Junto a ti ( Un Gran Cambio)

Capitulo 17: "Deja de joderlo Pablo".

PDV Jackson.

-Relajo los hombros Jack, no puedes disparar tenso.

-Eso intento... -le digo a mi padre.

-Sigue intentando. Iré a dentro – me dice y se va.

Hace un par de horas que estamos practicando puntería. Hace tres semanas les dije todo al resto de los muchachos. Al principio no me creyeron hasta que tuvieron que vivir en carne propia de lo que estaba hablando.

Hemos estado entrenando junto con Alice, Drake, Adán y mi papá casi todos los días. Al principio se nos hizo muy difícil. Controlar la respiración, relajar los músculos, obtener buena puntería, todo.

Apunto al blanco que mi papá y Drake construyeron. Para los entrenamientos compraron varios sacos de boxeo para las peleas cuerpo a cuerpo y cuando hay que utilizar las armas. Apunto, relajo los músculos y disparo. La bala queda un poco más arriba del centro.

-Bien... Veo que tu padre te enseña bien – me dice y me volteo. Ella está a recostada en el marco de la puerta que da hacia el jardín. Ella me sonríe y yo le devuelvo la sonrisa.

-Hola... - le digo dejando el arma en una pequeña que está a mi derecha para dejar las armas.

-Creo que eres un prodigio en armas.

Me rio.

-No. Creo que solo lo tengo en los genes.

Ella ya está al frente mio y pone sus manos en mi cuello. Ella me ha estado ayudando en los entrenamientos. En estos últimos días hemos estado un poco estresados por todo lo que está pasando.

-Te extrañe hoy. ¿Por qué no fuiste a la escuela?

-Mi papá quería que me quedara "entrenando" por cualquier cosa. – le digo. – Yo también te extrañe.

-Yo más.

-No, yo más.

-Que yo más.

-Creo que estamos peor que La Nucita ¿no? – le digo sonriendo.

-Sí, creo que si... -dice divertida y me besa.

Pongo una mano en su nuca y otra en la cadera, y ella empieza a jugar con los cabellos de mi nuca. El beso empieza a ser más intenso cada segundo hasta el punto que la levanto del suelo y la siento en la mesa que tenía cerca.

Ella pone una mano en mi mejilla mientras que la otra permanece en mi cuello

-Ah.... Qué lindo es el amor.

Rápidamente nos separamos y volteamos a ver quién dijo eso. Alice se baja de la mesa hasta que está de pie en el suelo nuevamente. El que hablo es un tipo alto, cabello negro. Nunca lo había visto antes, tal vez Alice sí, pero me doy cuenta que no porque ella lo ve con el ceño fruncido por un rato.

-¿Lo conoces? – me pregunta volteándome a ver.

-Claro que no me conoce. –Dice acercándose a nosotros – soy Pablo.

Me dice extendiendo una mano, o mejor dicho un puño, el cual ¿golpeo? ¿Recibo? Yo que sé, pero la cosa es que le devuelvo el saludo. Él se me queda viendo por un rato. Me siento acosado. Me mira de arriba abajo y luego empieza a caminar alrededor de mí. ¿Ser que batea para el otro equipo?

-Eres fuerte, tienes buen físico, buena postura...

-Gracias... supongo. – le digo más que incómodo.

Al final termina poniéndose al frente mío y me mira de nuevo de arriba abajo. Lo que hace que me hierva la sangre es que él se le quede mirando a Alice y que se sonría de la manera que lo hace. Deseo.