Daniel se levantó de su silla y se sentó de nuevo con la chica. No oíamos lo que decían, pero ella sonreía todo el rato, lo que -según Kayla- era buena señal.
-¿Ves? -Kay miró a Cameron-. Eso es lo que hay que hacer.
-Gracias, Kayla. No sé qué haría sin tus clases particulares de amor -dijo, sarcástico.
-Te harían falta algunas.
La respuesta que dio Kay me hizo soltar una carcajada.
-Escucha a Kay -dije, empezando a reír-. Sabe lo que dice.
-Payasa...
-Plasta.
-Tonta.
-Estúp...
-¡No empecéis! -gritó Brenda-. Callaos y mirad, creo que el plan de Kayla funciona.
Cam me miró con odio, y yo me limité a poner los ojos en blanco. A continuación miré a la otra mesa. Daniel y la chica reían mientras tomaban sus batidos. El chico nos miró un segundo y nos guiñó un ojo, a lo que todos respondimos con una sonrisa.
Liam, Kayla y Nolan se levantaron.
-Vamos a por otro batido -explicó Liam-. ¿Venís?
-No -respondí-, yo todavía no me he terminado el mío.
-Ni yo -añadió Cam.
-Yo me quedo a vigilar a estos dos -Brenda nos señaló a Cameron y a mí-. Podrían hacer una pelea de fuego mientras no estamos.
Levanté una ceja y miré a Cameron, que estaba haciendo el mismo gesto que yo.
Nuestros amigos se fueron y nosotros nos quedamos en silencio.
-Se parecen a vosotros dos -comentó Brenda-. Dos compañeros que dirigen un proyecto. Y tienen los mismos colores de pelo y ojos que vosotros.
-Es cierto -afirmó Cam.
Asentí con la cabeza. La verdad es que sí que nos parecíamos: la chica era morena y de ojos azules, como yo, y Daniel tenía el mismo color de pelo y los mismos ojos verdes que tenía Cam.
De pronto, y para nuestra sorpresa, Daniel se acercó a la chica y la besó.
Giré mi cabeza hacia la izquierda y me encontré con los ojos de Cameron, quien estaba igual de asombrado que yo.
-Eh... Excepto en eso -dijo Brenda, refiriéndose al parecido.
Seguía mirando a Cam cuando mi amiga tosió falsamente. Aparté la mirada y cogí mi batido de nuevo, para beberme lo que quedaba de él.
-Se está haciendo tarde, ¿nos marchamos ya? -propuse, intentando cambiar de tema.
-Eh... Claro -respondió Cameron.
Me levanté y seguí a Brenda. Cam iba detrás de mí, bebiéndose su batido.
No tardamos en reunirnos con los demás.
Kayla tuvo que marcharse a su casa, ya que tenía que ayudar a su madre a limpiar. Los chicos se fueron a casa de Nolan a jugar a algunos videojuegos. Brenda y yo decidimos ir a la suya a pasar el rato, ya que no había otra cosa que hacer.
-Los peores diez segundos de mi vida -dije cuando entramos en su habitación.
-Imagínate lo incómodo que ha sido para mí -decía mi amiga entre risas-. Estabais mirándoos como estúpidos mientras esos dos se besaban. ¡Por un momento pensé que Cameron te iba a dar un beso!
ESTÁS LEYENDO
Tengo Memoria de Escritor
Short Story"—Creía que era mi enemigo. Que le odiaba, que tan sólo servía para insultarme. Y ahora me doy cuenta de que era alguien imprescindible. —Traté de apartar la lágrima que viajaba por mi rostro—. Pero ya es tarde." Melanie, una chica famosa por las no...