Capitulo 2

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Mi alarma hacía eco en mi habitación, eran las 6 de la mañana, tenía que levantarme -5 minutos más- le decía a mi celular, como si me pudiera entender, apagué la desesperante cancioncita de moda que se me había ocurrido usar de despertador, al principio parecía una buena idea, me encantaba esa tonada, pero después de escucharla todas las mañanas terminaba taladrando mi cabeza cada vez más, me di vuelta en mi cama, estaba tan cómodo –Bien, hora de empezar- dije en voz alta para darme ánimos, brinqué fuera de la cama, la sacudí y me dirigí al baño.

Eché agua sobre mi cara para despertarme y quitarme lo dormido, miré mi cabello, había crecido desde la última vez que fui con mi hermano a la peluquería, aguantaba unas semanas más, pero parecía una selva indomable en esos momentos, así que decido mojarlo un poco. 10 minutos habían pasado desde que me levanté, y no se escuchaba ningún ruido, usualmente mi hermano ronca a un volumen muy alto, siempre le decía que se escuchaba hasta China, mira que estábamos en el continente Americano, de igual forma, me pareció muy desconcertante –A lo mejor ya está despierto- pensé mientras me disponía a cocinar el desayuno, unos huevos estrellados sencillos con un poco de tocino, a Sam le hice un poco más ya que le encantaba y hasta cierto punto era mi forma de compensarlo. Termine y los dispuse en la mesa.

-¡SAM!- grité en dirección a su habitación, pero nada, no me contestó

-Sam ya está el desayuno, incluso te hice más...-dije mientras abría la puerta sin siquiera tocar –tocino- terminé lentamente, no había nadie.

-JA JA JA- solté sarcásticamente –Qué buena broma Sam, no me da nada de risa, ¡Sal de una maldita vez!- pero algo en mi interior sabía que no era una broma.

Cerré su cuarto y me senté a desayunar, -¿Se habrá ido temprano?- seguía en negación, pero es que usualmente él se levanta a las 7 ya que entra más tarde, comemos juntos y me voy a la escuela, y cuando sale temprano me deja una nota para no hacer comida de más, era muy extraño, de igual forma, terminé de comer, tapé con papel de cocina transparente el platillo restante y rápidamente escribí una nota para mi hermano, "Mas te vale comértelo" , y salí disparado por mis cosas.

Como era costumbre, el camión estaba retrasado, pero esa era una de las razones por la que lo tomaba con tiempo de sobra, por fortuna tenía un sinfín de música en mi reproductor, y sin duda mis audífonos no podían faltar, estaba buscando una que me llamara la atención cuando giró en la esquina el vehículo público, no conocía a alguien que le gustara tomar el "urbano". Subí, pague por mi pasaje al conductor, quien parecía no conocer la regla de mientras conduzcas no hables por teléfono y menos si llevas un camión lleno de personas, como era normal me hizo la seña de que me fuera hasta atrás, seguida por una mirada intimidante, estaba acostumbrado. 

Caminé por el estrecho pasillo entre los asientos hasta posicionarme en el penúltimo lugar, durante todo el viaje sólo escuché música, me llamó la atención que no estaba aglomerado de gente, así que tuve un pacífico recorrido sin nadie en el asiento continuo que me apretara, por fin el camión cruzó la calle principal que terminaba con la entrada a mi universidad, tomé mis cosas y pedí la bajada, el conductor frenó de manera abrupta pero no total, siempre era un suicidio bajar o subir del transporte, ni que fuera Tom Cruise, reí por lo bajo ante mi propia ocurrencia, bajé dando brincos a los peldaños de medio metro entre cada uno y grité por arriba del sonido del motor –Gracias- sé que me respondió algo, pero no logré escuchar ya que estaba moviendo la palanca de cambios enfurecidamente y pisando el acelerador a fondo, lo ignoré, supuse que me había dicho –De nada- o algo así.

Caminé la explanada principal de la universidad, sólo para percatarme que estaba completamente vacía, no lo podía creer, incluso en sábado había más gente, y en ese momento más rápido que un trueno, busqué en el fondo de mi pantalón mi celular, verifiqué la hora, y el día, efectivamente, era sábado.

KEVINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora