Fraternidad Alpha.

Capítulo1: Fiesta de fraternidad.

Me siento junto a mi mejor amiga Meg, y observo que todos los habitantes de la fraternidad Alpha estamos en la sala de reunión. También nombrada sala de estar, pero nosotros la tenemos decorada por todos lados con fotos nuestras que vamos añadiendo cada año. La tradición empezó hace veintitrés años, con los primeros Alpha. Al principio solo eran hombres hasta hace seis años, cuándo Andrew Lanzers propuso la entrada a mujeres a su preciada fraternidad. Hubo más votos a favor qué en contra, si no, nosotras ni siquiera estaríamos aquí.

En la casa somos seis chicas, y diez chicos, en total dieciséis. La casa es gigantesca, pero cuanta más gente va entrando, más pequeña se va haciendo. Así que dieciséis está bien, y ésa es una de las pocas cosas en las cuales Ethan y yo estamos de acuerdo. Esa es una de las pocas cosas donde las chicas Alpha y los chicos Alpha estamos de acuerdo.

—Bien.—Habla Ethan con su voz ronca, y noto la gorra roja que esconde su pelo, en realidad todos los chicos llevan gorras puestas, y mi sonrisa se agranda más.— Está vez os habéis pasado.— Gruñe, cuando suelta esas palabras sus ojos están clavados en mi, seguramente por la broma, o también puede ser porque está sentado en el sofá que hay frente a mi. Le guiño el ojo y noto que su molestia aumenta más, lo cual nos hace reír a todas.

—¡De una manera imperdonable!— Exclama Alex, quien lleva una gorra azul. Alex Miller, mejor amigo de Ethan Rowling, no tan idiota cómo su mejor amigo, ni tan molesto, ni imbécil. Ethan es el Alpha de los chicos por decirlo de alguna manera, bueno en realidad es cómo lo dijo James. Y según él yo soy el Alpha de las chicas, el día en el que el profesor Harris habló sobre el tema de los animales y salió el tema de los lobos por el nombre de nuestra fraternidad, James nos proclamo a Ethan y a mi Alphas, y auto proclamó a los chicos y chicas Bettas. Nuestros Bettas, a ellos les pareció buena idea, a mi me recordó a Tenn Wolf y a los documentales que ponen en Discoveri Channel. Aunque debo de admitir que es divertido.

—¿Cómo mierda iremos a clase con estas pintas? Sabéis que no dejan que usemos gorras.— Se queja James, él es uno de los pocos chicos Betta que realmente me caen bien, es divertido, infantil y admitámoslo es tremendamente guapo. Todos los chicos de nuestra fraternidad lo son, pero el estúpido de Ethan y James son los más atractivos.

—Lo tuvisteis que haber pensado antes, si no hubieseis robado nuestras planchas de pelo, secadores y maquillaje no os hubiésemos teñido.— Me encojo de hombros.

—¡Os las devolvimos!— Se queja Trevor Bowen.

—Sí Trevor, pero un día húmedo sin plancha de pelo es una mierda, y a Scar casi le da algo al no poderse maquillar.— Habla Mila y todas las chicas asienten.

—Las Betta querían venganza, y su Alpha les entrego lo que sus pequeñas tanto querían.— Suspiro dramáticamente. Ethan alza una ceja y niega.

—No son pequeñas. — Una sonrisa se dibuja en sus labios mientras observa mis pechos, resisto la tentación de taparme, seria perder una batalla, mal día para llevar sujetador negro junto una camisa blanca tan fina.

—Lo sé.— Me limito ha decir.—Hoy es sábado así que habrá fiesta Alpha, yo que ustedes me empezaba ya a volver ha teñir.— Sonrío cínicamente y las chicas hacen lo mismo. Me imagino la cara que pondrán los chicos ante la bonita sorpresa que se llevaran al ver que en realidad el tinte solo dura doce horas, y al aplicárselo esta mañana solo quedan unas cuatro horas y con una ducha, el tinte desaparecerá.

—Brooks, podemos..— Scar hace una señal de tocarse el pelo y yo asiento, se a lo que se refieren. Los chicos nos miran confundidos, y una sonrisa se forma en mis labios, de golpe todas las chicas nos levantamos, ellas corren y empiezan a robar gorras, dejando cabezas de todos los colores a la vista. Yo solo me enfoco en Ethan, quien a empezado a correr pero es demasiado tarde, su bonita gorra roja ya esta en mis manos, eso le pasa por estar tan cerca del enemigo y su pelo de color rosa chillón está a la vista de todos. No puedo evitar la carcajada que sale de lo más profundo de mi garganta. Me dejo caer en el sofá donde anteriormente estaba Ethan y me hecho a reír cómo una loca.