Capítulo 2

18 1 0
                                    

—No lo recordarás? 

—¿Quien eres?  —respondí un poco asustada. —¿Por qué siempre me haces lo mismo?

—Es muy inútil que sigas luchando por algo que tu en su momento hubieras arreglado...

Me arroje al suelo, todo a mi alrededor era tan tenebroso y la niebla de ese lugar no me dejaba distinguir nada. —¿Que significa todo esto? —mi voz estaba quebrada y podría jurar que en cualquier momento rompería en llanto. —¡No entiendo nada! —
—grite un poco desesperada. —
Yo no se que significa todo esto.

—Tal vez ya no eres digna de ello. .. —Ya no lo mereces. ..

De la nada un jinete negro salió  y se dirigía a toda velocidad hacia mi.

—¡AYUDA! —grite desesperada.

—Nadie te escuchara. —la voz en medio del bosque apareció de nuevo. —Es muy inútil al igual que tus esfuerzos para recuperar lo perdido.

Sentí una punzada en el pecho lo bastante fuerte como para hacerte gritar de dolor, llevé mis manos al pecho y ellas quedaron enrojecidas con mi sangre.

—No por favor. —suplique.

—Ya no eres digna de el y lo sabes.

—¡Nooooooo! —grite lo más fuerte que pude...

—KIMBERLY DESPIERTA! — la voz de Jack me hizo despertar de todo aquello. —Todo fue un sueño.

Mi pecho subía y bajaba, mi cabello estaba pegado a mi frente y mis labios estaban temblando.

—Jack. —me abalanze sobre  el.
—El mismo sueño de siempre me atormenta. —sin poder aguantar más empecé a llorar. —Siempre me hace sentir tan miserable.

—Vamos Kim. —Jack subía y bajaba su mano en mi espalda. —
Ese sueño esta contigo desde que eras una niña, no tienes por qué preocuparte sólo es un sueño.

Yo era consciente que era un sueño,  pero el grave problema es que me hacía sentir tan mierda que por mas que razonara o comprendiera que era un sueño no lo podía ver de esa manera.

—Además ya deberías estar haciendo las maletas por que exactamente en 9 horas nos vamos de Australia.

—Mierda las maletas. —seque  un lágrima por mi mejilla. —Son 26 horas de vuelo de tan solo pensarlo  quiero llorar.

—¿Más? —Jack me sonrió. —Dale gracias al cielo que solo yo se de tu sueño extraño si np imagínate que vergüenza pasarías.

—No me entretengas más. —me pare de donde estaba. —Tengo muchísima ropa la cual tengo que empacar.

—Por cierto llegando a Virginia me  pagas la apuesta. —me guiño un ojo.

—¿Asi?. —lleve mis manos a la cintura. —¿Cual apuesta Jack?

—De que seguirías siendo virgen a los 19.

—Raios.

Comencé sacando toda la ropa de mis cajones, realmente este año en Australia me sirvió para meditar y auto prepararme para lo que me esperaba.

Empaque los 39 pares de zapatillas que yo tenia,  si lo se son muchas pero soy una mujer con gustos muy variados.

Poco a poco mi habitación fue quedando vacía,  tenia que ser fuerte para que la melancolía no me derivará.

Cuatro horas mas tarde todo el departamento había quedado vacía,  obviamente tenía los muebles que venían con el pero ya no se veía como antes.

Jack y yo optamos por pedir pizza por última vez,  además ya no teníamos comida en el refrigerador para preparar.

—¿Cómo te imaginas que será todo?

—Supongo que abra más movimiento y las noches serán más largas. —le respondi mientras mordía mi pizza.

—Yo digo que no. —se río de lado. —siempre nos amenazaban con lo mismo y nunca lo cumplieron.

—Sólo espero que no se pongan de exigentes con las rutinas de ejercicio que escogimos.

—Nah! No creo.

—Espera un minuto. —dije mientras volteaba a ver el reloj. —Son las ocho Jack mientras  verifican nuestras cosas tardaremos dos horas y el vuelo sale a las doce am.

Nos volteamos a ver con preocupación y super rápido empezamos a recoger todo,  yo me fui rápido a la ducha no quería llegar a Virginia sudada y acalorada .

Opte por usar un pantalón holgado,  una blusa blanca y mis típicos tenis negros.

Jack había salido más rápido que yo, al parecer el también había  optado por llevar ropa cómoda.

—Lista para volver a la acción. —
Jack tomó las llaves del departamento.

—Lista. —le respondi.

Le di una ultima mirada al departamento y  cerramos la puerta por última vez.

Llegamos al aeropuerto 9:30, es un desastre tener que etiquetar todas tus cosas pero es mucho más entretenido el papeleo de los autos para que pueda llegar a Virginia.

Nos subimos al avión lo más rápido posible,  por un momento creímos que no llegaríamos a tiempo ya que Jack había olvidado su identificación vehícular y por ello perdimos cuarenta minutos.

Ya se , ya se se están preguntando a que nos dedicamos Jack y Yo muy sencillo.  ¿ Creen que toda la tranquilidad de la sociedad se logra sola?  No digo que no sucedan crímenes, pero les aseguro que los casos peores personas como Jack y Yo los resolvemos.

Somos  aquellas personas que de nosotros nunca se sabe... Cuidamos a las personas de alertas máximos o mejor aún estamos moviendo las piezas de ajedrez para que nada malo suceda.

Nos conocen como agentes secretos. .. O así suelen decirnos.






























































































Misión 1-6Donde viven las historias. Descúbrelo ahora