- Y nuestro querido Carlos >.> umg-
Acabo la clase, y todo el mundo salió a sus taquillas para coger los libros de la siguiente clase. Tenía que subir al 3º piso para ir a case de inglés con mi mejor amigo Carlos. Sinceramente, no sé quién de mis dos amigos me conoce mejor. Solo había algo que me perturbaba... ¿alguna vez os habéis sentido observados? ¿acosados o seguidos? Así me sentía yo ahora mismo.
Salí corriendo a mi taquilla, tire todos los libros y cogí los de inglés y metí un portazo al cerrar la taquilla, que tenía la marca de S.S. Mis iniciales, me gustaba marcar territorio. La gente me miraba raro mientras corría y subía las escaleras de dos en dos. Me gustaba ser el centro de atención cuando mi cabello largo ondulaba por el viento, pero no por esto, y menos por la niebla negra que me rodeaba, aunque aún no sabía si alguien la podía ver o solo yo. Sudada por haber tenido que esquivar a toda la gente del instituto, llegue a la puerta del aula justo a tiempo, donde se encontraba Carlos, indiferente a todo lo que pasaba en el instituto, hasta que oyó su nombre gritado por una voz femenina y chillona, la gente me solía decir que tenía voz de pito antes de que les asesinara con la mirada. El aludido se giró y sonrió de medio lado.
- Por fin llegas petarda.- Se rio.
- Perdón, tuve un contratiempo con la sociedad.- Dije mientras se reía.
Me abrió la puerta y dejo que pasase yo antes. Él no se centraba en aprobar y le daba igual llegar tarde a clase, y la mayoría de las veces llegaba por mí, porque le hacía esperar. Yo tampoco era reconocida por las buenas notas y tampoco me importaban mucho como a Tris, pero intentaba aprobar. En lo que si iba sobrada era en inglés, por lo que el profesor me dejo pasar sin ningún problema ya que me tenía estima por ser la más lista de su clase. Me sonrió mientras a Carlos le dirigía una mirada de desagrado y desaprobación, a la cual él respondió con una risita y una sonrisa de medio lado. Las chicas se giraron en masa y al verme otra vez con él, se desanimaron. Carlos era uno de los más solicitados del colegio y me odiaban por estar todo el rato con él, aun simplemente sabiendo que soy su mejor amiga.
La clase de inglés fue entretenida, como siempre. Pero 5 minutos antes me sonó el móvil, un mensaje de texto. Lo leí con el poco disimulo que me quedaba. Era una imagen, de unas alas negras. Le di poca importancia y teclee:
¿Dark? ¿Eres tú? ¿Qué haces?
Los profesores ya estaban acostumbrados a mi pésima conducta por lo que realmente podía estar perfectamente con el móvil en clase sin que nadie me dijese nada, cuando si otro alumno sacaba su móvil, le mandaban al despacho del director... digamos que era una enchufada. Me llevaba bien con todo el personal y era envidiada por medio colegio, y no por ser popular cabeza hueca, si no por mi forma extravagante de ser y por mi pelo. No soy creída... simplemente me lo han dicho tantas veces que ya me lo he creído. Además mis amigos Tris y Carlos no se quedaban atrás. Todos querían tener un pedazo de nosotros, pero nos negábamos. Nosotros éramos amigos desde hace años y no nos gustaba que se metieran en nuestros asuntos.
Los chicos y chicas que tenía detrás observaban mi móvil con curiosidad y yo jugueteaba con él. Lo apagaba, lo encendía, ponía fotos mías y de Tris para el deleite de los chicos y fotos de nosotras con Carlos para la envidia de las chicas, música... pero nunca abría los mensajes, simplemente, no les incumbían mis asuntos. No entiendo el placer del cotilleo.
Acabamos la clase y tenía que ir a clase de Matemáticas. La teníamos Carlos, Tris y yo, así que, con mucho pesar, Carlos y yo fuimos a clase a paso lento para encontrarnos a una cabreada Patrish, lo cual no es muy recomendable. No es cómodo enfrentarte a una Patrish molesta, así que sin decir nada, entramos a clase. Molesta porque llegábamos tarde, y ella era siempre muy puntual. Entramos y Tris se sentó en 1º fila, Carlos se fue conmigo a la última, seguida de las miradas de las chicas, y ahí nos sentamos. A mi izquierda se encontraba David, y le mire de reojo. ¿Por qué todos querían saber sobre nosotros menos él? ¿Sobre mí? Puse la mirada sobre la pizarra e intente concentrarme pero no podía porque notaba un mirada constante pero no de un ángel, no de Dark. Si no de una persona, Tris. Al final me canse de tanto miramiento y cerré los ojos. Y me dormí con la dulce voz de nuestra profesora Pilar de fondo. Al final de clase, otra mirada penetrante me despertó, la de Tris y Carlos expectantes mientras se reían de mí.
-¿Qué?- Espete con una mirada fría.
- Nada, nada.- Respondieron los dos al unísono entre risas.
Sonó la campana del almuerzo y con fuerza bruta lleve a los dos al comedor para luego ir a sentarnos bajo nuestro árbol. Miradas fugaces echaban las chicas a Carlos, a las que él no daba importancia, y a un grupo de chicos vinieron directos a por mí Tris... tss. ¿Cómo se atreven a robarme a MI Tris?
Igualmente, yo le reste importancia al asunto, ya que seguía con la mirada a David con su grupo de amigos, pero tras pasar por delante de un árbol, apareció el. Dark. Sin las alas ni la niebla, pero era él. Note como mis ojos se volvieron más oscuros y profundos y no le pude quitar la mirada aunque quisiese. En ese momento, note como sin tocar el suelo, se dirigía con velocidad hacia mí, cada vez la velocidad iba aumentando más y más hasta que note que sus labios rozaron los míos por un segundo y luego se desvaneció, otra vez. Lo que me saco del trance fue Tris... que raro.
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Enamorada de un ángel oscuro.
Mystery / ThrillerSammantha Styles nunca sabia que su vida iba a cambiar en solo una noche. Ahora tendrá a un ángel oscuro como cuidador, acosador, protector... como digamos. Pero nunca la dejara sola, ni en las buenas ni en las malas. ¿Interferirá en sus amistades...