O84 ▬ shooting stars

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🧬 RIDE OR DIE !
eighty—four; estrellas fugaces

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Me removí en la cama al sentir unos besos en mi hombro que subían por mi cuello hasta llegar a mi mejilla

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Me removí en la cama al sentir unos besos en mi hombro que subían por mi cuello hasta llegar a mi mejilla. Sonreí inconscientemente al escuchar la risita de mi esposo, su brazo pasó por mi cintura para acercarme a él, sentir el calor del cuerpo de mi Carl era lo mejor de despertar con él cada mañana. Giré para quedar frente a él, me fue inevitable sonreír al ver su cabello alborotado y su sonrisa se agrandó al ver que no le quitaba la mirada de encima.

—Buenos días —murmuró, acercándose a mí para dejar un suave beso en mis labios.

—Buenos días —dije al separarnos mientras llevaba mi mano a su mejilla para acariciar con suavidad su piel, trazando un camino con mis dedos por todo su rostro.

No tenía idea de cuánto tiempo estuvimos ahí abrazándonos mientras escuchaba los latidos de su corazón y podía sentir como su cuerpo se movía con su respiración. Él seguía rodeando mi cintura con su brazo mientras que con la otra mano acariciaba mi mejilla con delicadeza.

Estar con Carl siempre me hará sentirme como la adolescente enamorada que era, y recordarme lo enamorada que sigo de él. Despertar cada mañana a su lado es increíble y la familia que construimos es lo mejor que me ha pasado. Nuestra burbuja se rompió al escuchar el llanto de Maddie, mi esposo se levantó no sin antes dejar un beso en mi frente para salir de nuestra habitación e ir a la de nuestra hija.

Me levanté de la cama y me dirigí al baño. Salí unos veinte minutos después de ya haberme aseado, bajé las escaleras y sonreí al ver a mi hermano sentado en la sala jugando con mis hijos y a mi esposo con Max preparando el desayuno.

Aren se levantó del sofá, se acercó para abrazarme y dejar un beso en mi frente. —Te extrañé —dijo mientras acariciaba mis brazos con delicadeza.

—Yo también —murmuré, pellizcando su mejilla. Él sonrió frunciendo su nariz.

—El desayuno está listo —la voz de mi hija me hizo girar sobre mis talones y dirigirme a la mesa donde ya se encontraban una bandeja con waffles y huevos revueltos.

𝟭. 𝗥𝗜𝗗𝗘 𝗢𝗥 𝗗𝗜𝗘 ── carl grimes ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora