Volviste posible lo imposible

Capítulo 1

-¿Estas segura?- Pregunto por sexta vez Jacob.
-Si, Jacob- Reí y lo abrace una vez llegue a la puerta de entrada.
-Pero...-
-Jacob, en 2 meses cumpliré mis 18 años, soy lo suficientemente grande para cuidar de mi misma -dije mientras abrazaba a Laurent.
-Pero... ¿A tu casa?
-¡Claro! ¿A donde más si no?- el me miró preocupado -tranquilo, no tienes de que preocuparte, estoy mejor, ire a dejar mis cosas y luego pasaré al gimnasio a ver como estan los chicos y retomar mi entrenamiento- baje las escaleras que estaban en la entrada de la casa, abrí la puerta trasera del Audi R8 negro que anteriormente pertenecía a papá y deje las ultimas cosas ahí dentro -Gracias por permitir que me quedara aquí estos ultimos días- sonreí, rodeé el auto, entré en el asiento del conductor, me despedí con la mano y conducí hasta mi casa.
Conforme me acercaba a mi destino mis nervios iban en aumento, apreté mis manos en el volante y estacione el auto frente a una gran casa blanca.
Bajé del auto, saqué las llaves de la casa, las introduje en la cerradura y gire escuchando un muy leve "Clic" que me permitió abrir la puerta, de un empujón esta se abrió por completo dejando a mi vista una sala completamente limpia y ordenada, solté un suspiro y regresé al auto para llevar las cajas una a una hacia adentro.
Una vez termine de bajar todas las cajas, en una mochila metí mi ropa de deporte, una botella con agua, mi teléfono, audifonos y un poco de dinero.
Salí cerrando la puerta con seguro, subí al auto de nuevo y conducí hacia el gimnasio; Una vez ahí, bajé del auto y entré haciendo sonar la campanilla.

Silencio.

Todos se habian quedado quietos, tenía de 10 a 15 chicos viéndome como si no pudieran creerlo, como si sus ojos y cerebro se hubieran puesto de acuerdo para jugarles una broma.
-Hola chicos- Hablé mientras movía mi mano de un lado a otro.
-Kath...- de pronto me encontraba rodeada por los fuertes brazos de todos ellos.
"¿Estás bien?, ¿Dónde habías estado?, Nos tenías preocupados, Kath, ¿Como estás?"
Preguntaban todos al mismo tiempo.
-Oigan, oigan, tranquilos, estoy bien- sonreí un poco y me separé de ellos.
-¿Que esta pasando?- Preguntó una voz muy conocida al ver que todos se habian juntado creando un circulo.
Los chicos se hicieron a un lado dejando que él pudiera verme.
-Cristian- Sonreí
-Kath...- Sus ojos se abrieron de sorpresa y corrió hacia mi, tomó mis caderas y me alzo en el aire mientras daba un par de vueltas -Oh Kath..- Me dejó en el suelo y me abrazó con fuerza -¿Donde estabas? Creí... yo creí...- Sollozó.
Apreté aún más el abrazo, mis ganas de llorar iban en aumento desde que sali de la casa de Jacob, él tomó mis mejillas y las acarició con sus pulgares- Estaba tan preocupado...- pequeñas lagrimas resbalaron por mis mejillas y mordí mi labio inferior en un intento por contener el llanto, el limpió mis lagrimas y me sonrió un poco.
Unos minutos después que me calme, me sente en una banca con todos a mi alrededor.
-Estaba con Jacob, cuando entré a casa y vi.. eso comence a gritar, no por terror, estaba furiosa- cierro mis ojos -Los vecinos llamaron a la policia, cuando llegaron me llevaron a la comisaria mientras que ellos investigaban más sobre lo sucedido, una vez ahí una oficial me dijo que mi familia estaba enterada y que pronto llegarían por mi, un rato después Jacob entró por la puerta con una expresión de panico, tristeza y preocupación, me levante y él solo me abrazo -Mi voz comenzó a quebrarse- él y Laurent me llevaron a su casa y estuve viviendo ahí hasta hoy, no había podido comunicarme con ustedes así que decidí venir hoy- abri mis ojos para encontrarme con las miradas de comprención y tristeza de todos. Algunos de ellos comenzaron a darme palabras de aliento, otros solo me abrazaron, Cristian beso mi frente, y así se paso el dia, me dijeron lo que habían hecho en mi ausencia y lo mucho que me habían extrañado.

El tiémpo paso rapido, y todos comenzaron a irse.

-Estaré bien- Reí -solo voy a entrenar un poco y después iré a casa- Cristian asintió no muy convencido y me dio las llaves del lugar.
-No te quedes muy tarde, es peligroso- asentí y el se fue dejandome sola.
Mire al rededor y suspire, me acerqué al saco de boxeo para comenzar a golpearlo, recuerdos de mi padre diciéndome como hacerlo llegaron repentinamente a mi mente, sonreí sin dejar de golpear el saco.

"Mi padre estaba de pie junto a mi mientras me decía como debía golpear el saco, su sonrisa era enorme y el brillo de sus ojos incomparable, mi madre se acercó a nosotros con esa bella sonrisa que siempre la caracterizaba, una sonrisa que hacía esconder sus ojos color cafe claro y nos tendió dos botellas de agua, miré hacía estas para tomarlas pero de pronto dejo caer las botellas al suelo, confundida la miré a los ojos, ella tenía una mirada perdida y de su frente resbalaban unas gotas de sangre, su cuerpo se fue hacia atrás hasta caer al suelo"

Golpeé el saco con más fuerza, la ira comenzaba a apoderarse de mi.

"Giré mi cabeza con rapidéz hacia papá pero este callo hacia un lado mientras sangre salía salpicada de su cuello, miré frente a mi, una figura negra salía a paso calmado por la puerta sin mirar atras en ningún momento"

Mis puños comenzaban a doler pero la ira era mas grande, no podia parar de golpear el saco con fuerza, necesitaba desahogarme de alguna manera.
De pronto sentí unos brazos rodearme y alejarme del saco.
No me di cuenta en que momento comence a llorar pero podía sentir las lagrimas bajar por mis mejillas una tras otra sin intención de parar, mire el dorso de mis manos y vi que tenía pequeñas heridas en los nudillos, ¿Como habia pasado esto?, giré mi cabeza para mirar a la persona y vi a cristian con una expreción preocupada, yo solo lo abracé y comencé a llorar, no podía soportarlo más, necesitaba llorar.
El acariciaba mi cabello con delicadeza mientras yo lloraba en su pecho.
Después de casi 10 minutos en la misma posición por fin me tranquilicé y me separé de él.
-Gracias- Susurré y el sonrió en respuesta -¿Por que volviste?
-No quise dejarte sola, así que regrese con algo de comida- Apuntó la banca donde habia dejado las cosas.
-¿Que tal si vamos a mi casa y cenamos ahí?- el asintio y nos dirigimos a mi casa cada uno en su respectivo auto.

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Gracias por leer ♡

¡Espero que les este gustado bastante!
Llegamos a ser #724 en historias de misterio/suspenso🎉 😍😍
¡Gracias!

~KathyaGarza