Go over the stars

El pacto

-Idiota, ¿por qué no ves la televisión en tu cuarto? Intento estrenar mi nuevo "Evolution of game Slave ". Y si estorbas con tus estupideces paranormales me distraes. No esperé en la fila por dos días para que al volver a casa decidieras ver tu maldito programa de mierda.-

La chica de cabellos violáceos no parecía nada feliz a juzgar por sus mordaces comentarios. Lucía de unos 19 años, a pesar de tener solo 14. Un pesado cinturón de hebillas metálicas se deslizaba por su cintura. No podían notarse sus ojos ambarinos debajo del asimétrico fleco que poseía. Algunas veces su peinado se asemejaba a unas enormes mandíbulas de araña. Un collar de plata con forma de cráneo adornaba su cuello, y una blusa negra de manga larga remataba el atuendo. Lo que más le daba ese aire de misterio y oscuridad, eran los piercings enmarcando su rostro.

-"Mysterious Mysteries" no es un programa de mierda.- Replicó el mayor, aún mirando la pantalla de su laptop y acomodando los libros que estaban regados por encima de la mesita de centro.- Además tú también tienes televisión en tu cuarto ¿por qué no juegas con tu videojuego allí, Gazlene?-

-¡Tú, maldita sabandija! ¡Te he dicho mil veces que no me llames así! ¡Solo papá me llama por mi nombre completo! ¡Para todos los demás, me llamo "Gaz"! -Se acercó al mayor desbordando ira por cada poro de su cuerpo; al tiempo que lanzaba un puñetazo al estómago de su contrario, dejándolo sin aliento y con un horrible dolor.- ¡Eso te incluye a ti, maldito! ¡Me llamo Gaz, y será mejor que lo recuerdes bien para la próxima!-

-...Por esa clase de momentos te quiero, hermanita...-A veces ni él mismo creía que aquel pequeño monstruo fuese su hermana menor.- ...Entonces... ¿me dejarás al menos quedarme a ver mi programa esta vez?... mientras puedes jugar con tu Gameboy, escuché que Iggins intenta romper tu récord en "The Piggy Wizard Returns"...-

-...¡Nadie rompe mis récords más que yo! -Se apartó del chico y se sentó a su lado, encendiendo el Gameboy y mentalizándose para aplastar a su contrincante en el modo Online de juego.- Tienes suerte de que odie a Iggins tanto como para dejarte ver tu estúpido programa...-

Al chico se le escapó una sonrisa debido a la actitud de su hermana. Suspiró reponiéndose del golpe y encendió el televisor para esperar a que iniciara su programa favorito. El presentador del show apareció en la pantalla, hablando con una voz dramática y narrando las entrevistas que habría a lo largo de los segmentos del programa.

Pero, la paz no duraría mucho... Su padre había llegado a casa más temprano de lo normal. Pudo escucharlo debido al ruido que la puerta de la entrada principal hizo al cerrarse.

Su cuerpo se tensó, cada músculo estaba helado, paralizado completamente.

No quería otra pelea, no aquella noche...

Su padre suspiró cansado al escuchar lo que se veía en el televisor. Con cierta molestia reflejada en su rostro, arrebató el control remoto de las manos de su hijo y apagó el televisor.

El menor inhaló y exhaló aire intentando calmar su rabia, estaba completamente frustrado e iracundo.

Primeramente se quedó estático mirando hacia el televisor apagado. No quería otro regaño, no quería un sermón más, simplemente quería pasar aquella noche mirando su programa con tranquilidad durante media hora, para luego encerrarse en su cuarto hasta la madrugada. Gaz no le molestaba tanto; pero su padre... era distinto.

Su padre pasaba ausente la mayor parte del año, y solo regresaba a casa para hacerle sentir miserable y tratarlo como un insecto. Dib estaba seguro de recordar haber leído un libro parecido, la diferencia era que él no se convertiría en un gigantesco escarabajo de un día a otro.

No, no, no.

No se escaparía tan fácilmente de su vida. Sin embargo, aún era "feliz" de cierto modo. Tenía un propósito, y la llenadora esperanza de que todos sus problemas serían resueltos...