Capítulo 2

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El ruido de la licuadora que provenía de la cocina hizo que despertara de un salto. Tomé mi celular que se encontraba en la mesita a lado de mi cama, eran 10:00am, di un suspiro, estire mi cuerpo y me levante, me dirigí hacía mi ventana y Observé la linda vista que olvide que tenía, el sol estaba radiante y los rayos del sol brillaban más que nunca haciendo ver el mar tan claro y hermoso, en general era una hermosa mañana.
Un ruido que provenía de mi estómago hizo que reaccionará, baje las escaleras y me dirigí a la cocina obedeciendo a aquel sonido, Nick ya estaba levantado y preparando el desayuno.
— Te hice un omelet — Dijo poniendo el platillo en la barra.
—Am... No me gusta el huevo — respondí.
Ignore el platillo que había preparada y tomé un pan tostado agregándole un poco de mantequilla y sirviéndome un vaso de jugo.
— Después del desayuno podemos ir a dar una vuelta, hay una festival por la playa, quizá podemos ir — comentó Nick mientras comía.
— Como sea — Respondí con la boca llena de comida. Fue lo último que dije para dirigirme a mi habitación.
La comunicación con el iba de mal empeor, ¿pero de que puedes hablar con alguien a quien no has visto por un largo tiempo, alguien que dejó de ponerse al corriente de tu vida?, alguien que decidió dejarte ahí, sola.
Mi celular sonó y tenía la idea de quien podría ser.
— ¿Si? ¿Mamá? — Estaba segura de que ella era.
— ¿Cuentame como va todo por haya?— Su voz sonaba emocionada. Aún que no la podía mirar imaginaba su cara y su desesperación por que le contará todo.
— Mamá a penas llegue ayer — le recordé.
—Bueno, ¿Que tal esta Nick? — preguntó con más calma.
Di un suspiro antes de contestar a su pregunta. — Am... Bueno el esta bien — Respondí.
— Cariño no seas tan dura con el, dale una oportunidad ¿si?, tengo que irme Wanda necesita unas tomas, seguiremos hablando de esto. Te quiero— Su voz sonaba un poco apresurada.
—No prometo nada, también te quiero — fue lo último que dije.

***

— Bien, más tarde nos vemos aquí en la rueda de la fortuna para comer, ¿okey? — Dijo Nick.
Yo sólo asentí ante sus instrucciones y salí a reccorer el mini festival que se encontraba en la playa.

Después de haberme hecho un tatuaje de gena me dirigí a un puesto de accesorios, había cosas muy lindas. Opté por comprar unas pulceras y un collar que contenía un corazón algo diminuto.
— La chica que se fue sin despedir —  interrumpió esa vos mientras ponía las compras en mi bolsa. Lucy se encontraba en el mismo puesto que yo.
— Am... Lo siento no podía regresar apestando a cerveza — dije mientras cerraba mi bolso.
—Si lo vi todo — soltó Lucy con una pequeña sonrisa.
Caminamos por varios lugares, Lucy me llevó a los mejores puestos que estaban en el festival  y nos subimos a una que otra atracción. Lucy era una chica muy buena onda, sencilla, divertida y un poco tímida. Me agradaba.
— Iré a saludar a unos amigos, ¿bienes? — preguntó entusiasmada.
— La verdad prefiero esperarte aquí — Respondí con una media sonrisa.
Me senté en la orilla del mar esperando a Lucy. Cada vez que me sentaba y miraba la vista que tenía enfrente me hacia relajarme, me agradaba este lugar pero pensé que si mamá estuviera aquí tal vez estas vacaciones no serían tan malas. Observe  el reloj de mi celular eran las tres en punto de la tarde aún faltaba para ir a comer con Nick sólo esperaba que esta comida empezará y terminara bien.
— La chica de la cerveza — interrumpió esa voz mis pensamientos. Y ahí estaba ese chico de pelo güero y ojos azules sentado a mi lado.
— El chico que tiene un amigo idiota— dije con sarcasmo. Los dos nos miramos por un momento y sonreímos ante mi comentario tan tonto.
— ¿Y tienes nombre? O ¿prefieres que te siga llamando la chica de la cerveza? — preguntó con una sonrisa.
Reí ante aquel apodo estúpido y embarazoso. — Me llamo Amanda — lo observé y le dedique una sonrisa de lado.
— Un gusto Amanda, yo soy Calvin — dijo en una forma amable pero chistosa.
Quite mi vista de el y seguí mirando el mar, por un momento hubo un silencio incómodo que no sabía como romper.
— ¿Crees en el amor a primera vista? — para mi suerte el había roto ese silencio pero con una pregunta que no me esperaba.
—¿Disculpa?—  dije sin tener idea a que se refería con esa pregunta.
— Que si crees en el amor a primera vista —  Repitió. No sabía que responder aquello, sólo sabía que existía en películas o novelas de amor.
— Creo que es posible — dije no muy segura de mi respuesta.  El me observó y yo sólo le dedique una sonrisa de lado para quitar mi vista de el y seguir mirando el mar.
— ¿Sería tonto si te digo que me interesas?, me gustaría conocerte, saber más de ti — pronunció Calvin.
«Dios» pensé, no sabía que decirle.
¿Saber de mi?, pero que podría decirle, mi vida no era nada interesante sólo una joven de 20 años con padres divorciados y que por cierto no tiene una buena relación con su papá, ¿Que hay de interesante en eso?. Le regale una sonrisa de lado antes de responder. — Am... No soy nada interesante — respondía alsando mis hombros.
El me observó de pies a cabeza, algo que me hizo sentir un poco incómoda.
— Te equívocas — Fue lo que dijo. — Se que hay cosas interesantes en ti — Continuó Calvin sin despegar sus ojos de los mios.  Sus ojos tan azules como el mar que tenía enfrente de mi, eran tan hermosos, me gustaban.
— Mañana iremos por una helado y no aceptó un “No” por respuesta — dijo con una sonrisa.
— Okey —  le dije regresando le una sonrisa.
— Con que aquí estas — Habló una tercera voz que se encontraba  atrás de nosotros.
Los dos giramos para ver quien era y se trataba del chico culpable de que mi ropa apestara a cerveza.
— Pero si es el Idiota — Habló Calvin riéndose por lo que le había dicho.
No puede evitar sonreír ante ese comentario.
— Amanda te presentó a J.J mi mejor amigo — dijo con orgullo y una tierna sonrisa.
J.J extendió su mano en forma de saludo.
— Amanda — Dije accediendo a su apretón de manos.
— Oye en realidad siento lo del otro día — dijo J.J avergonzado mientras se tocaba su cabello.
— Esta bien, no te preocupes pude quitarle el apestoso aroma a cerveza a mi camisa de Ramones favorita — dije giñandole un ojo.
Mi celular vibró en mi bolso señalando que tenía un mesaje, tenía en la mente que tal vez se trataba de mamá que quería volver retomar la conversación que habiamos dejado inconclusa cuando me habló por celular pero al ver la pantalla supe qje edtaba equivocada.

«¿Donde éstas?, ya estoy en la rueda de la fortuna
                              Nick»

Sabía que se había llegado la hora de comer, «El martirio empezo» pensé. Guarde mi celular en la bolasa.
— Bueno chicos tengo que irme — dije interrumpiendo su plática y bromas que hacían.
— Mañana te veo aquí — Habló Calvin refiriéndose a la invitación que me había hecho hace un rato.
Yo acenti con una sonrisa y me despedi agitando un poco la mano.



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Bueno aquí les dejó el segundo capítulo, esperó que les guste este proyecto en el que estoy trabajando, creanme habrá sorpresas.

Comenten su parte favorita no les cuesta nada y no olviden votar por favor❤.

Xoxoxo.

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