¿Suerte o destino? (~Finalizada~)

Capítulo 51

~Flash Back~

Era esa antigua época en la que los hombres vestían traje y las mujeres vestidos y heme ahí paseando entre el mundo humano mezclándome como ellos, para tener 1800 años debo admitir que me mezclo muy bien con los humanos, en fin iba caminando como si fuera un humano de la ata sociedad, debo admitir que los humanos son curiosos y a la vez repulsivos tanto hombres como mujeres, iba caminando pensando en qué hacer cuando de la nada choque con un humano, genial, simplemente genial, me levante para pedir disculpas como todo un "caballero" cuando vi con quien choque me topé con un cabello castaño perfectamente acomodado ni un solo cabello fuera de su lugar, unos ojos verde esmeralda que se veían preciosos que hacían juego con su piel pálida y su vestido azul aqua que le hacía mucha pero mucha justicia, me levante y le ofrecí mi mano para ayudar a levantarla, ella la acepto y le dije:

Zalgo: Perdone mi momento de distracción que hizo que la tirara bella dama

X: Acepto sus disculpas joven caballero

Su voz, su bella voz, es tan hermosa, creo que los humanos no son todos tan asquerosos como pensé, aquella belle mujer hizo una reverencia y se despidió como toda una dama, creo que será bueno que sepa un poco de ella, solo... por... saber más de los humanos... sí eso y dicho eso empecé a seguirla como el rey demonio que soy

Meses de estar siguiendo a aquella bella dama que cualquiera diría que soy un acosador pero no, simplemente averiguo de los humanos, en uno de esos momentos cuando seguía a aquella dama ella fue a un lago en el bosque donde se quedó observando unos momentos, se veía hermosa como siempre, yo por mi lado estaba detrás de un árbol observando cuando dijo:

X: Ya puede salir de ahí joven caballero que me acosa

Me sorprendió ¿Cómo supo que la seguía? Así que temeroso salí de mi escondite ella volteo para observarme para al finar decir:

X: A sí que mi acosador es el caballero que me choco hace tiempo atrás

Zalgo: No te acoso, solo...

¿Qué podía decir para que no sonara como un loco o le diera miedo?, ella se acercó, puso su mano frágil en mi mejilla y dijo:

X: No importa como lo digas, era acoso señor, aunque no sea humano lo que hacía en el dialecto humano es acoso

Zalgo: ¿Co-como sabe que no soy humano?

X: Siempre he sentido algo raro al lado de gente que no es humana y cuando choco conmigo sentí lo mismo y desde ese día siento que algo me sigue, así que tomándome el atrevimiento de preguntar ¿Quién es usted, que es y qué es lo que quiere conmigo?

Yo solté un suspiro y dije:

Zalgo: Mi nombre bella dama es Zalgo, soy un... un... de-demonio y la seguía para saber cómo es la vida de los humanos

Ella abrió sus ojos como platos como si hubiera visto un fantasma, me preparaba para oírla gritar y verla correr pero en un momento ella bajo la mano que tenía en mi mejilla y la extendió hacia mí a manera de saludo y dijo:

X: Mi nombre es Esmeralda, Esmeralda Smith, encantada de conocerlo señor Zalgo

Me sorprendió su actitud pero me gusto que ella no corriera de mí, después de eso, ambos empezamos a pasar tiempo juntos hasta que un día mientras paseábamos ella se desmayó, la lleve a lo que los humanos llaman hospital pero solo me dijeron lo que me destrozo por completo, ella estaba enferma de algo que en ese entonces no se podía curar, quería pedirle que se casara conmigo, que fuera mi acompañante en el infierno pero jamás paso, ella termino estando en cama y poco a poco aquella vida que tenia se escapó de sus ojos poco a poco, moría lentamente y yo como un idiota de 1800 años no sabía cómo curarla, busque de toda forma posible ayudarla pero no pude al final ella dijo que quería que la dejara irse, pero que siempre estaría conmigo y que le agradaba haberme conocido, después de eso ella se fue, no pude hacer nada por ella

~Fin Flash Back~

De ahí no volví a encontrar a otra persona igual a ella hasta el día de hoy, creo que le daré una oportunidad a esa humana después de todo creo que hay humanos que aun valen la pena y mantienen mi interés en los humanos y evita que tenga aun deseos de acabar de un solo tajo a toda esta podrida sociedad