Capítulo 5.

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Dulce seguía pensando en Pablo, revisó todas sus redes sociales y él no le había hablado, ni un siemple WhatsApp, una mención en Twitter, o una foto conjunta en Instagram.

Miró la hora y calculó, si en España era la una de la madrugada en México tenía que ser cerca de las cinco de la tarde.

"¿Por qué no me habla? Decidimos luchar por esto".

La primera lágrima de Dul empezó a recorrer su mejilla. Cerró los ojos y abrazó su guitarra.

-¿Estás bien? - preguntó tímido una voz de chico mientras salía a la terraza.

-Me asustaste. -sonrió limpiandose las lágrimas. -Estoy bien. Es muy raro el cambio. -lanzó una sonrisa fingida mientras miraba los ojos café de Christopher.

-¿Extrañas a tus papás? -se paró enfrente de ella.

-Mucho, no se si aguantaré un año aquí. -bajó la mirada.

-No digas eso Dul, apenas te conozco pero Anahí dice que eres muy valiente y luchadora, esto es un regalo.

-Lo se pero..

-¿No es por tus papás verdad? -christopher levantó el mentón de la pelirroja con suavidad. Haciendo que sus ojos se encontraran.

-Él..él me dijo que lucharíamos por esto, que me quería y ahora..

-¿No sabes nada de él?

-¡Ni me llamo, Christopher!

-Dale tiempo, también será difícil para él.

-Ya pero...

-Pero nada -la interrumpió él. -¿Tocas la guitarra? -sonrió.

-Si, bueno, lo intento. -rió tras ver cómo Chris lo hacía. -¿Tú tambien?

-¿Qué te parece si yo voy a por la mía y tocamos algo?

-Sí, me encantaría. -rió viendo como Christopher salía corriendo hacia su cuarto.

*****

-Muchas gracias por animarme Chris, eres muy agradable. -sonrió tímida.

-No hay de qué, pero ya es hora de dormir.

-Vete yendo tú. -sonrió ella agarrando su taza de café.

-Vale, que sepas que estaré esperando en mi cuarto, hasta que no oiga como entras al tuyo no me dormiré. -sonrió el chico y dio un beso a Dulce en la frente antes de irse.

-Christopher. -le llamo Dul haciéndolo girar.

-Dime.

-Gracias. -dijo acercándose para abrazarlo.

-Cuenta conmigo para todo Dulce. No te vas a arrepentir de este año, ya lo verás.  -susurró mientras se abrazaban.

******

-¿Dulce, qué haces aquí?

-No tengo sueño Anita. -sonrió.

-Son las 5 de la mañana Dulce María. -rió.

-Lo sé pero dormí todo el viaje.

-¿Sigues pensando en él?

-Claro que sí, yo le amo güerita.

-Lo sé pero...

-Pero estoy feliz de estar aquí, hice lo correcto. -sonrió.

-¡Así me gusta! -abrazó a su amiga. -Por cierto, ¿Ya conociste a Christopher no? -sonrió pícara.

-Sí, es muy buena onda, me ayudó bastante.

-Pues está soltero.

-No me importa Annie, es bien guapo si... !pero yo amo a Pablo!

-Ok, ok, -rió.

-¿Qué vamos a hacer mañana?

-Nos vamos al centro comercial todos juntos,tenemos que hacer la compra y... de paso mirar más ropa! -reía la rubia. -Así que ahora a dormir!

-Las dos amigas entraron a casa agarradas por la cintura y riendo.

Annie acompañó a Dulce y se aseguró de dejarla en la cama, aún que esta volvió a levantarse ya que el sueño no estaba presente en ella esa noche.
Prefería explorar la que ahora era su nueva casa..

Tímida se asomó por la puerta del cuarto de Chris, pensó que no se enteraría ya que no había ninguna luz encendida y era tarde.

-Buenas noches Dulce, descansa un rato. -dijo tiernamente él.

-Bu..buenas noches Chris. -sintió cómo sus cachetes cogían rubor y salió corriendo hacia su cama.

"Quizás mi lugar está aquí ".



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