Capítulo 3

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-. Creo que voy a vomitar.- Caminaba a toda velocidad por los pasillos de la academia, solo podía ver pasar las bloques de piedra que cubrían el suelo y de vez en cuando los grandes murales de ladrillo de piedra con enormes ventanales. La reunión había terminado pero mi padre aun insistía que lo acompañara al palacio real para darle la bienvenida a su majestad que había regresado al reino de Radio. Pero después de nuestro encuentro las ganas de volver a verlo se esfumaron, si no hubiera sido por momo quien me acompañaba desde el incidente con su majestad ahora mismo estaría de camino al palacio, y con los intestinos sobre la palma de mis manos. Habría demasiadas preguntas que no sabría muy bien que responder, mucho menos descubrir que nuestra amistad cambie por el hecho de yo ser una chica, eso es lo que más me aterraba.

Ichigo siempre fue alguien muy importante para mí, desde que el capitán kuchiki me adoptara. Las tardes de risas en nuestro jardín secreto, cuantas veces limpio las lágrimas que salían en cada desplante de mi honorable hermano. Sin olvidar aquel baile donde supe quién era en realidad, y del como mi padre me dijo que algún día iba hacer mi deber de cuidar a la familia real. La enorme tristeza que me inundo cuando supe que él se tenía que marchar, pero había una promesa, no solo con ichigo. Tenía que volverme fuerte, y algún día protegerlo como el alguna vez lo hizo.

-. Señorita rukia se encuentra bien?-. Me había perdido por un momento el recuerdos de años atrás, la presencia se había esfumado como toda el contexto que me rodeaba, aun podía percibir lo rápido que mi corazón palpitaba al recordar los bueno momentos de un par de chicos jugando en la orilla de un pequeño lago.-. Que fue eso de que teníamos una misión en la cuidad.-. Sabía que nada más al salir la chica se apresuraría a preguntar.-.No tendrá que ver con el encuentro un tanto extraño con su majestad y el hecho de su padre quería dar las bienvenidas al amigo y su alteza.-. La forma curiosa con la que abordó el tema por la forma tan nerviosa en la que había hablado en frente de mi padre y comandante general y del hecho de que había una especie de misión cuando era fin de mes y los preparativos del festival del Lirio ya se acercaba, las misiones se habían cancelado y por ende no habría misiones -. No claro que no... -. Su mirada divertida y la forma burlona de su elevada la ceja me habían detenido mis pasos, se había posicionado frente a mí con el afán de detener mi veloz caminata.-. Solo que...-. Sabía que tenía que ser lista y decir algo que la convenciera, porque a pesar de no ser las mejores amigas y mi poco experiencia en tratar con las personas, sobre todo porque nunca se me daba bien eso de mentir, era más que obvio que estaba por ser descubierta.

Tenía que pensar algo y rápido antes de ella terminara por atar cabos. No quería un sin fin de preguntas que no sabría que responder. Hasta que un petición de apenas esta mañana llego a mi.-. Momo se te olvido que esta mañana me fuiste a buscar para pedirme ayuda con algunos encargos que capitán Aizen te había pedido personalmente en la cuidad y no querías fallarle.-. No era la mejor forma de despistar a momo sobre todo poniendo sus sentimientos por el capitán, pero es más que obvio que ella seguiría buscándole sentido el porqué de mi rechazo en ir al palacio.

Tenía que evadir el tema. No era una chica fácil de engañar ni mucho menos burlar. Pero había algo que nublaba los sentidos de la pequeña chica y era el capitán de la quinta división. Si su motivación tuviera nombre seria Sōsuke Aizen. No puedo decir que sea la mejor forma de evitar el interrogatorio pero tenía que intentar.

-. Como pude a ver olvidado algo tan importante -. Hablo sin perder más tiempo se aproximó a las escaleras principales, la velocidad y su motivación no la dejaban ver el camino.-. Voy por los caballos -. Gritaba mientras se acercaba a las escaleras principales que conectaban con la puerta de salida.

No puedo negar que me sentía culpable por a ver utilizados sus sentimientos pero, simplemente no quería responder a preguntas donde ni yo misma sabría que responder.

El pueblo no estaba tan lejos de la academia, era cuestión de minutos a caballo para estar frente a él. Los adornos colgados, las bandera de un sol y un lirio hondeando en cada casa y lugar alto de la cuidad por la llegada de su majestad vestían a la cuidad.-. Veamos qué es lo primero en la lista.-. Se cuestionaba mientras buscaba dentro de su bolso.-. Tenemos que ir a ver al herrero.-. Me indico nada más ver en su pequeña libreta.-. Después al sastre y al florista.-.

.-. Y como para qué?? .-. Era muy extraño.-. Pasa que él está encargado de las flores y del traje del rey para esta noche.-. Aun no comprendía muy bien a que se refería.-. Por dios rukia no me digas que se te olvido la fiesta de bienvenida que se hará en honor al príncipe y a su invitado -. Como se me tuvo que olvidar.-. Por tu cara puedo casi jurar a que se te olvido.-.

Sabía que no iba a evitar de nuevo nuestro encuentro y del hecho de que este tan sorprendido del que su mejor amigo se haya convertido en una chica en unos segundos. Por más que quiera evitar que el se aleje por ese detalle, tarde o temprano tendré que enfrentarlo.

.-. Y al herrero por qué? -.

-. Son las espadas para los nuevos reclutas.-. Respondió para después seguir nuestro camino.

Las horas habían pasado y el cielo se empezaba a teñir con tonalidades desde naranja hasta morado. La cuidad estaba completamente iluminada por candelabros, habían flores por cada rincón, las vistas eran hermosas, sobre todo los lirios que empezaban adornar las calles.

-. Son hermosos los lirios -. Pense en voz alta

.-. Los lirios?.-. Se acerca momo a una pequeña fuente.-. Si son lindos.-. Coge la pequeña flor flotante.

.-. Ahora entiendo por qué es el emblema del reino.. .-. Me acerque y realizo la misma acción.-. Por su belleza... .-.

.-. Te equivocas.-.

.-. EH??-. No comprendía a que se refería.

.-. El lirio representa a la promesa que una vez el sol le hizo a la luna.-. Momo coloca de nuevo la flor sobre el agua de la fuente.-. Que algún día se volverían a encontrar.-.

Había escuchado la historia del gran amor que el sol tenia por la luna que renuncio a su inmortalidad solo para que el alma de su amada volviera a nacer....

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El Principe y la Guerrera (ichiruki )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora