Cuando llegamos a Francia lo unico que queriamos era descansar habia sido un viaje muy agotador.
Fuimos al hotel donde mi padre me habia hecho una reservación.
Nombre señorita?- decia la recepcionista con mucha cordialidad.
Katrina Treison.- le respondí amable.
Ah usted es la señorita Treison, su padre reservo la swit mas especial de este hotel- me sonrei mucho al escucharla.
Botones!!!- decia dirigiendose al hombre que nos llevaria nuestras maletas.
Piso 10 número 22.- le decia las ultimas indicaciones a Marcelo que al ver su credencial dejo lucir su nombre.
Bien señoritas Don Marcelo las guiara ¡Que dusfruten su estadia en el Hotel!.
Gracias!- dijimos a coro.
Despues de estar unos segundos en el ascensor, llegamos a nuestra swit donde Marcelo nos abre.
Fuimos las primeras en pasar todas se miraban contentas.
Esta super linda la swit amiga.- decia Anahis con una gran sonrisa en su rostro.
En donde dejo sus maletas señorita Treison? - preguntaba Marcelo.
Por aca no mas Don Marcelo, muchisimas gracias. - le dije apuntando el hobby dulcemente.
Por nada señorita- se retiro luego de entregarme las llaves.
Todo era hermoso, el teléfono empieza a sonar y contesto.
Alo?
Hija mia veo que ya estas en la swit, que te ha parecido?- me sorprendo al escuchar a papá ya tenia el número de la swit pero me acontento muchisimo.
Exelente papá, muchas gracias, mandale saludos a mamá.
Yo se los dare hija mia, disfruten harto! Byee.- dice papá entusiasta.
Bye bye papá te adoro- digo y corto.
No veo a mis amigas por ningun lado, entro a la habitación y allí estaban recostadas cada una en su cama. Nuestra swit tenia examente 5 camas.
Creo que de verdad estaban cansadisimas las Perlas- digo dirigiendome hacia ellas.
Todas reimos a coro pasando una tarde sensacional, comimos pizza, cantamos algunos karaokes y saltamos en nuestras camas convirtiendonos en una verdaderas niñas chicas.