llamada.
-Gala, tenemos que hablar -dijo una voz, un tanto ansiosa pero sin perder la arrogancia que siempre lo había caracterizado-. Vi las fotos de Facebook, Gala. ¿Por qué con él?
La mezcla de dolor y frustración en su tono no pasó desapercibida.
Intenté ignorarlo. El silencio de unos segundos fue lo único que pude ofrecerle. Sabía que estaba buscando una reacción, que deseaba una respuesta, pero no tenía ganas de discutir. Ya había sido suficiente. Estaba cansada.
-Mira, Agustín -respondí con firmeza, sintiendo que mi paciencia comenzaba a agotarse-. No quiero hablar de esto contigo.
Pero Agustín no se conformó. No podía ser tan fácil, ¿verdad?
-Gala, por favor, no te enredes con él. Sabes que no puedes hacerme esto -su voz tembló un poco y, por un instante, creí escuchar una súplica. Pero no caí, porque recordé lo cruel que había sido.
Respiré hondo, dejando que cada palabra se disipara en el aire entre nosotros.
-No tienes por qué decirme con quién sí y con quién no meterme. Aparte, Sian es alguien que está aquí, que no me ha mentido ni me ha herido.
Colgué sin más. Estaba harta de las excusas, de las promesas vacías que nunca se cumplían y necesitaba liberarme de todo, de los restos de una relación que no me pertenecía. Y entonces, por pura necesidad de cerrar este ciclo eterno, decidí llamarlo.
-¿Sabes qué Agustín?-dije pero Agustín no me dejó terminar porque me interrumpió
- ¿Qué, Gala? ¿Me dirás qué ya estás lista para volver conmigo? Para que estemos juntos como ha sido desde hace dos años -dijo Agustín, y en ese momento, por su soberbia, me aferré aún más a la idea de terminar de una vez por todas.
-No, pero creo que ya es tiempo de que hablemos. Pero no quiero hablar contigo por teléfono. Te veo el viernes en el parque de siempre -respondí, con la voz más calmada, aunque mi corazón latía con fuerza.
El viernes llegó sin demora, y ya estaba en el parque, esperando en el banco donde alguna vez nos sentamos, mirando las mismas hojas que caían con el viento. Le había pedido permiso a Karime para llegar un poco tarde a la editorial y esperaba no tardarme; sin embargo, Agustín llegó tarde, como siempre, pero sin ofrecer una disculpa. Su actitud de superioridad seguía intacta, como si pensara que aún me necesitaba, que estaba lista para volver como tantas veces antes.
Comenzamos a discutir, y en seguida se convirtió en una conversación absurda: ¿Por qué con Sian? ¿Por qué ahora? Pero ya no me importaba, ya estaba lista para dejarlo ir.
-Estoy cansada -dije, mirando al suelo, sintiendo cómo las lágrimas comenzaban a acumularse. Pero no quería llorar por él, no más-. Siempre es lo mismo, Agustín. Tú pidiéndome perdón y yo cayendo como una tonta. Pero te juro que ya no puedo más. Estoy cansada de volver y regresar todo el tiempo, de seguir esta mentira.
Sus ojos se clavaron en los míos, y vi la tristeza reflejada en su rostro. Sabía que, en parte, me entendía. Aunque nunca me lo había dicho, a veces sentía que era la única que cargaba con todo el peso de nuestra relación. Pero ahora, en ese momento, me di cuenta de que ya había llegado el momento de soltarlo.
-Te entiendo, Gala -susurró, acercándose un paso más hacia mí. Su voz ya no tenía la actitud defensiva de antes, sino una vulnerabilidad que nunca le había visto-. Te juro que estoy tan arrepentido por cómo te he tratado, y siento que ya no tengo derecho a pedirte más. Te he fallado tantas veces que no sé si habrá forma de perdonarme. Lo peor de todo es que, aunque te haya hecho tanto daño, no sé cómo seguir sin ti, cómo evitar la tristeza por perderte.
![](https://img.wattpad.com/cover/380558836-288-k820931.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Never Let Me Go (Completa)
FanfictionConoce a Gala, una joven atrapada en un torbellino de emociones después de una ruptura dolorosa. Su vida da un giro con Karime, enigmática y apasionada. ¿Podrá Gala encontrar su verdadero yo y superar sus miedos para amar de nuevo? ¿O sucumbirá al m...