54

176 8 0
                                    

Todo es eterno mientras dura
La vida esta para disfrutarla no para vivirla

Sin querer queriendo
No os ha pasado nunca que llega el Lunes y os sentís culpables?

Esa sensación de que es un día de mierda, te acuerdas del fin de semana, se te marca una media sonrisilla en la cara, y la otra media no lo es tanto.

Justo eso me está pasando a mi hoy.

Ha sido el típico finde al que no le puedes pedir ni media más: la borrachera del viernes alcanzó el tipico nivel de rozar lo ebrio, pero que no llega, y sobrevives. De la del sábado ya no puedo decir lo mismo, porque se parecía más a la de Barney cualquier día en el Bar de Moe. Ya me gustaría que fuera por el mismo motivo que el se las cogé. Yo el sábado, empecé enrreando y luego decidí olvidar, y joder que si olvidé. La laguna que tengo, bien estaría para echar cualquier monstruo y que ni me diera cuenta.

Y claro pues el océano ese del que hablo, hoy me pasa factura. Que no es otra cosa que sentimiento de culpa, no porque hiciera nada fuera de lo normal, que según el informe detallado que me pasaron ayer al levantarme mis amigos, no la lié mucho (delante de ellos), es más por la mierda de sentimientos que salen cuando llegas a la tercera copa, y que te joden la noche.

Que a la tercera copa, empiezas escuchando nose que canción que ya te recuerda a él, y pues claro, siempre podría haberse quedado en una nota de voz, pero no, a mi me tocó, llamar, y llorar.

Y él que, no es por nada, pero es más bueno que el pan, pues se pasó a verme, y claro: LA LIÉ. Y así estoy hoy, hecha un lio. Que no se asemeja ni al que me encontré el domingo con las sábanas de SU cama, con SUS piernas y las mias.

La verdad que el "Buenos días" fue el más tranquilizante que me habían dicho en mucho tiempo, y el abrazo más gratificante que os podáis imaginar.

Luego está la parte en la que no hice lo que debía, en la que abandoné a alguien que lo dá todo, y he tenido que explicarle que el plantón no fue justo, pero sí necesario. Que yo en verdad debía pasar la noche con él, pero que la pasé con quien quería. Ante todo fue comprensible, pero su orgullo, ojito que cómo el de todos, pues le puede. Y claro aquí estoy intentando arreglar el desastre que he montado.

Aquí estoy arrepintiendome de la tercera copa.

FrasesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora