Revelaciones

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Nos encontramos en una extraña choza en la cual se encontraba una joven durmiendo, por lo que se puede observar, no estaba teniendo sueños muy bonitos.

En su inconciente los recuerdos de un Pikachu con extraños movimientos, un Leavanny bastante habilidoso, un Melmetal bastante poderoso y un Infernape de extraña apariencia barrian el piso con ella y sus pokemons

-No... detente... tu no puedes ganar- Murmuró casi suplicando

Finalmente la imagen de un entrenador de cabello oscuro se hizo presente con un sonrisa confiada al lado de todos.

"Eres solo una niña" se mofo con malicia

-No, no, no, ¡Yo no soy una niña!- grito con desesperación

"Solo eres una niña inútil... Tal vez alguna de las otras pueda hacer bien tu trabajo"

Una sombra empezó a crecer desde su espalda tomando la forma de un hombre, uno que ella conocía bien y cuando una mano se poso sobre su hombro finalmente la chica despertó agitada.

-¡Mierda! ¡Dónde está ese tipo!- pensó furiosa

De un salto se puso de pie, lista para combatir notando que ya no estaba en la ciudad, sino que ahora se encontraba en un a pequeña pero acogedora choza de madera.

-¿Donde estoy?-penso confundida-Dónde están mis Pokémons?- exclamó preocupada al ver qué su cinturón de pokeballs estaba vacío

También comprendió que ya no llevaba su armadura puesta, solo tenía un short de color negro con una línea blanca a los costados y una blusa roja de cuello.

-Espera... ¿No me quitaron eso verdad?- pensó con miedo, buscando algo

Pero por más que lo intento no encontró aquel objeto que le resultaba tan preciado así que son más decidio salir de la choza con cautela.

Al asomarse por la puerta observó algo que la dejo perpleja, un hermoso campo florar que se extendía hasta perderse en una zona boscosa, era un lugar pacifico y único, además de verse a lo lejos un montón de montañas que parecían rodear todo el lugar.

-¿Dónde estoy?- pensó con seriedad

Para la joven esta era la primera vez que veía un lugar así, regularmente toda la vegetación de las regiones había desaparecido, o almenos la más delicada, los caminos boscosos se habían vuelto prados extensos de maleza y hierba seca.

Una de las flores de pronto empezó a moverse, resulta que era un Floette que danzaba por ahí.

-¿Cómo es que hay un Pokémon aquí? Se supone que capturaron a casi todos los Pokémon del mundo- pensó confundida

Se percató de que el bosque también tenía movimientos de Pansaurs, Ninjask, Buterfrees y Beedrell entre otros.

-Este lugar es increíble- murmuró sorprendida y gustosa de toda la vida de aquel misterioso lugar

Ella siguió explorando la zona por lo que rodeo la choza dándose cuenta de que a unos cuantos metros había un gran lago de agua cristalina con una pequeña cascada.

Ella nunca había visto algo así en su vida y de alguna forma ver algo así la llenaba de una alegría única.

-¿Es hermoso no?- cuestionó una voz misteriosa con gracia

-¡Tu! ¡Do-donde estamos!- reclamó temerosa al descubrir quien era su acompañante

-Las preguntas aquí las hago yo... ¿De dónde sacaste esto?- pregunto con firmeza

El conocido Ash se encontraba sentado en una de las ramas de algún árbol con un colgante dorado en su mano.

La chica se vio intimidada por la seriedad que mostraba pero trato de no mostrarse débil ante la persona que la derrotó.

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