El sotano

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Dejo la puerta abierta y bajo las escaleras lentamente intentando hacer el menor ruido posible, llego hasta abajo y alumbro a todos lados pero no veo nada, cuando soy un paso la puerta se cierra muy rápido, suelto un grito de susto y busco el apagador -rápido!!! Rápido!!! Rápido!!! Rápido!!!- digo desesperadamente mientras busco donde está el apagador, lo encuentro y pensó la luz, me siento un poco aliviada pero no del todo, veo a todos lados y no veo nada, sólo en un momento cuando empece a investigar todo el sótano me llego un olor muy potente a muerto, me dieron ganas de vomitar pero cada vez era más potente, la lámpara yo arma van en mis manos es lo que tengo para defenderme, el olor se hacía cada vez más potente y era como si tío era a un muerto de años justo en mi nariz para poder olerlo y asquearme, -el sótano es gigante- digo susurrando, veo a todos lados, y no veo nada llego muy profundo al sótano nunca había estado ahí, y todo se empieza a nublar, no veo nada, intentó regresar pero no puedo mis piernas no responden -maldita sea!!!! Que pasa!?!?- después de unos minutos de intentar moverme de apaga la luz y vuelvo a gritar prendo rápidos linterna, y ya me puedo mover, me voy corriendo hacia las escaleras e intentó abrir la puerta -ábrete... Por favor...- la pateo repito una y otra vez lo mismo mientras comienzo a llorar de la desesperación, sacó la llave y se me cae la linterna, abro la puerta, salgo corriendo y sierro, empujo el mueble para impedir el paso y me voy hacia mi cuarto, subo corriendo las escaleras, entro a la habitación y vuelvo a empujar otro mueble, busco mi celular y me voy al baño, me encierro, y entro en la regadera, cerrando bien el cancel.

El sótanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora