Estaba sentada en el césped de piernas cruzadas durante el descanso, como todos los días. Comiendo una barra de chocolate, como todos los días, mientras leía un libro.
El libro era de mi agrado, "Paper Towns" decía la portada. Tenía mi mirada fija en las hojas de este hasta que un chico se sienta al lado mio, Michael, Michael Clifford. Era... bueno, es mi crush desde 3° grado; sentí algo raro en mi estomago.
Lo miré sorprendida y rápido dirigí la mirada al libro tratando de ignorarlo. Empezé a leerlo hasta donde me quede pero no me podía concentrar. Sentía su mirada, me estaba mirando.
-Hola- espera. ¿Me estaba hablando a mi? Trate de contener mi grito fangirl para no asustarlo.
«Respira, Laya, respira»
-Ho-hola Michael. - dije con una sonrisa, pero sin mostrar mis dientes.
-¿Cómo has estado...?- pregunto alargando la última palabra señalando que no sabía mi nombre, ouch.
-Laya, me llamo Laya- presione mis labios y mire para otra parte encontrándome con mi chocolate, mi delicioso chocolate. -Y estoy muy bien, gracias- hable recordando la pregunta qué me había hecho. Estire mi brazo tratando de alcanzar mi chocolate qué estaba sin terminar, pero en su envoltura, del suelo.
-Genial- oí que susurro mirando para el suelo.
-¿Y tú?- pregunte dándole un mordisco a mi chocolate. Volteo hacia mi rápidamente y me dedico una sonrisa. Mierda, en algún momento me desmayare.
-Muy bien- hizo una pausa. -muy bien- Pero esta vez susurró. Deje mi chocolate, sin terminar de nuevo, en la pequeña bolsa qué tenía al lado mio.
Después de un silencio incómodo mientras volteabamos a distintas partes, se dignó a romper el silencio.
-Veo qué te gusta leer, ¿eh?- dijo levantando sus comisuras de los labios.
-Eh... si, es uno de mis pasatiempos favoritos- hice lo mismo que el, sonreir.
-A mi... me gustan más los videojuegos- dijo rascando su nuca mientras miraba hacia al frente. Le puse más atención a su cabello y vi qué lo tenía de un color rosa. No es mi favorito, pero se le veía demasiado bien.
-Oh, bueno...- no pude terminar la frase porque el timbre sonó, dando señal de que el descanso termino y era tiempo de regresar a clase.
-Bueno, es hora de regresar a clase, por lo visto- dijo levantándose. Enseguida se levantó sacudió su pantalón, «el que se le veía jodidamente bien» y me tendió la mano para que lograra levantarme, la cual obviamente acepte. -Hasta pronto... - dijo mirándome fijamente y sonriendo. Iba decirle mi nombre de nuevo pero me interrumpió. -...Laya. Fue un gusto conocerte-.
-Igualmente, Michael- dije sonriéndome nerviosamente y alejándome a dirección de mi casillero.
No quería irme, pero al estar cerca de el me ponía nerviosa, y supongo que hoy había sido también mi día de suerte.
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chocolate;; m.c.
Fanfiction—¿Te gusta el chocolate? —Sí, ¿y a ti? —También, pero me gustas más tú.
