"Perdidos"

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-Bien hemos llegado a nuestro punto.-Maria suspiro cuando finalmente llegamos a nuestro destino, algunos empezaron a sentarse debajo de los árboles y otros simplemente ponían sus manos sobre sus caderas en signo de cansancio, yo solo me quede parada viendo como Chloé buscaba un lugar donde sentarse ya que Lex le había quitado un puesto.

-Primero descansaremos.-Suspiro Maria aun agitada por todo el trayecto que habíamos recorrido, creo que yo era la única que no estaba cansada ya que estaba acostumbrada a caminar por estos lugares.

Mire a mi alrededor y pude divisar caras de cansancio y de algunas quejas de los integrantes.

-¿Por qué no hacen caminar tanto?-Pregunto una chica sentada en una roca debajo de un árbol. La mire, parecía la típica chica a la que no debes dirigir le la palabra. Rodee los ojos cuando vi que se abanicaba con su mano muy dramáticamente.

-Bien creo que primero le diremos las reglas del juego y luego elegiremos a las parejas.-Hablo finalmente Maria.

Silbidos y quejas llego en desacuerdo con la elección del juego.

-¡No todos nos conocemos aquí!-Grito un chico que por su aspecto podría decir que era alguien quien no se metía en problemas pero nunca había hablado con él en estos cuatro años.

-Bien, chicos creo que ese era el plan. Ya que algunos no se conocen en absoluto, creamos esta idea para que puedan hacerlo, así que nada de quejas.

Todos volvieron a quejarse pero no podían hacer mucho, solo rogaba que me tocara con Chloé o Lex, o cualquier persona que no fuera complicada.

-¡Chicos!. Por aquí por favor y chicas por allá , vamos a darles sentido a su vida.-Hablo de unos de los instructores mientras hacia una fila de chicos y chicas.

-Espero que me toque con Ady.-Reclamo Chloé.

-Es exactamente porque la conoces que no te pondremos con ella.-El instructor miro a Chloé y ella solo le frunció el ceño obviamente en desacuerdo.

El señor con cara de Ogro hablaba  con Maria y no pude evitar sentir un escalofrió, cada vez que gesticulaba algunas palabras podía sentir que me miraba y luego cambiaba la vista de vez en cuando.

-¿Drew?.-Pregunto el señor cara de Ogro aún alado de Maria.

Drew salio de la fila de chicos sin decir ninguna palabra pero podía ver su expresión de confusión al pasar.

-¿Ady?-Volvió a preguntar y esta vez me llamaba a mi. A mi. Mi corazón latió con firmeza en mi pecho asustada por lo que podría decir. Nada que resultara de Drew y de mi podría ser bueno. 

Avancé algunos pasos hasta llegar en donde se encontraba ellos, podía sentir las miradas de todos sobre mis espaldas y eso solo hizo que me molestara y pusiera aun más nerviosa.

-Ady y Drew ustedes serán pareja por el día de hoy y tendrán como reto superar sus diferencias y competir en los juegos que haremos, sin más pueden retirarse.-Ahora el señor con cara de Ogro me fastidiaba aun más, no nos pregunto si estábamos de acuerdo o no, simplemente nos eligió sin importar que. Mire a Maria en tono de suplica.

-Lo siento. Esta vez yo no elegí.-Se encogió de hombros y sonrió a medias en tono de disculpas.

Esto cada vez se ponía mejor. No culpaba a  Maria por esto, pero si al señor que aún no se su nombre , pero prefería llamarlo con mi apodo. Le venia mejor.

Sentí la tensión de Drew al escuchar decir aquellas palabras de aquel señor, mordí mi labio tratando de actuar normal, era obvio que a él tampoco le cayo bien la idea de ser parejas.

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