Capítulo 6.

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-¡Despierta Dulce, nos están esperando todos!  -gritó.

-Dejame dormir May. -murmuró tapándose la cara con la almohada.

-Annie, ayudame. -gritó Maite desesperada.

-Dejame a mi, la rubia esta ocupada con su novio. -se escuchó riendo desde fuera del cuarto, la pelirroja detectó la voz y corriendo se levantó de la cama.

-Dulce tenemos que... -habló él asomandose en la habitación de las chicas.

-Sí, casi estoy lista Christopher. -sonrió al ver la cara de May.

-Te odio. -le susurró ella.

Christopher salió del cuarto y Dul empezó otro drama..

-¿Qué me pongo Maite? Es muy pronto para pensar.

-¿Llamo a Christopher para que lo resuelva otra vez? - rió pícara.

-He pensado que estos shorts son ideales. -sonrió Dulce nerviosa.

-Aham. -rió.

*******
Los chicos llegaron al centro y lo primero que hicieron fue parar a desayunar, tenían la costumbre de ir todos los sábados para terminar viendo ropa después de hacer la caótica compra en el supermercado, donde cada uno metía al carro lo que quería.

Alfonso insistía en ir mejor solo los chicos, ya que estaba harto de cargar con las bolsas de ropa de su novia y aguantar como las chicas les mareaban de tienda en tienda.

Mientras una pelirroja miraba indecisa dos vestidos negros casi idénticos, notó como alguien le tapaba los ojos por detrás.

-Eh, ¿qué haces? ¡sueltame! -decía molesta mientras forcejeaba.

-Dul soy yo, tranquila. -reía.

-¡Zori, Me asustaste mensa!

Las dos chicas se abrazaron y entablaron conversación, hasta que Dulce se dio cuenta de que el chico de detrás era el mismo del avión.

-¡Zoraida, no te gires! -susurró.

-¿Qué pasa? ¡Me estás asustando!

-¿Te acuerdas del guapote del avión? El qué también venía de México.

-Aham, claro que lo recuerdo. -sonreía Zoraida.

-¡Está detrás de ti! Es tu oportunidad. -decía una entusiasmada roja.

-Si, verás, es que, vengo con él.

Estallaba en risa una delgada y alta chica de pelo castaño.

-¿Qué? ¿Cómo? No entiendo nada.

-Sí, cuando te fuiste del aeropuerto, me choqué con él y... -reía viendola cara de su nueva amiga.

-¿Y qué? -preguntaba ansiosa.

-¡Y nada! Simplemente hablamos y quedamos en vernos. ¿Y tú qué? Por qué hay un melenudo que no para de mirar.

-¿Qué? ¿Dónde? -preguntaba mientras miraba hacia todas partes intentando disimular, pues sabía de sobra que Christopher llevaba ahí un buen rato.

-Detrás, no te hagas, te vi venir con él. -sonreía.

¿Qué hay detrás?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora