Capítulo 12: "-No puedo dormir"

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Sam.

Hace ya tres horas que íbamos arriba del avión y sigo sin saber a donde mierda es que vamos.

Luego de que Hailey anunciara tan mordazmente que nos íbamos tuve que ir a mi casa, tomar mis cosas e irme. Sin siquiera despedirme de mi familia por, según Hailey, razones de seguridad. Deberían creer que desaparecí y olvidarme luego.

¿Que cómo me siento? Pues como la mismísima mierda. Digo, un clan de vampiros está detrás de mí esperando a que me vuelva uno de ellos o muera en el intento, tuve que huir del pueblo que me vio crecer sin despedirme de nadie.

Vaya vida que tengo.

Hailey, desde que nos subimos al avión, ha estado muy callada y distante y, en cierta forma, no la culpo. La presión que debe sentir en este momento debe estar matándola. Su especie está obligándola entre matarme o hacerme parte de su clan.

¿Qué tan malo puede ser formar parte de ellos? ¿Será mejor la muerte, como dijo Hailey? No lo sé, sólo espero que sea lo que sea que elija ella, sea lo correcto.

-Hailey -la llamé pero sólo permaneció mirando sus manos sobre su regazo ignorándome -Hailey -insistí

Nada.

-Hailey, mírame -dije y coloqué mi mano bajo su barbilla alzando su mirada

Cuando sus ojos se encontraron con los míos pude notar en ellos un sólo sentimiento: miedo.

Hailey tenía miedo y eso sólo me producía ganas de estar junto a ella, abrazarla y decirle que todo estará bien. Que pase lo que pase, siempre apoyaré su decisión.

-No tengas miedo -susurré acercándome lentamente hacia ella y pude notar como se tensaba

Cierto, aún no puede estar cerca mío.

Me alejé lo suficiente como para demostrarle que me importa, pero sin provocar en ella el deseo de matarme.

-No puedo evitarlo -dijo apenas -Tú debes elegir, es tu vida. Pero no quiero ser la responsable de que tu vida se vaya a la mierda. Yo fui la que te metió en todo esto. Lo siento, de verdad que lo lamento mucho -dicho esto cerró sus ojos y una lágrima resbaló por su mejilla

Coloqué mi mano sobre esta y quité la lágrima con mi dedo pulgar.

-Hey, no llores. Me rompe el corazón verte llorar -dije y sonreí un poco -Estaré bien ¿ok? No te preocupes por mí -dije y ella abrió sus ojos -Y no vuelvas a repetir que es tu culpa porque no lo es. Jamás hubiéramos previsto esto

-Es que ese es el problema -dijo comenzando a alterar se un poco -Yo sabía que esto ocurriría si te involucraba mucho conmigo y, aún así, no hice nada para impedirlo -agachó la cabeza nuevamente

-Si hubiera que hecharle la culpa a alguien sería a mí. Me repetiste innumerables veces que me alejara de ti y, como buen idiota, no te obedecía. Hailey, me puse en peligro yo sólo. No te culpes por algo que, de todos, tu eres la más inocente -sonreí levemente

Ella alzó sus ojos hasta alcanzar los míos. Pude jurar como sentí que el resto se desvanecía dejándome sólo con Hailey.

Ya no vale la pena que lo niegue más. Estoy loco por ella. Me he tratado de convencer a mí mismo que no es así pero ¿para que seguir engañándome?
Hailey se metió tan a fondo de mi piel calando me por completo, que me asusta hasta que nivel puedo llegar sólo por verla feliz.

Y, rompiendo cualquier esquema, Hailey se acercó a mí y plantó un corto pero cálido beso en mis labios.

No quise presionarla porque se que para ella esto es muy difícil, así que solamente me dispuse a seguirle el beso hasta que ella se separó de mí.

Mistery © #Wattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora