Una nueva vida

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Pasaron 2 semanas hasta que mi mente empezó a despejarse. Hasta ese momento, me dedicaba, básicamente a alimentarme, asearme y dormir.
A la tercera semana, comencé a tener conversaciónes más fluídas con papá y aunque los dos preferíamos seguir durmiendo y no despertar, luché contra esa idea e intenté sacar a flote las cosas.

El día 25, retomé mis clases. Estaba en un curso duro y no podía permitírme perder más tiempo.
Pero, ¿en realidad creeis que en casa todo iba a seguir siendo como cuando mamá estaba viva?

El señor James, mi padre, empezó a volver tarde del trabajo, y cuando lo hacía, llegaba tambaleándose, con una borrachera increíble y al dia siguiente hacía como si no hubiese pasado nada.
Aquello, se convirtió en rutina, dia tras dia y sin darme cuenta, estaba creando en mi interior una gran coraza. Mis amigos me apoyaban pero yo no les hacía caso y ese ser, lleno hasta los topes de alcohol, decició desentenderse de mi en un noventa y cinco por cien.

Una sombra del ayerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora