𝑨𝒎𝒐𝒓 𝒚 𝑽𝒆𝒏𝒈𝒂𝒏𝒛𝒂 🥀

Capítulo 3: Tentaciones y Dudas

Los días que siguieron estuvieron llenos de un silencio tenso en casa. TN intentaba retomar la rutina y las clases, pero todo le parecía extraño. La revelación sobre el pasado de su padre y su conexión con la familia de Hyunjin la había dejado perturbada. Ya no podía ver a sus padres con la misma inocencia de antes, y eso la hacía sentirse sola.

La relación con Hyunjin también se volvía más compleja. Desde aquel día en la biblioteca, él apenas le hablaba, y cuando se cruzaban en los pasillos, evitaba su mirada. Sin embargo, TN no podía dejar de pensar en él. Cada vez que lo veía a la distancia, con su rostro serio y sus ojos oscuros, una mezcla de emociones la invadía: ira, curiosidad y... ¿podría ser que realmente sintiera algo por él? Aunque intentaba convencerse de que no, su corazón la traicionaba cada vez.

Finalmente, un día después de clase, TN decidió que no podía quedarse sin respuestas. Tenía que hablar con Hyunjin. Lo buscó en el campus, pasando por los lugares en los que sabía que solía estar. Al fin lo encontró en la cancha de baloncesto, donde practicaba en solitario, lanzando la pelota con una precisión perfecta, como si cada tiro le ayudara a aliviar algo de la tensión que llevaba en el alma.

TN se acercó lentamente, insegura de cómo empezar. Él, notándola, dejó de lanzar y se quedó mirándola, en silencio, con el balón entre las manos.

-Necesitamos hablar -dijo ella, tratando de sonar firme.

Hyunjin la miró durante unos segundos, con una expresión que TN no pudo descifrar, antes de asentir.

-¿Por qué insistes tanto en esto, Kim TN? -preguntó, dejando el balón a un lado y cruzándose de brazos.- ¿No es suficiente con lo que ya sabes?

TN tragó saliva, intentando ordenar sus pensamientos. Aunque sabía que acercarse a él era peligroso, algo en su interior la empujaba a seguir.

-Solo quiero entender... -murmuró.-Si esta venganza es tan importante para ti... si de verdad nos odias tanto, ¿por qué no puedes simplemente... no hablarme?

Hyunjin la miró, y en su rostro apareció una sonrisa amarga.

-Porque aunque quiera odiarte... a veces no puedo evitar querer acercarme a ti -confesó, con una sinceridad que la tomó por sorpresa.- Pero no debería. Nuestra relación está marcada desde antes de que nacieras. Este odio... es algo que se me ha inculcado, pero... -se detuvo, como si estuviera luchando consigo mismo.

Las palabras de Hyunjin calaron hondo en TN. Ella sintió un dolor sordo en el pecho, una mezcla de compasión y pena. Había una parte de ella que comprendía su lucha interna, pero otra parte la llenaba de tristeza. ¿Qué futuro podrían tener ellos, estando atrapados en esta cadena de resentimientos?

-Hyunjin... si no puedes perdonar, ¿qué sentido tiene? -preguntó TN, acercándose un poco más a él. - No quiero que nuestra historia sea solo una pelea de nuestros padres. Nosotros no tenemos que repetir sus errores.

Hyunjin la observó en silencio, su expresión fría se suavizó apenas un momento. TN sintió que, por primera vez, él la dejaba ver la parte más vulnerable de sí mismo, una parte que guardaba en lo profundo. Pero esa expresión desapareció tan rápido como llegó.

-Tú no entiendes, TN -dijo con un tono áspero.- Para ti, esto es solo una historia complicada. Pero para mí... -Su voz se quebró ligeramente.- Es mi vida, mi orgullo. La traición de tu padre arruinó a mi familia. Es algo que no se puede olvidar.

Ella sintió una punzada de dolor ante sus palabras, pero se mantuvo firme. Sabía que nada de lo que dijera cambiaría el pasado, pero aún quería intentar que él viera más allá del odio que había sido plantado en su corazón.

-Si realmente sientes que esto es lo único que te queda... -susurró TN, sintiéndose vulnerable.- Entonces, ¿qué sentido tiene seguir viéndome, hablarme, seguirme?

Hyunjin guardó silencio, y TN pudo ver cómo su respiración se agitaba ligeramente. Él la miró con una intensidad que la hizo estremecer. Sin advertirlo, dio un paso hacia ella, tan cerca que pudo sentir el calor de su cuerpo, y sin pensarlo, llevó una mano a su rostro.

-Tienes razón. No debería... -susurró. Pero en ese momento, sus ojos se fijaron en los labios de TN, y antes de que ella pudiera reaccionar, él se inclinó y la besó.

El beso fue inesperado, una mezcla de dulzura y desespero, como si en aquel instante él estuviera tratando de luchar contra sus propios sentimientos y, al mismo tiempo, rindiéndose a ellos. TN se sintió atrapada entre la euforia y la confusión. Pero en ese breve momento, todos los conflictos y el rencor se desvanecieron, dejándolos solos en ese instante, compartiendo algo más profundo de lo que ambos entendían.

Sin embargo, tan pronto como empezó, el beso terminó. Hyunjin retrocedió, su respiración agitada y una expresión de arrepentimiento en su rostro.

-Lo siento -dijo él, apartando la mirada.- Esto no debería haber pasado.

TN sintió cómo su corazón se rompía un poco al escuchar esas palabras. Pero no pudo decir nada. Hyunjin se dio la vuelta y se alejó, dejándola sola en medio de la cancha, con el eco de aquel beso todavía palpitando en sus labios.

Esa noche, TN no pudo dormir. El beso de Hyunjin seguía presente, tan real que parecía una marca imborrable. Pero al mismo tiempo, sus palabras de despedida habían dejado una herida. ¿Acaso lo que sentía por ella era solo una chispa de deseo, una emoción fugaz que sería opacada por el odio que cargaba desde hace tanto tiempo?

Al día siguiente, TN se preparó para otro día de clases con el estómago revuelto. No sabía cómo enfrentarse a Hyunjin después de lo que había pasado. Mientras caminaba por el pasillo, escuchó un murmullo y algunas miradas se dirigieron hacia ella. Se sintió incómoda, y al pasar cerca de un grupo de estudiantes, escuchó lo que decían.

-¿Escucharon? Dicen que Hyunjin estaba con la nueva chica, Kim TN... Parece que se llevan bastante bien -una de las chicas susurraba con un tono de envidia en la voz.

TN se sintió como si la hubieran descubierto. La noticia de su cercanía con Hyunjin parecía haberse esparcido como pólvora. Avergonzada, caminó rápido hacia el aula, tratando de ignorar las miradas y los comentarios.

Al llegar, Hyunjin ya estaba ahí, pero evitó mirarla. Durante toda la clase, ni una palabra, ni una mirada, ni un gesto que indicara que aquel beso había sucedido. Pero TN sabía que él no lo había olvidado; podía sentir la tensión en el aire, una mezcla de sentimientos reprimidos que ambos intentaban ignorar.

Finalmente, al final del día, cuando todos se marchaban, TN decidió que no podía soportar la incertidumbre más. Se acercó a él, deteniéndose en la puerta del aula.

-Hyunjin, necesitamos hablar -dijo con firmeza.

Él se volvió lentamente, sus ojos mostrando una frialdad que la hizo estremecer.

-No hay nada de qué hablar, TN. Fue un error. Lo mejor es que mantengamos distancia.

Sus palabras eran como puñales. TN sintió cómo el dolor se apoderaba de ella, pero se negó a retroceder.

-Para ti quizás fue un error, pero para mí fue real. Hyunjin, no podemos ignorar esto. No puedes fingir que no pasó nada. No puedes simplemente... alejarte.

Hyunjin bajó la mirada, apretando los puños.

-No entiendes, TN. Este... sentimiento no es más fuerte que lo que llevo dentro. Estoy destinado a seguir con esto. Tú eres parte de una familia que destruyó a la mía, y no importa lo que sienta, no puedo traicionar mi propio pasado.

TN sintió cómo las lágrimas amenazaban con salir, pero se contuvo. Sin decir nada más, dio un paso atrás, dándose cuenta de que nada de lo que hiciera cambiaría el odio de Hyunjin. Ambos estaban atrapados en un juego del que ninguno sabía cómo salir. Y aunque el dolor era insoportable, entendió que lo único que podía hacer era seguir adelante... por el momento.

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🥀- Disfrútenlo, y nos vemos en un próximo capítulo.