3- Día en la playa

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El día siguiente llegó, y con eso, tomamos camino a la playa.
Fueron todos los que participaron activamente como actores en 15 años de mentiras. Después de todo, la idea era tomar un descanso para liberar todo el estrés que produjo el rodaje de la película.

Ahí está Arima. No hemos tenido mucho tiempo de hablar después de ese día, pero, incluso ahora...

Parece que está evitándome.

No la juzgo, después de todo, es lo que haría normalmente un adolescente después de ser friendzoneado, ¿no?

Bajamos de la Van del director a penas llegamos a la playa.

-Ver el océano me hace recordar...mi auto...-.

Dijo el pobre de Himekawa. ¿Sigue sin superar que no sepa conducir bien?

-¿Sigues con el trauma?-

Le cuestioné. Pasó suficiente tiempo desde que lo estrelló como para que haya superado ese incidente. Después de todo, dudo mucho que no haya vuelto a practicar su conducción... no, definitivamente no practicó.

Noté que las chicas comenzaron a burlarse del director por tener un vehículo tan grande a pesar de ser soltero.

-En realidad, él compró la Van cuando soñaba con casarse. Patético-.

Comenté, para fulminar al director.

Todos estaban alistándose para disfrutar de su día libre, así que decidí hacer un mínimo aporte inflando una balsa. Levanté la mirada, y vi a Arima recostada sobre una toalla en la arena cerca.

Quiero hablar con ella.

Me acerqué lo suficiente para que ella notase mi presencia, notando como su rostro se ruborizó. Supongo que ella también lo notó, pues decidió voltear la cara al momento.

 Supongo que ella también lo notó, pues decidió voltear la cara al momento

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-Aqua, ayúdame aplicando protector solar en mi piel, ¿quieres?-

Preguntó casi exigiéndome que lo hiciera. Es demasiado orgullosa incluso después de que la rechazara, ¿eh?
Antes de poder responder, sentí la presencia de Kurokawa junto a nosotros.

-Permíteme-.

Kurokawa tomó el frasco de protector con malicia y echó una cantidad generosa en la espalda de Arima, sonriendo en el proceso con satisfacción. Arima respondió con un quejido, probablemente generado por la baja temperatura de la crema.

-Espera-... ¡no te lo pedí a ti!-

-Vaya... estás muy tensa, señorita-.

Arima cedió y ahora Kurokawa le estaba esparciendo la crema mediante masajes.
...qué.

-Se ve que son cercanas-.

Exclamé sarcásticamente.

Pude ver cómo los demás se divertían y disfrutaban del día de descanso, así que, decidí aprovechar la distracción de los demás para escabullirme y pensar un poco. Vi un pequeño precipicio y me senté a su orilla.

...Hikaru Kamiki... ¿Cuándo atacarás? Solo puedo preguntarme eso con claridad frente a la cantidad de pensamientos y recuerdos intrusivos que fluyen en mi mente.

-...Arima, quisiera...-

Ah. Parece que pensé en voz alta.
Escuché pasos atrás mío al unísono en el que liberé al exterior mis pensamientos, y vi a Akane tras voltear.

-Vaya, ¿huyendo de los demás?-

-¿No te sientes incómoda cerca de mí, Akane?-

-Por supuesto que sí-.

Era una respuesta sincera, y que, tristemente pude entender a la perfección. Kurokawa Akane, otra chica que engañé y manipulé por mi beneficio. Otra chica de la que exploté sus sentimientos para conseguir lo que quería. Quisiera que fuese diferente a como es. Quisiera no tener que seguir engañando más a mis...

...¿Por qué me estoy arrepintiendo ahora?

Un cuervo se acercó a nosotros, y lo espanté.

-Pero tengo que vigilarte, Aqua. Nada da garantía de que no vayas a matar a Hikaru Kamiki en algún momento-.

Me sorprendieron sus palabras, pero, decidí quedarme en silencio.

-No deberías hacer eso, ¿sabes? Si lo haces, ni tú ni nadie de tu alrededor será feliz-.

Sus palabras, enmascaradas por el sonido de las olas chocando con las rocas, eran la realidad que estaba peleando por evitar.

...la realidad que hace que quiera dejar mi venganza.

-Solo míralos. Están contentos de que todos estemos aquí. Se están divirtiendo, y no tienen idea de lo que piensas en realidad. ¿qué pasará con Miyako-san? ¿Con Ruby-chan? Incluso con Himekawa-kun-.

Ellos... ellos son mi familia, ¿no?
Volvieron a mi consciencia las palabras que resonaron el día en el que Arima se me declaró.
...ellos en verdad me quieren, ¿no?

-...¿Qué pasará con Kana-san? ¿qué planeas hacer con esos sentimientos que tienes?-

...y ahí está la razón del sermón.

-Ah, parece que escuchaste, Akane-.

-Aqua, esos sentimientos son correspondidos. Puedes tener un futuro con ella... si sueltas esa oscuridad que traes contigo-.

Su voz sonaba decidida. Ella creía firmemente en lo que decía.
A falta de saber que responder, solo pude quedarme callado.

-Es tu turno de ser feliz-.
Remató Kurokawa, para darme la espalda y alejarse.

Remató Kurokawa, para darme la espalda y alejarse

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...
Oscuridad. Solo veo oscuridad.
Caminé por esa oscuridad hasta notar como se convirtió en aquella sala de estar. Aquella donde falleció Ai.
En el piso, vi a Amamiya Goro, recostado sobre la pared.

-...debemos hablar, Aqua-.

Pidió el doctor.

OSHI NO KO - Me Tienes a Mi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora