Capítulo 2.

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N/A:
LAS PARTES NEGRITAS-CURSIVA SIGNIFICAN QUE SE LEEN SEGUIDO♡.
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Eran las 4:40 de la tarde. Una tarde tranquila.
Y el chico de alta estatura se adentraba en aquel negocio lleno de risas y musica ambiente, pintado de colores pastel y decoración simple pero que sin duda, contiagaba alegría.

Sin mencionar que el propósito del mismo local era el principal motivo de la alegría: 'Yozen, Ice Cream'.
La heladería mas famosa del Century Park, la plaza que solían frecuentar los estudiantes y las personas que vivían cerca.

El lugar que era testigo de paseos familiares, niños felices, reuniones de amigos y sobre todo, parejas de enamorados.
Simples citas, tal vez.

Y ese era el motivo de la estancia de Chanyeol durante ya 30 minutos en aquel lugar.
Pero, ¿de verdad se le podría llamar 'cita'?
La chica no era nada más que una de su lista de conquistas, Hyesung, la estudiante de Teatro.

Llevaba ya media hora esperando por su llegada, pero a él le parecía una eternidad.
A él nunca le había pasado algo igual, y el estar esperando ya un buen rato ahí, era estar arriesgándose a arruinar su reputación como playboy.
Y eso a su orgullo, era como si le callese un balde de agua fría.

¿Y por qué seguía ahí sentado, en espera a aquella chica?
No era como si realmente le interesara, por que no era así.

Tal vez, solo tal vez...
Era el hecho de que algo había llamado su atención sin siquiera saberlo. Algo...

O alguien.

Y había estado allí frente a sus ojos.
De vez en cuando le miraba, pero no detenidamente.

Observaba como atendía a los clientes, con ese delantal que portaba como uniforme y ese pequeño listón rojo que combinaba adornando su cabello.
Tenia una sonrisa adorable, y parecía una persona interesante... "¿pero en qué estás pensando, Park Chanyeol?" se regañó a si mismo por siquiera pensar en la descripción que había usado para mencionar su sonrisa, 'adorable'. Volvió a regañarse en silencio mientras inconscientemente fruncia el ceño y negaba con la cabeza, "¿es enserio?".

Se dió cuenta que se la pasaba haciendo gestos sin decir nada, y pensó que estaba actuando como un loco. Y así siguió hablándose consigo mismo sobre que debería dejar de hacerlo. ¿Irónico, no?
Pero entonces una voz lo sacó de sus pensamientos.

- Hey... -dijo con un tono algo extraño, como una combinación de  desesperación pero con suavidad.

- ¿Eh? Ah si, si... Perdón. -asintió y se acomodó en su asiento. Al ver a la dueña de aquella voz, se aclaró la garganta y dejo caer su cuerpo sobre la silla en una pose típica de 'conquistador'.

- ¿Entonces un helado doble de vainilla cubierto de chocolate liquido con cereal, en copa? -dictó un pedido mientras apuntaba en una libreta que había sacado de su delantal , esperando que el chico lo reiterara.

Pero éste, lo único que logró fue sentirse confundido y después abrió los ojos de una manera divertida y extraña. Lo que hizo que ella mordiera sus labios para aguantar la risa.

- ¿Qué? -mencionó confundido y con sorpresa. - Yo no ordené nada de es.. -pareció entender y se dió cuenta de lo (según él) tonto que se veía actuando de esa manera. - ¡Oye!.

La señaló con un dedo mientras fruncia el ceño , algo 'molesto'.
Mientras que ella sólo se limitó a reir levemente. Lo que hizo que Chanyeol se relajara, entendía que su actitud no era adecuada, ella solo hacía su trabajo.

- Yah, lo siento. -dijo ella con una sonrisa. - es solo que llevas un rato aquí solo, y no haz ordenado nada. Mi jefe podría salir en cualquier momento y no quisiera que te viera aquí sin consumir nada. -admitió apenada.- Te observó ya hace unos minutos, y sinceramente... -murmuró la siguiente parte:- sería algo descortés si te sacara de aquí, no me gustaría.

Y por algún motivo, con solo esas palabras, Chanyeol sintió algo que no sabía cómo llamarle.

La chica que estaba observando y que pensaba que su sonrisa... Bueno, eso; lo estaba de alguna manera 'defendiendo', si así se podría llamar.

Y no sólo eso, sino que justo ahora la tenía en frente y hablándole sin que él hubiera iniciado la conversación con algún piropo o como solía hacer con las chicas de la Universidad.

Esto para él era algo nuevo...

- ¿Y bien? ¿Seguirás esperando? -preguntó la chica captando la atención de Chanyeol de nuevo.

- Uh-uh, Yo... -balbuceó, él seguía sumido en ese pensamiento.

Y al parecer le gustaba, era un sentimiento raro en él, que no sabía exactamente cual...

- ¿Esperas a alguien, cierto? -Y ella se regañó a si misma, "claro que si, idiota" se dijo mentalmente. - Ah, es obvio, lo siento. -sonrió de manera nerviosa, a la vez apenada y dio unos cuantos pasos atrás. Él seguía sin saber qué responder.

Sabía que no podía ser eso. Pero tampoco podía negar que tenía ese 'algo'...

- Uhm... Iré por tu helado, tranquilo, que es cortesía de la casa. -susurró de manera audible para aquel mientras sonreía. Se sentía mal por la situación, el chico claramente había sido plantado por su quizás novia.
Al ver al chico sin decir nada, su sonrisa adorable se desvaneció y fue hacia la barra.

Porque a pesar de que no lo admitiría en ese momento...

- ¿Le gustará de chocolate? -dudó mientras elegía el sabor para su cliente. - ¿Vainilla? -se cuestionó y hasqueó la lengua. "Vamos, Jihae, a todo el mundo le gusta el chocolate" obvió aunque seguía indecisa.
El chico era bastante lindo, y lo notó desde que entró. Su compañera le había dicho que él la estaba viendo tiempo atrás pero ella sólo lo negaba.

Algo le decía que lo haría algún día. Y ¿quien sabe? Tal vez, si iba con suerte...

- Yah, chocolate. -decidió y comenzó a servirlo en un cono de galleta- necesita un poco de esta ricura para ese mal de amores que seguro está pasando. -dijo para sí misma mientras lo veía. Éste había cambiado de posición, y estaba viendo hacia bajo, frunciendo el ceño y seguro pensando en lo que había pasado.

Ella podía ser la primera.
Porque sin duda, tenía un efecto en él. En esos momentos su cita no rondaba por su cabeza...

- ¡Hey! -musitó la chica acercandose a él con el helado.- toma, no sabía de que sabor, así que... Bueno, si no te gusta puedo ir a cambiarlo. -lo dejo en sus manos y sonrió al encontrarse con sus ojos.

Chanyeol, confundido, por su parte miró el helado por unos segundos, volvió su mirada a la castaña quien esperaba espectante su respuesta. Sonrió y dijo:

"No tenías por qué... Pero gracias, igual lo pagaré". Ella negó sonriente- Cortesía de la casa, para el corazón -dijo divertida y él respondió con una calida y brillante sonrisa, dejando ver sus perfectos dientes.
Por lo que ella, siguió el contacto visual y si, de nuevo pudo afirmar lo atractivo que era.

Y sabía muy dentro, que tenía que hacer algo con respecto a la chica. No lo dejaría así.
Ella podía ser la primera...

Dejaron de mirarse cuando los dos escucharon el sonido de la puerta indicando que alguien más había entrado. Un cliente, su último de la tarde. La jornada se había pasado rápido después de que el chico de bella sonrisa y orejas grandes llegó.
Jihae corrió hacia la barra para atender a su cliente final.

Chanyeol la observaba detalladamente, y de nuevo sintió esa sensación al ver su sonrisa.
Se preguntó una última cosa:

¿o no es así?.

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Waaaaaa.
Lo he escrito durante mi primer día de clases en la preparatoria y bueno, no sé. Creo que no quedó nada interesante:(
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Un beso.

-Marianna x.

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