Minino (Dekubaku) Finalizada

Capitulo 5

Katsuki se encontraba saliendo de sus clases cuando fue detenido por Izuku, que prácticamente le tapo todo paso y lo inmovilizo con su cuerpo contra la pared.

—Hola— saludo el peliverde con su sonrisa coqueta que hacía suspirar a más de uno.

—¿Podrías moverte? – demandó el cenizo con rostro serio.

—¿Por qué? – preguntó coqueto, mostrando sus aperlados y perfectos dientes.

—Porque me tapas el paso, ¿Qué no es obvio?

—Nah, creo que no—negó mientras sonreía – Sabes, ¿creía que ahora podríamos ser amigos?

—¿Amigos? ¿Tú y yo? ¿En la misma oración? —pregunto con sarcasmo.

—Por supuesto, tú, ¿quien más podría ser? .

—¿Y eso se debe a qué ...? – dejo la pregunta a medias, esperando que fuera el peliverde el que la terminara.

—Bueno, pues creía que después de lo sucedido hace unos días podríamos llevarnos mejor – dijo Izuku con demasiada fuerza, logrando llamar la atención de las personas curiosas, que al ver al peliverde habían detenido su camino, quedándose para saber por qué él se encontraba ahí hablando con el cenizo.

—Eso es ridículo. No paso nada y tú lo sabes – dijo con una sonrisa nerviosa por todas las miradas y susurros que estaban recibiendo.

—¡Oh, vamos! Los dos sabemos que si hubo algo. – afirmo Deku, que se acercaba más al cuerpo de Katsuki; el cual, solo podía acercarse más a la pared e intentar fundirse con ella. El cenizo podía sentir el calor del cuerpo de Izuku y tanta cercanía lo hacía enrojecer hasta las puntas de sus orejas.

—E-eso no es cierto – tartamudeo.

—Si ese no es el caso, lo cual sabemos ambos que si lo es ¿Por qué estas usando mi chaqueta? – dijo, mientras sujetaba el borde de la mencionada sin dejar de ver a Katsuki, se podía escuchar como muchos jadearon de asombro y otros empezaban hablar de que los habían visto juntos muy acaramelados en un aula desolada, mientras otros murmuraban cosas muy ofensivas para Katsuki.

—Esta no es tú... —Katsuki bajo la mirada para ver la chaqueta que había tomado con prisa en la mañana al haberse quedado dormido – Mierda – dijo entre dientes, sin ser escuchado por nadie a excepción de Izuku ya que estaba muy cerca de él. —Oye si tanto te molesta que la use puedo devolvértela – dijo mientras intentaba sacársela a lo que fue detenido por el peliverde.

—No te preocupes, en realidad solo quería decirte que te ves bien con ella. —dijo Deku con una sonrisa deslumbrante sonrisa mientras le guiñaba un ojo, luego se apartó de él, no sin antes darle un suave beso en la frente que lo dejo descolocado y con el corazón latiendo a mil, muchos de los que estaban ahí presentes se quedaron impresionados de ver al gran Midoriya Izuku siendo cariñoso con alguien, sólo para luego marcharse como si nada, sin ver el desastre que había hecho con la mente y corazón de Katsuki y del montón de observadores que aún no salían del shock en el que los había dejado.

A las pocas horas toda la universidad sabía del nuevo interés del famoso rompe corazones de la universidad, muchos ya habían iniciado sus apuestas a que esto solo era un juego para ver qué tan rápido caía el cenizo.

Katsuki se encontraba sentado en una banca de cemento dentro de la universidad, suspirando una y otra vez, se sentía afligido e intranquilo por la mirada que muchos le daban y los comentarios que empezaban a fastidiar lo, hasta el punto de querer partirle su madre a todo quien se le quedara viendo.

—Debe de ser grave lo que te está pasando para estar suspirando como llanta desinflada. – dijo Shinsou, que se sentaba en la mesa que estaba enfrente del cenizo.