Nuevo Comienzo. T.A.E.O#2

9. Consuelo de una nueva amiga.

Después de un rato la Anto se atrevió a abrazarme.
Yo no me aguanté más.
-Anto porfa ya para...
Y me eché a llorar en sus brazos. Era demasiado para mi.
-Ya... ¿Qué pasa? ¿Por qué tanta penita?
-Es... Es que... Me siento... Me siento tan sola...- dije apenas, hipando de llanto. Me abracé de ella tan fuerte como pude y comencé a sollozar otra vez. Me cobijé en su pecho maternal y ella acarició mi cabeza.
-Quieres contarme sobre eso?- preguntó.
-Yo...
-Piensa, si me cuentas tal vez te pueda ayudar.
-Esta bien.
«Todo comenzó el año pasado. Por culpa de mi padre que me prometió al hijo de un amigo suyo. Pero yo no quería. Y entonces comencé a ser muy odiosa con él, además es el mejor amigo de mi hermano.
Todo era confuso. Yo solo buscaba la manera de alejarme de él. Pero él solo se acercaba. Varias veces me besó. Entonces un día me pidió que fuera su novia y yo le dije que lo tenía que pensar y desde ahí todo empeoró.
«Mis amigos dejaron de hablarme y mis amigas comenzaron a ignorarme o decirme cosas muy hirientes. En el colegio me golpeaban. Aun recuerdo mi cumpleaños ahí. Le pedí a papá que me fuera a buscar porque ya no lo aguantaba. Adelanté el intercambio lo más que pude y así llegué aquí. Y ahora tengo miedo de que me devuelvan a L.A.

-Wow... Es una gran historia.

-Anto no se que hacer. Cuando papá vea que no saqué ningún 10 me va a obligar a volver...
-Aly... Aquí la nota máxima no es un 10...
-Ah no?
-No... Es un 7...
-Entonces tengo buenas notas?...
-Excelentes...
Y las dos comenzamos a reír...
Amé a la Anto en ese momento. Ella... Es única e irreemplazable para mi.
-Vamos a comer. Ya hay que almorzar.-Dijo sonriente mi nueva amiga.
-Si.
Ya en el casino calentamos el almuerzo y comimos tranquilas. La Javi y la Cami me preguntaron qué pasaba y yo decidí que tenia que olvidarme de toooodo el pasado y generar amigas nuevas. Así que eso hice. Y confié en ellas.
Les conté lo que había pasado entre risas... Y ellas se quedaron serias.
-Aly eso no es tu culpa. Nadie te dijo que aquí la nota máxima es un 7.0 espero que eso no te genere problemas.- dijo la Javi.
-Lamento no haberlo dicho antes. Si lo hubiéramos hecho te hubieras ahorrado el llanto...- la Cami bajó la vista.
-Yaya da igual. Ya pasó, ahora comamos.- dijo la Anto sacando una lechuga de su ensalada. Como todos los días...
Estaba feliz. Ya no tenia que pensar más... Ni en Alexa ni en Sam... Ni tampoco en Cat.
Todo había quedado atrás. Para siempre.
Comí con una sonrisa en la cara. Mis nuevas amigas: Camila, Javiera, y Antonia estaban conmigo.
Pero algo me cayó como un balde de agua helada en la espalda.

¿Y cuando volviera a Los Ángeles? ¿Qué iba a hacer?

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