Chicago era nuestro destino al subir en el avión, pero por lo que me dijo Zack ese era un vuelo de conexión para después tomar el avión que nos llevaría fuera del país. ¿A que parte? No lose. Pero a Jorge lo voy a ver cuando hayamos llegado llegado a Chicago.
Zack me dio mi pasaporte y el boleto. Me dijo que solo esperara el vuelo y enseguida subiera, que me darían instrucciones y se fue. Estaba sola. Sin Jorge. Sin zack. Solo yo. Me sentía sola, sin protección. Indefensa.
Trate de mantenerme calmada pero me era casi imposible. Tome asiento y espere. Espere, espere, espere. El tiempo parecía ir demasiado lento, la gente iba y venia, el ruido era enorme, no paraban de escucharse vuelo tras vuelo. Hasta que por fin puede escuchar.-Pasajeros con destino a Chicago, favor de abordar en la puerta cinco.
Me levante dudosa mientras algunos me empujaban por el amontonamiento. Llegue a la fila para abordar y espere a que la joven delgada, rubia y de traje azul, recibiera mi boleto.
-Señorita Stoessel, me alegro de conocerla. Pase por favor y que disfrute del vuelo.
-Gracias.
Aborde el avión y cuando llegue una sobre-cargo me dijo que tomara asiento en el último lugar. ¿Extraño? Era toda esa situación. Actuaban como si ya me conocieran.
Cuando todos llegaron, comenzamos a caminar hacia la pista y poco a poco empezamos a elevarnos. Y todo se veía maravilloso una vez en el cielo.*****
Después de 4 horas las azafatas comenzaron a servir el desayuno. Y cuando me trajeron a mi la bandeja, la joven me sonrió y la dejó en la mesa delante de mi, le agradecí con una sonrisa al igual que ella antes de retirarse.
La bandeja tenia, tostadas, huevos revueltos, jugó de naranja, una pequeña rosa y un sobre blanco con mi nombre escrito. Lo rasgue con cuidado procurando que no se rompiera el contenido.Martina:
Lamento de verdad no poder estar contigo, pero surgieron... problemas. Debes de saber que pase lo que pase siempre estaré contigo que esta vez sera solo una excepción. Probablemente estés confundida y te lo explicaré tan pronto como estés conmigo. Disfruta de tu desayuno e imagina lo maravilloso que la pasaremos tu y yo juntos cuando te haga mía.
No hables con nadie, por favor. Cuidate.
Te quiero.Jorge
Mis mejillas se enrojecieron al leerla, pero también me sentía confundida. ¿Que no hablara con nadie? ¿Porque? ¿Y sobre que no tendría que hablar? De verdad que Jorge me confunde.
Pero ya hablaría de eso con el cuando lo viera por ahora tenia hambre. Guarde la carta eni chaqueta y me dispuse a desayunar.