La Princesa Emma

Capitulo 1

Trece años más tarde...

La búsqueda por la Princesa Emma continuaba, ya que el Rey David y la Reina Snow ofrecían una gran recompensa para quien la encuentre y la devuelva a ellos. Killian y Robin, dos piratas, se instalaron en "El Bosque Encantando" con el objetivo de encontrar a la Princesa Emma.

- Buscaremos a la chica que más se parezca a la princesa, la vestiremos y la educaremos con todo lo que tenga que ver con la realeza y los Nolan. – Dijo Killian con convicción.

- ¡Y así la recompensa será nuestra! ¡Miles y miles de montones de oro para gastar! – Exclamó Robin entusiasmado.

- ¡Seremos ricos y libres! – Agregó Killian feliz.

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Emma había cumplido dieciocho años y podía abandonar de una vez y para siempre el orfanato. Estaba feliz de poder dejar ese lugar que la había hecho sentir tan miserable. En todos esos años lo único que había sentido era rechazo. Había visto como muchos niños y niñas eran adoptados, salvo ella. Lo único que la hizo seguir adelante fue la esperanza de que su familia estuviera en algún lado de Storybrooke, su colgante lo decía.

- ¡Chau! – Exclamó Emma saludando a los niños y niñas que dejaba atrás.

- ¿Todavía saludando? – Preguntó Zelena mirándola con enojo. - ¡Basta de despedidas! ¡Te queres ir, entonces vete! – Dijo agarrándola de la bufanda y empujándola hacia la reja de salida del orfanato.

- Si, claro que me voy, voy a buscar a mi familia. – Dijo Emma agarrando su colgante.

- ¿Tu familia? ¿Dónde estuvieron todos estos años mientras nosotros te dimos un hogar? – Cuestionó Zelena. - ¿Juntos en Storybrooke? – Preguntó leyendo lo que decía el colgante de Emma. – ¡Bien, si queres irte a Storybrooke entonces vete! – Exclamó abriendo la reja.

- Si, me voy a Storybrooke. – Asistió Emma saliendo del orfanato con seguridad.

- ¿Juntos en Storybrooke? – Volvió a preguntar Zelena y rió. – ¡Cuando no los encuentres y descubras que nunca te quisieron, entonces aprenderás a ser agradecida con nosotros! – Dijo frustrada.

Emma miró a Zelena entrar al orfanato y luego emprendió camino. El orfanato estaba en las afueras de "El Bosque Encantado", así que llegar al pueblo le llevaría unas cuantas horas. Pensaba que ir al pueblo era la mejor opción para encontrar la forma de ir a Storybrooke. Creía que allí alguien iba a poder ayudarla. Mientras se hacía paso por el camino que estaba cubierto de nieve, no pudo evitar sentir enojo con Zelena. ¿Agradecida? ¿Agradecida de qué tendría que estar Emma? En el orfanato le habrían dado comida y ropa, eso es verdad. Pero nunca le habían dado una familia, ni la habían hecho sentir querida o importante. Por lo cual, si había algo de lo que estaba agradecida, era de poder irse.

En cierto momento tuvo que hacer una pausa, estaba perdida. Necesitaba algo que la ayude, que la guíe. Un cartel, una señal, lo que sea. Se sentó en la nieve frustrada, dejando que el cansancio la empiece a invadir. De repente un pequeño perro apareció, agarro su bufanda y empezó a correr. ¿Sería esa su señal? Emma siguió al perro hasta que finalmente se topó con un cartel donde daban las direcciones de cómo llegar al pueblo. Emma agarró al perro en sus brazos y le dio un beso, a partir de ese momento decidió llamarlo Henry.

Una vez que llegó al pueblo fue a la estación de tren y en la boletería pidió un pasaje hacia Storybrooke. Se sintió decepcionada cuando no pudo sacarlo, ya que no tenía pasaporte, ni dinero.

- ¿Queres ir a Sotrybrook? – Preguntó una mujer morocha, que estaba detrás de ella en la fila.

- Si. – Asistió Emma.