Capítulo 2

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La noche había sido larga, y parecía que una vez más volvía a vivir la misma escena, sentada en el suelo en una esquina de la celda, la cama tendida sin ni tal sólo una imperfección y el sol apareciendo por la ventana, la diferencia es que yo esperaba mi destino, estaba preparada, no volvería a ver a mi familia, ni mucho menos a Lara, y en tonces unas lágrimas botaron de mis ojos que ya no eran grises, si no de un extraño color púrpura, estaba preparada para morir si el Tribunal lo decidía, ni yo misma pude creer que era un error, una simple alteración de elementos como había dicho Dexter.
Pero,¿ por qué yo? ¿ese era mi verdadero destino?
La puerta se abrió de par en par, me seque mis lágrimas, fingiendo frotarme la cara.
Era Tino.
-¡ Venga!
Su voz varonil me había servido de despertador, en aquellos momentos anhelaba encontrar un lecho seguro donde dormir, pero no iba a darles la satisfacción de verme débil, así que me levanté y avanze recto sin dedicarle ni una sola mirada.
. . .

El pasillo era largo, pero otro tipo de pasillo, el techo era de metal, a unos metros más hacia delante había unos cuartos de cristal donde se podía apreciar perfectamente que dentro habían unos hombres vestidos con una ropa verde, con mascarillas y guantes en las manos, en cierto modo me recordó a los científicos que se encargaban de crear los medicamentos para todos los sectores.
-Ya estamos aquí...- Abrió la puerta Tino, yo pase sin mostrar ni un gesto de duda, en esa sala casi congelada estaban Dexter, Kaleb y Kalena.
- Buenos días Alyssa.- Saludo Kalena.
Yo no respondí observé la camilla que había detrás de ellos.
-¿ Qué hago aquí?- pregunte con el ceño fruncido.
- Bueno Alyssa, hemos decidido encajarte en algún sector... No hacia falta ver tus informes para saber que eras una perfecta alumna en Neutral... por tanto probaremos a camuflarte en Ventus.
Mi expresión cambió, no podía saber como me sentía exactamente, por un momento pensé que iban a experimentar conmigo, pero en cierto modo estaba contenta de poder seguir viva.
- La parte mala de esto Alyssa es que vamos a someterte a unos ciertos cambios... para ello debes de estar de acuerdo, ¿Lo estas?
- ¿Qué tipo de cambios?
El rostro de Kalena permanecía espléndidamente sonriente.
- Unos muy simples.
- Y dolorosos.- Añadió Tino.
Kalena me Condujo hasta la camilla donde me acomode.
La mujer se giró y dejó que unos cuantos científicos vestidos de verde me atendiera.
- Abre los ojos.- Dijo uno de ellos que llevaba una gran aguja en la mano.
Dos mujeres me cogieron de ambas manos cuando había estado descuidada unos instantes, unos hierros que sobresalía de la camilla me emprisiono los brazos y piernas.
-¿ Qué hacen?- pregunte nerviosa, el corazón me iba a estallar en cualquier momento.-
¡ espere!- pero ninguno de ellos se detuvieron abrieron mis ojos y comenzaron a introducir gotas.
La primera fue como un ácido quedándome lentamente las corneas, la segunda en el otro ojo hizo que soltara un fuerte grito de dolor, automaticamente los hierros de la camilla me liberaron y yo apoyé mis manos sobre mi cara, algo dentro de mi impedía que me las quitará, como si eso fuera un alivio para mi, me dolía demasiado como para poder hablar, me dolía demasiado como para poder gritar, tan sólo quería llorar, pero tampoco podía.
- Al principio vas a sentir ciertas molestias, vista doble, mareos, pero serán síntomas que perdurará un par de horas.
La voz de Kalena era la que menos quería oír en aquellos momentos.
- cuando te sientas mejor dirígete a la puerta.- una voz desconocida sonó tan cerca de mi que deduje que estaría a mi lado.
. . .

Las horas pasaron con lentitud hasta que pude ver algo, hasta que pude gritar de rabia en mis adentros y llorar a solas, cuando ya me sentí preparada para otra bomba de dolor. Salí, abriendo la puerta, fuera estaba Kalena y Tino esperándome.
- ¿ quieres verte?- me preguntó amablemente él ofreciendome el mismo espejo que la primera vez.
Yo afirme con la cabeza y observé mi reflejo, mis ojos de un color verde tan claro como los de Ventus lucia sin parecer haber sufrido ningún tipo de dolor ni irritación.
- ¿Sorprendida?- No respondí a la pregunta de Kalena.- Dije que habría que camuflarte...- Agradece que no te hayamos cortado ese largo cabello.
Los tres avanzamos por otros pasillos, pero este era incluso más largo que los otros y más iluminado.
- Despidete de todo aquello que conocías... bienvenida a los sectores.- Abrió la puerta Tino, una fuerte brisa me recibió, a unos metros incalculables de altura estaban grandes ciudades, todas y cada una de ellas con una pequeña plataforma que se elevaban, todas, excepto Ventus.
- Habrá que cambiarte esa ridícula ropa blanca de Neutral.- comentó con tono ofensivo Kalena.
- Son...
- Si son todos los sectores... al fondo y a la derecha Fogaral, Seguidamente Terra, después Ventus y Luego Aqua. Y Viento es tu elemento, subiras hasta llegar en tu sector.- Informó Tino.
-¿Cómo?
- Los de Ventus estáis como una cabra, suben sin plataforma, con una simple corriente de aire.
Yo seguí observando al miembro de Agua y entonces Kalena intervino.
- Te espero arriba Alyssa.
La morena avanzó hasta que pareció ser abducida por una fuerte bocanada de aire frío.
-¿ Tu no vienes?- pregunté.
- Ni de broma...- Contestó Tino antes de sentir su empujón.
La ola de aire elevó mi cuerpo a muchos metros del suelo, cosa que hizo que comenzará a gritar asustada, cerré los ojos, pero no quería perdermelo, no quería dejar de sentir esa sensación, la sensación de volar, así que abrí los ojos y observé como podía comerme al mundo, como podía ver Neutral otra vez aunque fuera de tan lejos.
BIENVENIDA A VENTUS...
¿ ESTÁS PREPARADA PARA VOLAR?

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