Lo que los mayores jamás te contaron.

I

Querido Sean,

Hay algo dentro de tí que muere por salir a la luz. Algo que te inquieta, algo que no te deja conciliar el sueño cada noche. Te destroza poco a poco llevándose cada pedacito de tí.

Ese "Algo" es lo que los mayores jamás te contaron.

Ellos jamás te enseñaron a soñar.
Tú volabas libre por el cielo con tus magníficas y bellas alas, hasta que un día ellos te las cortaron.

La herida duele, sangra. Pero más que una herida, lo que duele es mirar atrás y saber todo lo que te dejaste.
Tenías un montón de proyectos en mente para que cuándo al fin consiguieras volar más alto que cualquiera.
Pero te cortaron las alas en medio de una noche de invierno Sean.

Y la caída dolió.

Claro que dolió.