Finalmente, mi padre decidió que la mejor solución era entrar en un centro de desintoxicación y como yo aún no tenía la mayoría de edad..
Me iban a enviar a un internado, como si fuese un chico sin padres. Allí viviría y estudiaría mientras que él aguantara aquel proceso por el cual, dudaba mucho que fuese a cambiar.
Así pues, me despedí de mi gente más cercana y me marché con todas mis pertenéncias en una mochila.
Llegué a la puerta calado hasta los huesos. ¿Por qué? Pues porque había tenido que caminar veinte minutos bajo una lluvia incesante.
Me asignáron una habitación y recé por mi madre, y por mi, no quería saber ni que compañero me habría tocado. ¿Fumaría, bebería? ¿Sería más mayor?
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Una sombra del ayer
Подростковая литератураEsta es una história sobre un joven, el corazón del cual se volvió frío y duro como la misma piedra. Todo cambió en el trance de tiempo de un pestañeo.
