Nuevo Comienzo. T.A.E.O#2

15. Infancia

Las cosas mejoraban. Ya habían pasado un par de semanas desde que me había caído. Sentía que los estudios y toda la materia se ponía mucho mas fácil. Ligero.

«-Mamá mira!- grité pedaleando con más fuerza. La bicicleta iba mas rápido.
-Aly te caerás. »

Recordaba... Claro que lo hacía... Pero...

A veces me hubiese gustado no hacerlo.

«-James! Ven! Tengo miedo!.
-Aly déjame en paz un momento. Si?»

Mi infancia volvía a mi.

¿Por qué ahora? ¿Por qué no antes?

...Quería gritar... Pero estaba rota...

-Papá!!!- logré decir.

-Que pasa, cariño?- dijo.

-Papi...- lo abracé.- Me haces leche?- pregunté.

-Aly... Son las tres de la mañana... Mañana tienes colegio...- dijo con aprensión.

-No importa! Quiero tomar leche con miel. Y arroz con leche! Sii!! O... Sémola!! Con caramelo! Y muchos pasteles!!

-Hija... A qué se debe este ataque de dulce??- preguntó risueño.- son todas cosas que no preparo desde que eras niña...- rió.

-Si. Si papá. Cuando yo era niña! Y helado!! Si! Mucho helado! Y pie de limón!- me agarré de su camisa.

-Hija...

-Papá por favor!- dije con los ojos llenitos de lágrimas.

-Esta bien...- me miró con aprensión.- Hoy no vas a clases. Tomaremos el día libre solo nosotros dos. Si, princesa?

-Si papi...- dije. Lo abracé y me eché a llorar.

-Hija será mejor que duermas. En la mañana iremos de compras.

Me dormí al rato después. Papá me estaba esperando... Ese suéter...

...Ese era el suéter rojo que yo le quitaba cuando era una niña... Ese suéter con las coderas marrones y el parche en el hombro izquierdo... Papá lo llevaba el día de mi cumpleaños número ocho...

-Vamos cariño.- dijo.

Me puse lo que papá había dejado en los pies de mi cama la noche anterior.

Alto alto alto. Ustedes se preguntarán por qué papá esta conmigo si yo estoy de intercambio. Bueno pues les explico eso para que no hayan confusiones. Papá arrendó un departamento por un mes, y me quedé todo ese mes allí, con James, Sylvia, Green y Blue.

Ahora prosigo. Lo que papá había dejado era una sudadera rosada manga larga, un suéter blanco, y unos jeans claros. Se parecía a la ropa que ocupé para el cumpleaños de James cuando cumplió 11. Y claro. Un par de Converse rosa claro sin caña.

Si algo no había olvidado era mi obsesión por las Converse's.

Salimos del departamento y fuimos a una dulcería. Ahí papá me mimó cuanto pudo. Me compró muchos dulces. Luego fuimos al súper mercado y compramos muchas cosas ricas para preparar comida. Y luego...
Esto sonará muy tonto e infantil, pero me enorgullezco de eso.
Le pedí a papá que me comprara una muñeca Barbie y ropa de muñecas.
-Hija... Por qué pides todo esto?- preguntó ya en el auto.
Y no supe qué responder. Bueno. Luego de un buen rato logré obtener respuesta.
-Papá... Alguna vez has sentido que lo tienes todo pero te sientes mal porque no has aprovechado el tiempo? Pues eso me está pasando a mi...

-Hija... No entiendo lo por lo que estás pasando... Quiero ayudar... Pero no sé cómo... Seguramente Logan si sabría hacerlo...- Logan...

Logan...
Logan...
Logan...
Logan...
Logan...
Logan...
Ése nombre... Ese nombre resonaba en mi consciencia... Me resultaba familiar...
-Quién es Logan?- pregunté con sinceridad, suavemente.
Papá deformó su cara... Me dio mucho miedo esa reacción. Era como si fuera algo obvio. Papá mordió su labio con tristeza y se limitó a decir...: "Un amigo"

Tenía miedo... Y de un momento a otro me sentí cayendo de un barranco.

Llegamos a una tienda llena de colores. No sabía qué podía ser...

-Papá... Qué es esto???

-Princesa... Iré a buscar algunas cosas. Volveré en seguida.- Papá sonrió y salió del auto. La tienda se llamaba "Miguitas"

Y miré por la ventanilla del auto.

Esa niña.

Otra vez ella... La niña que había visto en el colegio... Me recordaba tanto a mi...

Me quedé como tonta viendo la ventanilla. Viendo a la niña pasar. Viéndola reír... ¿Qué pasaba con mi cuerpo? ¿Por qué no respondía?

¿Quién era ella? ¿Qué era ese sonido que me desgarraba los tímpanos? ¿Por qué estaban pasando esa serie de cosas ahora? ¿Quién era Logan? ¿Qué influencia había tenido en mi? ¿Alguna vez lo había visto? ¿Qué edad tendría?
Esa niña... Me recordaba a mi... Me gustaba llamar la atención... Me gustaba destacar... Me gustaba ser el centro... Si no era así... ¿De qué servía?

Papá abrió la puerta del auto y entró.
-Quieres un dulce?- me miró...- epaaa... Parece que viste un fantasma... Por qué esa carita?

Pensé...

-Nada... Es solo que... De pronto me dejó.

-Qué cosa?

-Mi infancia...