8

7 1 2
                                    

-Ay, no-dijo Dóminik.
-Sí, ya lo vi.
-¿Qué hacemos?
-Corre.
-¿Qué?
-Házlo antes de qué nos vea.
-Dóminik, ¿Qué sucede?-dijo Carlota.
-Carlota, quiero que me tomes la mano muy fuerte, no la sueltes y corre lo más rápido que puedas.
La pequeña niña siguió las órdenes de su hermano mayor mientras que este corría a no poder más y Emily ya les llevaba mucha ventaja, no se atrevieron a volver a ver atrás por miedo, aunque Emily en un momento miró atrás y vio al padre de Dóminik, pero este no corría, sólo los observaba, impotente de nada, talvez sólo estaba reflexionando o no los reconoció.
-¿Qué sucede?-dijo Dóminik.
Emily siguió corriendo por precaución
-Nada, sigue.
Al cabo de 15 minutos llegaron a la casa de Emily, entraron y se sentaron a descansar.
-Estuvo cerca.-dijo Emily.
-Sí.-respondió Dóminik
-Hermano, ¿Dónde estamos, quien es ella?
-Carlota, ella es Emily, es mi mejor amiga. Ésta es su casa, nos quedaremos con ella un tiempo.
-¿Cuánto?
Dóminik se quedó pensando y miró a Emily como pidiendo ayuda.
Emily sólo levantó los hombros y las cejas.
-Eh...-dijo Dóminik-Sólo será un tiempo, después nos iremos.
Luego de eso los adolescentes subieron al segundo piso y Emily le mostró a Dóminik y a Carlota sus respectivas habitaciones y les ayudó a desempacar, así formaría un pequeño lazo con Carlota y sabría como se siente Dóminik en su ahora casa
Las horas pasaron y Dóminik y Emily seguían hablando de tonterías que a veces se ponían muy serias.
-Oye-dijo Emily- noté que Carlota casi no tiene ropa...
-Sí, papá prefería gastarse el dinero en alcohol o en apuestas tontas antes de gastarlo en algo bueno para nosotros...
-Ya veo...
Las palabras salían de sus bocas naturalmente, no se percataban de lo qué decían o hacían sólo ellos dos... Hasta las 12: 00am.
Emily vio el reloj y se levantó con una gran sonrisa.
-Dóminik, deberías dormir, iré a hacer algo no me esperes y vigila que Carlota no se levante.
Salió disparada de la habitación de Dóminik y puso llave, no importó ya que cada habitación tenía su respectivo baño.
Luego de unas horas Dóminik escuchó ruido dentro de la casa y como alguien quitaba el seguro de su habitación pero no entraba,, sólo seguía avanzando hasta entrar a la habitación de Emily, entrar al baño, darse una ducha y poner algo en la lavadora. Las horas pasaron y todos se levantaron para ir a desayunar.
-Buenos días chicos,-dijo Emily-¿Cómo durmieron?
-Bien, gracias por hospedarnos aquí.
-No hay de qué, pueden quedarse todo el tiempo que quieran.
Desayunaron y se quedaron viendo televisión.
-Oye, ya hablé con mamá y papá, dijeron que todo bien, también me enviarán más dinero para gastarlo con ustedes.
-No creo que sea correcto, después de todo ni siquiera soy de tu familia.
-¿Y qué importa? En la tarde saldremos a comprar ropa nueva para ustedes.
-¡Claro que no! Ya has hecho mucho por nosotros, no podría pedirte algo así.
-No me lo pediste, yo quiero y lo haré.
"Me agrada la chica, tiene carácter, algo que tú eliminaste hace bastante"-Dóminik empezó a escuchar a Hellen otra vez, ya no le importaba, lo que lo desesperaba era cuando hablaba demasiado al mismo tiempo. Hellen podía tener muchas voces al mismo tiempo para torturar y manipular a Dóminik, al igual que Jerry a Emily, sólo que Emily era... Un poco diferente.

Bloody HandsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora