Capítulo 23

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Aquí me encontraba platicando con el grupo de los "mongolicos". Ellos si eran diferentes a los demás pero me sentía tan comoda platicando con ellos, sentía que aunque dijera la peor cosa del mundo me seguirían viendo de la misma forma. Todos estaban realmente felices que me haya incorporando al grupo excepto el..

Miguel era el único que no estaba conforme con mi presencia se podía sentir la indiferencia que me tenia a metros. Sin embargo me sentía comoda a pesar de que me estuvieran observando como si me fuesen a asesinar.

Sonó el timbre rápidamente todos salieron en menos de dos minutos me encontraba sola o eso pensaba yo. Agarré mis cosas y cuando caminó hacia la puerta escucho aquella voz

- Que pretendes?

Sabia que era el..pense que se habia ido con los demás pero no fue asi.

- De que hablas?
- Mirame a los ojos.

Lo mire fijamente..nuestras miradas era una lucha continua, el intentaba intimidarme pero no lo lograría.

- Suspire, habla de una vez.
- Alejate.
-Qué?
- No te hagas la tonta.. sabes a que me refiero.
- No lo hare.
- Eres muy atrevida.. para ser tan débil.
- Me ire.. si me das un motivo.
- Un motivo? Tengo miles querida, te parece super normal que la chica que nos hizo la vida miserable ahora sea nuestra amiga?

Tenia razón.. pero no le daria la razón.

- Tu.. lo que estas es dolido.
- Que?
- Como escuchaste, no quieres que me acerque porque tienes miedo. Reí me tienes miedo..
- Alejate
- O sino que? Me vas a golpear? Querido si eso es lo que quieres hacer no debes esperar tanto, haz lo ahora.
- Ahora si, te volviste loca!

Coloque mis cosas de un lado y camine hacia el.

-Golpeame.. si eso es lo que quieres.
- No! Yo no golpeo a las chicas
- Pero yo fui la que te hizo la vida miserable durante mucho tiempo esta es tu oportunidad de vengarte.
- Alejate! Eres una manipuladora.
- Querido tendrás que buscar cosas mas hirientes si quieres que me duela.

Me aleje poco a poco de el pero un movimiento de el cambio la situación. Me encontraba acorralada pegada en la pared por este idiota, en su mirada reflejada diversión.

Lo estaba disfrutando..esta situación tan incómoda o al menos para mi. Mi voz sonaba temblorosa moría de miedo pero en vez de distanciarme como lo haría una persona normal comencé a insultarlo.

- Crees que me pegues a la pared me afecta? A caso no te has visto?
- Querida mueres de miedo, tus labios estan blancos y tienes una cara de pánico impresionante.
- Reí.

Como saldria de esta situación? Que haría? No tengo fuerza ni se defenderme.. si gritaba iba hacer un espectáculo aparte dirían que tenemos algo y jamas! Primero muerta que avergonzada.

- Sueltame o sino..
- Que?

Aprovechando que se encontraba desprevenido, lo mordi en el brazo. Jamás habia hecho eso pero era mi unica escapatoria..

En este momento reí agarre mis cosas y camine hacia la puerta ya apuntó de salir dije "Adiós, idiota"

Que me paso? No debia hacer eso.. se supone que tengo que cambiar, pero se lo merecía.

Al salir de mi salón me encontraba completamente fuera de si.. tanto que sin querer tropecé con un chico.

- A caso no ves por donde vas?
- Pero si tu..fuiste la que tropezó.

Esa voz se me hacia familiar pero no recordaba.. hasta que vi claramente de quien se trataba. No era posible, era el.. alejandro.

Se veía tan relajado como siempre sin embargo la que no aguantaba la vergüenza era yo.

- Ale?
- Caro?

Sonaba tan lindo cuando lo decia el.. concentrare carolina!

- Disculpa es que ando un poco disfraida.
- Te sientes bien?
- Claro, porque lo dices?
- No sabría decirte solo pareces un poco nerviosa.
- Suspire..
- Sabes que puedes contar conmigo.
- Sonreí- lo se.. lo que sucedio fue..

Nuestra conversación fue interrumpida por katy, a caso se conocían? Este chico conoce a todos.

- Ale voy a bajar.
- Esta bien, cuando termine de hablar con carolina te acompaño.

Luego de estar incómoda por la aparición de katy.. ya que me odiaba o en realidad no, era muy confuso.

- Que me ibas a decir? Disculpa la interrupción.
- Nada, tranquilo.
- Segura?
- Si, ya debo irme.

Eran novios? O amigos? Para ser amigos ella lo observaba con demasiado cariño. Porque me importa? El es solo un conocido que fue muy amable conmigo.

Carolina estas pasando por una situación difícil como para que te guste un chico y menos puede ser el.

Camine hacia el comedor por la hora no habia que hacer ninguna fila. Compre y camino hacia la biblioteca sonó el timbre.. es en serio? Ahora como haria? Mi segunda hora lo veía con una profesora muy estricta por lo tanto que no tuve mas opción que dar una gran mordida a mi pastelito y tener que echarlo a la basura.

De nuevo caminaba hacia mi salón..molesta y con hambre, podria ser peor?.

Al entrar tome asiento en mi nuevo puesto, se me hacia dificil acostumbrarme pero en estos momentos solo pensaba en un delicioso y sabroso desayuno. No soy ese tipo de chica que ama las dietas simplemente no sirvo para eso porque amo comer.

Una pregunta de cleo me saco de mis hermosos pensamientos sobre comida.

- Te admiro.
- Por que amiga?
- Por lo que estas haciendo..se que no es nada fácil para ti.

Por fin alguien me entendia.

- Si hubiese seguido tu consejo hace mucho tiempo.. hubiese sido más fácil.
-Recuerda que todo sucede por algo.
- Como vas con tu novio?
- Excelente.

Amaba cuando cleo platicaba de su amor porque en su mirada reflejaba ternura y era algo muy lindo. Algún dia pasare por lo mismo? Sere igual de tierna? No lo creo.. no soy ese tipo de chica y jamás lo sere.

Mi vida de una u forma estaba cambiando poco a poco lo que no sabía que estaba entrando a territorio desconocido y que lo que había vivido no era nada con lo que venia.

Cayendo en mi realidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora