Capítulo 22

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Ya podía tomar la siesta que tanto necesitaba en verdad estaba agotada últimamente no había podido dormir bien. Mis problemas literalmente me estaban hundiendo con ellos, mi apariencia había decaído.. las palabras de mi katy se me hicieron presente ante esta situación.

Ella tenia mucha razón a pesar de todo sigo siendo carolina o'connor.. no podía dejar de brillar por ellos. Pero espero que mañana todo salga bien aunque en realidad el único problema era yo, mi pensamiento irracional.. el miedo a lo que digan los demás.

No permitiré que ellos arruinen lo poco que me queda. Podre estar destrozada por dentro pero no les dare el gusto.. saldré adelante de una u otra forma.

Mi madre siempre decía que no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista. No se si podría decir si es un mal.. pero para mi lo era.

Solo tenia una sola pregunta cuánto tiempo durará? Seré fuerte porque nunca me considere débil pero no se..si pueda resistir mucho tiempo. Me asombre al escuchar el tono de llamada de mi teléfono ya era más de media noche.. a caso no tiene nada mejor que hacer?

- Sabes que hora es?
- Disculpa solo que me enteré de algo..
- De que?
- Qué ahora tu y katy son amigas? (tono de burla)

Es en serio? Me llama a mitad de la noche para burlarse de mi?

- Burlate todo lo que quieras, eres un insensible.
- Insensible? Mira quien lo dice.. la que le hizo la vida miserable.

Tenia razón no era nadie para decirle que no debía burlarse de mi.. después que le cause tanto daño.

- Como sabes que hablaba con ella?
- Todos en el salón quedaron extrañados.
- Por que no se buscan una vida? En vez de estar pendientes de los demás?
- Veo que estas de malas.
- Como pretendes que este si me llamas a media noche para burlarte de mi?
- Burlarme de ti? Jamás lo haría.
- Claro ahora yo estoy loca, por dios miguel no seas tan cínico.
- Sabes duerme, niña mal criada.
- Pudrete, colgué.

No puedo creer que sea tan pedante.. en verdad eva y el son tal para cuál. No puedo creer que pude llegar a pensar que era buena persona, cuando me trata asi no me arrepiento de los tres años en los cuales lo hice sufrir.

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Sonó la alarma ya eran las 5:30 am solo habia dormido un par de horas, asi mi apariencia jamás mejoraría.

Me estire perezosamente lo cuál ya se me hacia una costumbre, era delicioso aunque me provocaba seguir durmiendo pero hoy era diferente. Hoy iba a demostrarle a los demás que era fuerte que no me verán mal, no lo lograran.

Realmente me encontraba optimista todo debía mejorar, inmediatamente me levante e comencé a arreglarme luego de tanto tiempo.

Luego de una larga ducha ya lista para enfrentar cualquier situación me sentía bien.. hace mucho tiempo ya no me sentía asi. Tenia una enorme sonrisa marcada en mi rostro, oculte mis ojeras con un poco de maquillaje.

Camine hacia la sala donde se encontraba mi madre repitiendo su rutina, tomando un enorme vaso de cafe mientras observaba las noticias.

- Madre, ya estoy lista!
- Hija, tenia tanto tiempo que no te veía asi.

Mi sonrisa se borro un poco al escuchar ese comentario

- Si..
- A caso conociste a un chico?
-Reí- Nada de eso madre, solo que quiero estar linda
- Claro entiendo, ya nos vamos.

Mi madre se veía tan felíz solo con el hecho de saber que estaba intentando recobrar mi vida. Camino al instituto no podía evitar observar mi alrededor con gran determinación.

Tenía algún significado? Me estaba volviendo loca al pensar que lo que me rodeaba tenia algún significado.

- Adiós, madre
-Qué te vaya bien!

De nuevo estaba aquí en la cárcel a pesar que intentaba cambiar la perspectiva de las cosas seguía observando el instituto como una prisión.

Mientras caminaba lentamente observé a eva platicando con un grupo de personas.

Anteriormente solo me hubiese quedado observando pero hoy iba hacer diferente.Con una enorme sonrisa en mi rostro me fui acercado poco a poco a eva. Con gran entusiasmo dije:

- Eva! Como estas?
-La mirada de eva mostraba confusión- Carolina? Wao.. hace tanto tiempo que no te veia asi.

En realidad estaba igual que todos los dias la diferencia era mi actitud. Ya no tenia la actitud de derrotada sino la de ganadora.

- Reí, que vamos hacer hoy?
-Su mirada reflejaba picardía- Vamos hacer lo que más nos gusta!
- Que cosa?
- Fastidiar a los demás.

Al escuchar esto no me alegraba más bien me parecía absurdo pero me deje llevar por mi instinto.

Sonó el timbre, eva y yo llevábamos 43 minutos hablando
con todos realmente me gustaba estar en contacto con las personas en vez de estar oculta.

Mi personalidad salía de flote de nuevo, sentía ese poder que en algún momento tuve. Amaba como se sentía tener confianza en si misma.. en mi mente solo tenia en mente una oración "Nada ni nadie podra hacerme daño de nuevo"

De algo estaba segura ya no volvería a ser la niña tonta la cual creía en la verdadera amistad. No permitiría que nadie me pudiese lastimar de nuevo..

- Ya debo subir
- Esta bien, nos vemos.

Luego de despedirme de eva caminaba con entusiasmo hacía el salón. Al entrar observé claramente todo el salón, antes de caminar hacía la esquina del salón donde se encontraba el grupo de miguel observe el puesto donde durante años tenía la rutina de tomar asiento en ese sitio.

Luego de haberlo observado camine hacía el grupo de miguel y coloqué mis cosas en un puesto cercano. Todos me observaban fijamente como sino pudiesen creer lo que estaban observando.

Por un momento me sentí incómoda ante la situación sin embargo mi cara se encontraba relajada o tal vez era el maquillaje.

- Como están?

Miguel me miraba fijamente como si tratara de averiguar algo.

- Qué haces aqui?
- Sarcasmo- Yo estudio aquí.
- Ojos en blanco- No se supone que eres inteligente?
- Sabes, tienes razón. Me levante rápidamente para moverme de puesto pero una mano me sujeto.

Intervino cleo

- Ni se te ocurra, me parece bien que hayas tenido el valor de acercarte. Y miguel deja de molestar a los demás.

Los otros cuatros chicos que pertenecían al grupo solo observaban la situación.

Tome asiento nuevamente e empecé a copiar rápidamente. El resto del grupo platicaba cómodamente.

Luego de terminar de copiar el pizarrón entero, intente unirme a la conversación.Después de todo no era tan malo como pensaba solo que las personas que no compartian los mismos gusto de ellos, los consideraban diferente. Pero este grupo era uno de los grupos más noble que pude presenciar, en este grupo pareciera que no existiera el engaño, la envidia o algo parecido y de cierta forma me confortaba.

Cayendo en mi realidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora