¿Qué fue eso?
Amelia pov's
Unos días después.
Iván golpeó la puerta con insistencia. No era temprano, pero no recordaba que habíamos quedado en salir esa noche a una fiesta.
—¡Dale, Amelia! –gritó desde el otro lado– ¡Vamos a llegar tarde, y no quiero quedarme esperándote dos horas!–
Bufé mientras me sentaba en la cama todavía adormilada por mi siesta de la tarde. ¿Desde cuándo Iván se preocupa tanto por ser puntual?
Después de alargarme un rato más comencé a prepararme con calma. La tarde se pasó entre elegir ropa, ducharme y finalmente ponerme a maquillar frente al espejo. Fue justo en ese momento cuando Iván irrumpió sin avisar, como siempre.
—¿En serio? ¿Te vas a demorar más? –se quejó recostándose contra el marco de la puerta– Hasta me dio tiempo de dormir un rato –dijo cruzado de brazos–
—¿Te molesta? Podés esperar afuera, entonces –le respondí sin mirarlo poniéndome un poco de rímel–
—No entiendo cómo tardás tanto –replicó ignorándome y acercándose– Si ya estás linda, ¿qué más querés arreglarte?
Me detuve un momento sorprendida por sus palabras. ¿Iván acaba de...? Me giré hacia él y lo encontré encogiéndose de hombros como si no hubiera dicho nada importante.
—¿Te pegaste la cabeza o qué? –le pregunté con una sonrisa burlona– ¿Qué estás diciendo?
–-Nada. Mejor apurate –dijo desviando la mirada– Los demás ya deben estar esperándonos.
Negué con la cabeza y me concentré nuevamente en el maquillaje. A pesar de su actitud molesta, sus palabras me dejaron pensando más de lo que quería admitir.
La música estaba a todo volumen, y las luces de colores iluminaban cada rincón de la casa. Estábamos con nuestros amigos, bailando y riendo.
—¡Ey, Amelia! –gritó Nicole desde la pista de baile– ¡Vení, bailá conmigo!
Reí mientras me unía a ella,
dejando a Iván hablando con Mauro en una esquina. Pero para mi sorpresa no pasó mucho tiempo antes de que él se acercara y me extendiera una mano.—¿Bailamos? –me preguntó inclinando ligeramente la cabeza con una sonrisa–
—¿Vos? ¿Bailar? –bromeé tomando su mano– Esto tengo que verlo.
Y estábamos en medio, pero solo concentrados en nosotros dos.
Iván no era el mejor bailarín, pero hacía un esfuerzo que me hacía reír tanto que terminé olvidándome de todo lo demás. Entre risas y pasos torpes, el ambiente cambió de repente.
Antes de darme cuenta Iván me tomó suavemente de la cintura y me acercó un poco más a él.
—¿Qué hacés? –pregunté sintiendo cómo mi corazón se aceleraba–
—Nada. Simplemente estoy actuando como tu novio, ¿o no? –susurró con esa sonrisa que me desarmaba–
Y entonces sucedió. Sin pensarlo demasiado ambos nos acercamos hasta que nuestros labios se encontraron en un beso que no parecía nada fingido.
Cuando nos separamos lo miré con una mezcla de sorpresa y confusión. Él en cambio parecía tranquilo, como si todo fuera parte de la actuación.
—Es parte del plan –guiñó el ojo–
No sabía qué decir, así que simplemente asentí y fingí que no me había afectado. Pero la verdad era otra. Ese beso había revuelto cosas que no quería enfrentar.

ESTÁS LEYENDO
Te Odio porque te Quiero
RomanceAmelia| Yo no pensaba volverme a enamorar de vos. Iván| Supongo que las cosas cambian... Inicio: 10/Nov/24 Final: ?...