Pov Mal
Hola soy Mal, tengo 16 y vivo en la isla de los perdidos, desde que tengo uso de la razon. Para empezar con esta historia debo contarles un poco de mi pasado...
Bueno. Soy hija de malefica, buen comienzo no?, he vivido con ella desde que naci, y por cierto no me pregunten sobre el amor, para mi mamá eso no esta en su vocabulario, asi como cariño o dulcura, o palabras como te quiero, no forman parte de mi vida... de pequeña siempre veia por la ventana y podria observar un mundo colorido y que se veia divertido, Vamos! A que niña de 6 años no le gustaria correr por esos campos tan verdes y compartir con esos niños alegres, pues a mi nunca me dejaron ser ese tipo de niños...
Con el correr de los años, cosas como esas me fueron desinteresando, ya que mi madre me repetia que lo unico importante en este mundo era ser mala, despreciada, vil y cruel. Asi que ser mala es mi vocacion, lo unico que importa, lo unico que puedo ser, lo unico...que puede hacer que mi madre se sienta orugolla de mi.
Cuando cumpli 8 iba por las calles en busca de comida, una niña me observaba de pies a cabeza, ojos grandes, cabello largo y desordenado de una forma elegante y de color azul oscuro con una sonrisa picara. Note que se dirigia a mi, estaba por gritarle que me dejara de observar y que tenia una patada muy fuerte, antes de abrir la boca y antes de pensar en nada, la tenia al frente y mostrandome una manzana que salio de repente de su capa azul, al tenerla cerca pude observar bien su atuendo, vestido azul claro con una cinta de azul rey al rededor de su cintura con un collar de corazon. Aparentaba mi edad.
-Pruebala se que te encantara- dijo mientras acercaba la manzana a mi boca.
-En primer lugar no te conozco y tenias una mirada de acosadora hace unos segundos- agite mi cabello hacia atras manteniendo mi mirada fija en ella para intimidarla- y si acercas eso de nuevo te juro que te patiare- amenaze señalando mi pierna -y creeme que no te gustara.
-Aush, es que te vi y pense que tendrias hambre- dijo la niña cuyo nombre no conocia. Hizo una mueca y me observo el rostro, era verdad me moria por algo de comer y no me impresionaria que se notara en mi rostro por eso me quede callada mientras continuaba- asi que te traje una manzana- completo mientras sonreia y agitaba las pestañas, frunci mi ceño.- vamos tu tienes hambre y yo quiero hacer una obra buena...ganamos las dos, no?
Ignore la ultima parte y mi interes fue a la manzana que sostenia, rayos se veia perfecta, no estaria mal darle un mordisco...
-Tu me das la manzana, yo la como y tu te vas por donde viniste- dije mientras arrebataba la manzana de su palma.
-Esta bien...con un mordisco sera suficiente- la ultima parte la susurro asi que me voltee y dije un sonoro QUE?- nada solo comela...
Le di un mordisco a la manzana, estaba maravillosa aunque con un sabor peculiar, la niña con pelo azul me miraba espectante como si esperara que algo pasara.
-Y bien? Te sientes...mejor?
-Si...mmm gracias por la manzana- me voltee para irme cuando me giro bruscamente.-QUE TE PASA ACOSADORA AZULADA?!
-No sientes ganas de... dormir?- comento haciendo caso omiso de mi comentario anterior.
-Espera...que?- y por fin, todo empezo a cobrar sentido, la manzana, su insistencia por que la comiera y la pequeña corona que se asomaba por su cabello y... el premio a la mas despitada se lo lleva Mal!- Eres hija de la reina malvada! Y INTENTASTE ENVENENARME, OH SI NIÑA VAS A CONOCER MI PATADA!
-Espera ESPERAA- dijo levantando sus manos en defensa propia- si lo soy y y...ella me obligo! Si no lo hacia me iba a regañar y...-retrocedio y me miro- ademas no me gustaria que se desepcionara de mi...
Y ahi estaba la comprendia a la perfeccion, baje mi pie y cruze mis brazos en mi pecho.
-A quien culpo, asi son las madres no? Bueno por lo menos el tipo que conozco...dire que me envenenaste...bien?
-Bien- dijo y me di cuenta de algo.
-No se tu nombre! Yo me llamo Mal, hija de Male...
-Malefica si, lo supuse, tienes sus ojos, yo me llamo Evie.
-Bueno, que te parece si le quitamos comida a los que veamos? Sigo con hambre y no soy nada bonita cuando tengo hambre creeme.
-Ya lo note chica kun-fu -dijo Evie riendose.
-Y nos has visto nada.
Le dedique una sonrisa y nos fuimos a quitarles comida a las personas, era genial, pasamos una tarde quitandole comida a todos, formamos buen equipo, ella distrayendo y yo robando esos alimentos, supe en ese momento que seriamos grandes amigas.
Espero que les haya gustado!! Un beso!☀