Después de regresarle la jugada a Mark, tomo de la mano a Seb, voy a mi salón, tengo que asistir a clases.
El día pasa tranquilo, y no he visto a Seb, en el salón todos me ven, en la ultima clase recibo un recadito, con la letra de Cecile.
"Hola, perra operada. Sabes, tu cabello parece una peluca barata, salúdame a Papi ;)"
Esta hija de put... la clase esta apunto de terminar. Así que me levanto y voy hacia su lugar.
Pego con el puño cerrado en la mesa, y ella ahoga un grito.
—Quieres que te salude a papi, perra. ¿Porqué? si uso una peluca barata y a ti que chingados te importa, Zorra.
Le agarro el cabello y azoto su cabeza contra la mesa.
El profesor se ha volteado y Cecile... me acusa, ¡ME ACUSA!
—Señorita Mora, a la oficina del director...
—¿De mi padre?
—A detención hasta las 3. Tercer piso, en la 5 puerta. Salon C5.
—Bien—Respondo mientras, sacudo mi cabello.
Llego a detención y la profesora esta dormida. Hay pocos alumnos la mayoría de los amigos de Seb... y en la ultima fila esta... ¡SEB!
Todos estan aburridos y ni siquiera notan mi presencia. Es agradable ser invisible, ser una mas.
Me acerco a Seb, y le acaricio la mejilla—Hola—Le digo.
— ¿Mai-te? ¿Qué haces aquí?
su amigo el del cabello negro responde.
—Somos mala influencia, bienvenida, nena, que bueno que has llegado, este marica—Dice señalando a Seb—No ha dejado de hablar de ti.
Seb... ¡Se sonroja! y no lo niega.
— Bien—Contesto—Por que yo tampoco he dejado de pensar en el.
Nos miramos, y en su mirada veo... cariño amor, tengo ganas de besar, de besarle a el.
— ¿Estas bien? ¿Quiero decir, después de lo que Mark te hizo?
— Estoy bien, pero... me falta un beso aquí.
<<Pum, el sonido de la puerta abriendo ce con una patada>>
Es Mark y mi papá...
— Maestro García—Dice Marcus—Necesito a mi hija, Maite.
— S.i si Jefe.
Me levanto y voy con mi papá no antes de ver como me mira Seb.
Vamos directo a su oficina. tiene cara de fastidio y Mark... Mark esta igual que Cecile morado he hinchado.
Tomo asiento en una silla y Mark a un lado. mi padre rompe el silencio.
— ¿Que te pasa, Maite?
—Nada—Contesto.
Mark habla.
— Claro que si, estas loca, has cambiado y no se ni por que.
—Callate, pendejo—Le espeto.
— Maite, no puedes seguir así.
me acerco a su escritorio y lo veo a los ojos.
—SI QUE PUEDO SEGUIR ASÍ, TU NO ERES NADIE PARA DECIRME NADA.
—Maite, no le hables así a tu papá—Dice Mark.
pongo los ojos en blanco, se hace un silencio y decido ir directo al grano.
—¿Por que estoy aquí?
—Mark me contó lo que paso. y tengo que decir que me decepcionas Mai.
Suelto una carcajada.
—Vas a tener un bebé con mi mejor amiga, creo que la decepcionada aquí debo ser yo.
Veo para ver como reacciona Mark pero ni siquiera se inmuta.
—No era la manera mas adecuada de enterarte eso lo se pero... déjame explicarte que va a pasar a continuación.
— ¿Aquí enfrente de Mark? ¿Vas a decir que tienes 2 años saliendo con la Alumna Cecile, y que la dejaste embarazada?
¡Si! QUE MARK CONOZCA A ESTE PERRO.
—¿Dos años Marcus? Pensé que llevaban 3.
¿Qué? ¿Mark lo sabia?
—Mark ¿Tu lo sabias?
—Maite, Mark lo supo todo el tiempo.
—¿Eso es cierto Mark?
—Así es, baby.
Me toco la frente y me acuesto en el suelo, esto no puede pasar.
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Todo perfecto, menos yo.
Novela JuvenilEn la vida debes de buscar la felicidad. ¿Qué pasa cuando naces en una familia perfecta pero nadie te conoce? ¿Qué debes hacer si tienes al novio perfecto pero no es perfecto para ti? ¿Hasta que punto te dejarías llevar? ¿Se puede encontrar la felic...