Prólogo

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Aún no me creo que haya entrado en este maldito ascensor. Las paredes parece que se estén estrechando cada vez más y más. ¿A que idiota se le ha ocurrido pintar el ascensor a rayas blancas y negras?
Por fin cuando llego al piso 25 las puertas se abren de inmediato y salgo. ¡Aire fresco!

Ahora en la oficina muchos me miran asombrados, hasta llegar al punto en que solo se oyen mis tacones chocar contra el suelo.

Llego delante de la puerta del despacho del Señor Adams y llamo a la puerta. Una estupidez porque la puerta es transparente y me ha visto desde que he salido del apestoso ascensor. Sonriente se levanta y camina hasta la puerta.

- Adelante.

Tomo aire y pongo una de mis sonrisas al entrar. Me acomodo en una de las sillas que hay enfrente de su mesa.
Este despacho huele a una mezcla entre tabaco y ambientador de limón, lo cual está haciendo que me empiece a marear.
Saca unos papeles de un cajón y los deja caer enfrente de mi mientras toma asiento en su gran sillón.

- ¿Y bien? -alzo una ceja.

- Nuestra cadena televisiva está pensando en que protagonices nuestro nuevo reality show.-explica haciendo un gesto extraño con las manos.

- ¿Y que se supone que debo hacer en ese supuesto reality?-pregunto mientras echo un vistazo a los papeles.

Se levanta rascandose la cabeza y anda a mi alrededor.

- Ahí queria yo llegar.-sigue.- Claramente no va a tratar de tu perfecta vida como modelo internacional. No. Es más bien un experimento de como sería la vida de una famosa como lo eres tú si tuviera que hacerse pasar por una simple adolescente durante unos meses. -Vale creo que la olor me ha llegado hasta el cerebro porque he dejado de entender a este hombre.- En este caso serías Becca Johnson, una muchacha de diecisiete años que lleva una vida totalmente normal: va a la escuela cada mañana, trabaja, comparte habitación con más gente, hace amigos...

La verdad es que el hombre seguía hablando pero yo le dejé de escuchar en cuanto oí ir a la escuela y trabajar. ¿Hola? Yo no iba a poner un pie en un maloliente instituto en mi vida. Siempre he estudiado en casa y eso no iba a cambiar ahora.

- Olvidelo no voy a ir a un instituto público.-me levanto de la silla y me dirijo a la puerta, mi mánager se dispone a abrir cuando el director nos interrumpe.

- Por supuesto, no pasa nada. Le daremos el papel a Margaret Hasel, parecía muy interesada en ello...-susurra en tono amenazador mientras se deja caer en su silla.

¿Margaret Hasel? ¿La misma que me robó la oportunidad de salir en la portada de Best Model el año pasado? Oh no. ¡Ni hablar!

- ¡Acepto el trabajo! -grito girandome hasta él.

- Sabía que cambiaría de opinión señorita Derris...-sonríe.

Maldito, y bien que lo sabía.

Firmo el contrato como me índica y nos quedamos hablando un rato más para que me de instrucciones del funcionamiento del programa.

Dentro de dos meses diré adiós a Rebecca Derris y daré la bienvenida a Becca Johnson, la nueva alumna del Atlanta High, en California.

¿Quién es Becca Johnson?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora