AMOR FALLIDO

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Todo perdía su esencia, todo lucía simple; la mínima gota de loción perdía su aroma; mi vista parecía nublarse ante los demás, veía sombras, veía personas en constante movimiento, veía el avanzar del tiempo, pero no conseguía verte.

Quizá ya no vendrías, quizá te arrepentirías, pues convivir con este ser era tu agonía.

Te fallé más de una vez, y más de una vez intenté reparar mi error, así que, ilusionado, esperé por tu perdón.

Seguí esperando ancioso con la moral en decadencia, y, una y otra vez, esperé por tu presencia.

Han pasado 10 años en los cuales me olvidaste y yo, como idiota, continuaba recordándote.

Recuerdo y sentimiento aparecían sin descanso, y yo me desvanecí imaginándome recostado en tu regazo.

Amarte fue mi delirio y no tenerte, mi castigo... Amar y no olvidar: consecuencias de un amor fallido.

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