Cartas a un chico emo

XVI

3 de Agosto del 2015

Cuando llegue al metro tu estabas con tu novia, aún que se notaba que estaban en un ambiente incómodo aún así yo la envidia, solo por estar contigo.

El metro había llegado, me subí sin dudarlo, pero cuando me di vuelta tu me estabas mirando, en el momento que nuestras miradas se cruzaron, pero tu desviaste la mirada.

Sentía que el metro se tardaba horas en irse, pero justo cuando las puertas comenzaban a cerrarse entro un chico, no le tome importancia, ni siquiera lo mire, hasta que él me hablo.

Hola.

Lo mire, era tu amigo, el que me había invitado a tomar algo.

Hola. Dije dudosa.

Quieres ir a tomar algo, yo invito.

No, estoy ocupada.

Dije en el tono más frío, pero neutro, ya que aquel chico era bastante guapo, además de que tampoco quería ser grosera.

Vamos, al menos dame tu numero.

Insistió, suspire, porque debía ser tan guapo, vamos, tienes que ser fuerte.

No.

Dejo de insistir.

El metro se me hizo eterno, pero al llegar a mi estación, el chico bajo conmigo, yo seguí como si nada, por un segundo creí que era coincidencia, pero no! Me siguió hasta mi casa!

Maldicion! Que quieres?. Le grite

Quiero tu numero. Dijo decidido.

No! Ahora vete.

Entre a mi casa, me fui a mi habitación, sin quitarme la ropa me acosté y me dormí.